Capítulo 10

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¡Hola dulces!

No llegamos, pero acá va la sorpresa de todas formas: 

Capítulo +18

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Louis se apresuró al ala de leyes tan rápido como sus pequeñas piernas se lo permitieron; Luke y Zayn pisándole los talones.

_ ¡Habla de mi omega una vez más y voy a arrancarte la garganta!- El cuerpo de Lou se estremeció ante la amenazante voz, la misma que le susurraba palabras de amor al oído a cada noche. La furia quemando cada palabra como brasas ardientes.

Era claro que su lobo había tomado parte en la situación y eso solo hacía todo más peligroso.

Dobló por el extenso pasillo esquivando paredes y estudiantes que aparecían en su camino. No respondió ninguna queja o pregunta por su andar presuroso y sin cuidado, solo se concentro en llegar hasta Harry con el corazón a punto de escaparse por su boca.

El gruñido de su alfa lo hizo detenerse en su lugar por unos segundos, antes de lanzarse hacia adelante una vez más, empujando con algo de brusquedad a todos los cuerpos que le bloqueaban el paso.

_ ¡Harry!- Gritó casi patinando al verlo en el suelo sobre un alfa de último año.

El macho, por primera vez desde que la pelea había empezado, se detuvo. Los profesores alrededor suspiraron aliviados al ver al omega que había atraído la atención del furibundo alfa. Harry parpadeó hacia él respirando entrecortadamente. Sus rizos deshechos, su labio inferior partido y su camisa blanca pintada de sangre propia y ajena. El comienzo de un moretón morado bailaba junto a su ojo izquierdo. Profundos arañazos en sus antebrazos.

Y Troy, bueno. Lo que podía ver del macho al borde del desmayo, se veía hinchado y doloroso.

_ Ven aquí, alfa.- Ordenó suave, pero firme, extendiendo su mano. Todo el recinto en un silencio muerto, expectante. Louis los ignoró.- Suéltalo, por favor.

Harry gruñó a la cara de Troy una vez más antes de ponerse de pie y caminar lentamente hacia su chico. Sus ojos se veían extraños, distintos, oscurecidos. El omega retrocedió un paso, más por confusión que por miedo.

Louis no esperó que lo tomara con fuerza al llegar hasta él, atrayéndolo a su pecho bajo la mirada de todos y escondiera su rostro en la fuente de aroma del más pequeño. Lo sintió inspirar con necesidad mientras gruñía bajito, restregando su cuerpo contra el suyo tan pegados que podía sentir cada centímetro de su compañero.

_ Mío.- La sorpresa era obvia en las finas facciones del ojiazul. Rodeó al alfa con sus brazos, dejándose hacer; sus mejillas encendidas cual hoguera en invierno mientras veía a Troy ser trasladado a la enfermería.

Parpadeó varias veces.

El calor que irradiaba el cuerpo adherido al suyo lo envolvió por completo.

El fuerte aroma de su compañero picó en su nariz haciéndolo abrir los ojos en demasía; entendiendo.

Oh, oh. Harry estaba entrando en celo.

El cuerpo de Louis tembló en respuesta, su omega muriendo por entregarse al alfa, pero los nervios de su parte humana manteniendolo centrado, controlando sus instintos. Empujó los nervios al fondo de su cabeza y estrechó el cuerpo entre sus brazos con más fuerza.

Necesitaba estar a cargo y ayudar a arreglar aquel desastre, no dejar a su lobo tomara las riendas.

_ Tuyo, alfa.- Susurró enredando los finos dedos por sus rizos favoritos, buscando calmarlo. El mayor pareció sosegarse al poder marcar al omega con su aroma, pero no aflojó el agarre de su cintura ni separó el rostro del cuello de su pareja.

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