Termina la clase de Leyes, recojo mis cosas y salgo rápido para tan si quiera alcanzar una manzana ya que estos días no he comido nada y tampoco es que me interese.
Llego a la cafetería, no hay tantas personas, me acerco a la cocinera viendo que es lo que hay. Nada de mi agrado.
Pido una manzana porque la verdad no tengo hambre, voy a mi casillero para aguardar todo y sacar otras. Las miradas de asco hacia mí, nunca se acaban. Mi estómago se estruja y sigo caminando.
Veo mi reloj de mano, todavía tengo tiempo para sentarme y respirar, me dirijo a las gradas, por suerte hoy no he topado con ninguno de los populares eso es bueno. Veo que unas chicas salen del baño un poco agitadas y no falta decir el porque ¿no?
Hago una mueca de asco, bajo la mirada, paso por el baño voy a dar la mordida a mi manzana cuando alguien me jala del brazo, adentrandome ahí, haciendo que bote mi fruta y choque con un duro pecho y mis gafas se caigan al suelo.
—No quiero problemas así que hago lo que tu me pidas— susurro ya que no puedo levantar mi vista y mis brazos están entre su pecho y el mío.
—Oye, Kayla eres muy miedosa, te pueden manipular rápido— la voz de Justin entre risas. Me separo rápido y veo a los demás chicos ríendo de mí.
—¡Mierda! Hicieron que botara mi manzana y lentes ¡Joder, con ustedes!— lo golpeo en el pecho, suelta un quejido, ahora yo rio, levanto la fruta y lentes.
—No te molestes, tenemos que decirte algo— informa Zac.
—Pues hablen, quiero una manzana, esto era mi comida— me quejo como niña.
—Te la daremos. Chillona— asegura Caleb en tono burlón.
—Te vamos a recoger a las siete. Hay fiesta en casa de Zoe, cuando pasemos ya debes estar afuera esperando— se acerca a mí.
—Okay. ¿Saben que esto no es un hotel?— comento con asco acomodando mis anteojos y ellos sonríen maliciosos.
—Es una escuela, que proporciona sexo de cualquier chica— habla Haminton.
—No de todas.
—¿No? Hemos saboreado a la mayoría, incluso de primer ingreso— habla un Justin pensativo.
—Yo no he pasado por ninguno de ustedes...
—Bien. Por Zac, el cual no contó cómo estuvo la movida— responde Caleb.
No es cierto.
Veo a Zac quien esta mirandome directo, de arriba a abajo y se detiene en mi torso.
—Zac y yo no dormimos juntos, ustedes pensaron mal— explico retrocediendo unos pasos.
—Tú con tus actos empiezas los rumores— comenta Haminton.
Antes de salir añado:
—Realmente son asquerosos cada uno de ustedes— intercambio miradas —Quiero mi manzana, ahora.Dicho esto salgo de ahí porque no soporto otro segundo junto a ellos.
Estoy afuera esperando a los chicos, sentada en las gradas de mi casa. Falta poco para que sean las siete. Un chico que reconozco desde lejos se para frente a mí. Caleb lleva un pantalón ajustado azul, camisa negra cuello ''v'' vans negras y despeinado.
—Eres puntual, vamos que nos esperan— hace un ademán para que salgamos del callejón donde vivo y entremos al auto. Me siento en el copiloto ya que viene solo.
—¿Y los demás?
—Ya están allá. Esperándonos.
El silencio se hace presente, no hago el intento en hablar, no tengo nada que decir. Después de un largo recorrido llegamos a una casa grande. Con lo que invirtieron en esta casa, pagaría lo que me queda de instituto y universidad.
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Chicos Problemáticos
Teen FictionAntes llamada" Chica tímida ante los ojos de los demás. Nerd: Lentes adornando su rostro, fan de la lectura, anti social, sin amigos y ropa anchas. Los populares simpre haciendole bullying, maltratandola no importando cuanto la lastimen, física y...