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10. Mi Culpa

GRACE ROTTIMARIE

Todo es estrategia, conozco bien el lugar dónde viví encerrada la mayor parte de mi vida, y al notar que a Helena no le preocupa ni en lo más mínimo la vida de Georgie, será más sencillo escabullirme y salirme con la mía.

Mi primera parada: la cocina.
Mi primera arma a la mano: Un Cuchillo (el mismo que mi madre usó para hacerme daño)
Salidas: Puerta de en frente, escalera al segundo piso, puerta de atrás.
Escondites: Alacena alta, Lavavajillas, bote de basura.

Tomo el cuchillo de cocina y lo guardo en una orilla dentro de mi bota. Analizo el lugar, pero decido no quedarme aquí. Subo escaleras arriba, llego a un pequeño pasillo donde se conectan la habitación de mi madre y la mía.
El seguro de mi habitación estaba roto.

Escucho que mi mamá entra en la escena y comienza a buscarme en toda la planta baja. La madera rechina bajo mis pies, a pesar de que hago todo lo posible para aminorar el sonido, no lo logro.

Subo a una silla en mi cuarto, para palmar el techo... necesito saber si esa soga sigue allí...

-Grace, Grace, Grace.... siempre te gustó jugar al escondite, cierto?-. Mi madre comienza a subir las escaleras, pero me he armado un plan.

Cuando mi mano finalmente da con la soga, tiro fuertemente de ella haciendo bajar una escalera desplegable que da a un pequeño ático.
Se que mi madre acaba de escuchar lo que acabo de hacer, así que me apresuro a subir y recoger la escalera, mientras veo a mi madre desde arriba que usa todas sus fuerzas para alcanzar el borde, sin embargo no lo logra.
-Ven acá pequeña rata asquerosa-.

-¿Te digo algo?.... Tu nunca me has tratado muy bien...-. Digo, mientras comienzo a buscar materiales que podrían serme útiles por todo el ático. -Y hace tiempo dejé de verte como mi madre-. Tomo una linterna, una cuerda vieja, una mochila empolvada.... -Y a veces me pregunto si todo era necesario. Todo ese tiempo de encierro, de tortura....-. Abro la mochila para encontrarme con una cinta adhesiva, una navaja pequeña y un bote de agua. -Todo... sólo por haber estado en el lugar inadecuado el día menos oportuno...-. Todo lo que había tomado anteriormente lo guardo en la mochila, mientras escucho a mi mamá colocar una silla cerca de la trampilla hacia el ático. -Todo... por un impulso tuyo, que terminó arruinando mi vida-.

Ella finalmente logra subir, y con ojos brillantes de furia grita...

-LO QUE HICE NO FUE UN IMPULSO GRACE, FUE AMOR!.... pero claro, tu no lo entenderías-.

Observo a mi madre frente a mi.
Al notarme tan tranquila, ella comienza a verme extrañada, y un tanto victoriosa.

-Puede que me hayas privado de muchos momentos en mi vida.... me prohibiste la amistad, nunca me enseñaste sobre la bondad, jamás sentí el gozo o la paz.... Nunca en mis 12 años de vida. Pero estoy segura de una cosa...

El Amor No Lastima.

Y tu me lastimaste mil veces, por amor? No lo creo-. Comienzo a retroceder poco a poco, lentamente, mientras veo fijamente los ojos de aquella que me dio la vida en contra de su voluntad. -No fue mi culpa que te obligaran a casarte con alguien a quien tu corazón no le pertenecía....-. Observo su ira. -No fue mi culpa que terminarás enamorándote del hermano de tu marido....-. Observo su agitada respiración. -No fue mi culpa entrar en la habitación cuando estabas en el acto....-. Observo su sudor. -No fue mi culpa verte asesinar a mi papá...-. Al decir esas palabras palpo la pared detrás de mi, y observo una pequeña ventana de cristal que sería mi salida. -No fue mi culpa..... descubrir que tuviste una hija con mi tío, no fue mi culpa descubrir a Molly, y tampoco fue mi culpa que la pusieras en adopción para encubrir su amor secreto-. Cada palabra comienza a dolerle más, y se agacha hasta el suelo cubriendo su rostro con sus manos en expresión de tortura... como si todo lo estuviera volviendo a ver en sus recuerdos. -No fue mi culpa tener un amigo... y no fue mi culpa verlo morir en tus manos-.