HOLISSSSSSSS otro capítulo más… aunque bueno es el segundo jeje bien sin más las dejo leer pero antes:
La historia no me pertenece, la autora es la gran Kate-Kate
La luz despertó a Elsa con un sobresalto. Sus cortinas perpetuamente cerradas ahora eran repentinamente abiertas, y el brillante sol entraba dolorosamente directo a sus ojos.
-Levántate, Elsa- la voz molesta de su madre resonó en la habitación para después dejar escapar un gruñido de disgusto. -Es que nunca limpias tu habitación? Esa cosa de cristal es prácticamente parte de los muebles-dijo, señalando a un vaso manchado, abandonado a un lado de su computadora.
Elsa dirigió sus ojos legañosos hacia ella.
-Cuánto tiempo has estado usando eso?
"Dos semanas."
-Un par de días, tal vez...
“Por favor, sólo veté "
Su madre no parecía convencida del todo pero aun así para fortuna de la rubia abandonó el tema.
-Son las once y todavía estás en la cama, no entiendo cómo puedes dormir tanto. Elsa se encogió de hombros, había estado jugando Diablo hasta las tres con un tipo coreano. Su Barb era bastante decente al recibir un golpe, y ella había golpeado la DPS en su Wizard hasta que pudieron cultivar cómodamente las elites en el primer acto, dividiendo el botín equitativamente a cómo iban, hasta que él se tuvo que ir a clase.
-No importa- su madre soltó un suspiro-Tienes veinte minutos para ducharte y vestirte, la final de lacrosse de tu hermana es hoy, ¿recuerdas?
"Mierda."
-Sí, está bien mamá, entiendo. Ya te puedes ir-Elsa espetó, prácticamente arrastrándose fuera de la cama. Su madre le dio una mirada exasperada antes de salir de la habitación, dejando la puerta abierta.
"Joder, ¿naciste en un establo?”
Cruzó la habitación con furia y cerró la puerta. Volviendo a su armario que prácticamente era una pila de ropa en el suelo, Elsa trató de recordar los colores que el equipo de su hermana llevaba y así poder encontrar algo que combinara.
“Púrpura y verde, idiota. " "Dios, solo dejaste la escuela hace dos años..."
Tomó una camisa verde de la pila, mirando el serigrafiado de Bella y el Tardis.
"Bastante bien."
La tiró por encima de su cabeza, antes de agarrar el par de jeans que colgaban de la parte posterior de la silla. Echó un rápido vistazo en el espejo, tratando de suavizar su cabello hacia atrás. Fue un ejercicio irremediable y suspiró antes de tomar la gorra de béisbol con el logo de Horde que Anna le había regalado en su cumpleaños el año pasado. ¿Cómo lo había encontrado?, Elsa no sabía. Y aunque nunca lo admitiría, era su prenda favorita, simplemente porque su hermana la había comprado para ella. Se acomodó la gorra, y se dirigió a la sala de estar. Su padre se sentó en el sofá, echando un vistazo a los canales de deportes, Elsa se dejó caer en el otro extremo, fingiendo estar interesada. -Así que, ¿qué tal los Yankees?-dijo arrastrando las palabras con los ojos puestos perezosamente en la televisión, vio a su padre darle una mirada en su visión periférica, pero fue salvada de la inevitablemente frustrada réplica, cuando Anna entró en la habitación. Y cuando la vio, sintió que su corazón dejó de latir, su hermana se veía eufórica y nerviosa al mismo tiempo y Elsa se encontró mirando el uniforme que llevaba puesto.
"Contrólate, por Dios."
-Elsa, vienes con nosotros? -La chica más joven sonreía con sorpresa, claramente no se esperaba que su hermana mayor los acompañara.