Ella era una niña que necesitaba amor
El llegó a su vida para dárselo
El destino los unió, dándoles una segunda oportunidad de vivir.
"Todo puede cambiar de un momento a otro"
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Me despierto y ya el tío Tayler no se encuentra en la habitación. Me levanto de mi cómoda cama, bajo en busca de el onde algún otro pero ninguno se encontraba, vuelvo a subir y me dirijo a sus habitaciones y nada. Ninguno de encontraba en casa.
Pienso en los opciones y la única que se me ocurre es ir a la habitación de Shawn.
Voy hasta su puerta y me quedo unos segundo ahí, suelto un suspiro y con toda la valentía toco la puerta, escucho que dicen un "pase" desde el otro lado. el miedo aparece y los nervios también, Abro, y lo encuentro sentado en la cama viendo televisión.
—Que quieres, Hestia –Dice sin quiera verme. Suspiro.
—Me puedes baña –Pregunto con temor.
—Porque no se lo pides a Tayler –.
—No está –Digo en un susurro.
—Como que no está –Me alzó de hombros al no saber que responder.
—Si, no está –Repito. —No se encuentra nadie en realidad –Al escuchar eso, suelta un gruñido. —Así que, me puedes bañar –Vuelvo a preguntar.
Definitivamente tenía que aprender a ser mis cosas sola partir de ahora.
El lo piensa por unos segundos. —Está bien –Sede, a lo que yo asiento —Vamos a tu habitación –dice, y nos dirigimos hacia allá.
Una vez allí me quito toda la ropa y me metió en la bañera enorme, fue un baño rápido y me saco, con el paño me cubrió y me sentó en la cama mientras el buscaba la ropa. Tardó como dos minutos. Me vistió con un short blanco junto con una camisa azul y unas pequeñas vans negras. Me hizo dos colitas y me hecho un poco de colonia.
—Listo –Dice apenas termina. Me miró en el espejo y no puedo evitar pensar en lo bonita que me veo. —Vamos a desayunar –Asiento y tomo su mano, el me sacude haciendo que lo suelte, ignoro su estúpido comportamiento y salgo de la habitación, camino abajo.
En la cocina, Shawn sirvió dos razones de cereal, me dio uno y nos nos dispusimos a comer.
—Hoy vamos a salir –Asiento temerosa.
—A dónde iremos –Le pregunto en un susurro.
Tenía miedo, miedo a que me devolviera a ese lugar principalmente.
—Vamos con Drew –Al escuchar eso no puedo evitar sonreír.
—Sí, el tío Drew –Digo inconsciente de emoción. Al parecer a Shawn no le gusto porque se puso serio.
Terminamos de comer en silencio, es incomodo comer así pero lo hice. Shawn lavo los platos y subió a su habitación, yo me quedé sentada en la sala viendo caricaturas. Estaba a unos minutos de terminar mi caricatura favorita cuando Shawn baja.
