fetiches, aristemo

dacrifilia.

-¡No! No, no... basta, me estás lastimado- Hize caso omiso a las quejas que daba Temo, buscando solo mi placer.

-¡Callate!-

Las lágrimas comenzaron a brotar de los dulces ojos de Temo, tenía una expresión de dolor tan marcada en su rostro que literalmente podía sentir su quiebre entre sus muslos.

Hacerlo llorar había sido mi cometido, pero verlo sufrir de esta manera, me había puesto demasiado. No fue hace mucho que descubrí que parte de ponerme, dependía bastante del dolor de Temo. Me gustaba darle azotes, marcar mis manos en su piel, morderlo.

Mi pene daba fuertes embestidas, y el ano del contrario apretaba muy bien mi glande, estaba lo suficientemente estrecho como para que notará un par de veces mi miembro, por falta de dilatación. Cada vez que se apretaba, le daba una cachetada en la mejilla; la zona adoptaba un color rojizo y más lágrimas se hacían presentes. Sonreía de satisfacción, acercándome a morder sus labios muy bruscamente.

-Aristoteles, porfavor detente, porfavor-

Tenía una cara de súplica y una mirada tan rota, apenas reaccione. Saqué mi miebro de su entrada notando como sangre bañaba mi pene, la entrada de Temo también escurra el mismo líquido espeso. Tenía varias marcas moradas en sus labios, su cuello y su pecho hacían sintonia con la mejilla roja, tenía los ojos cristalizados y su mirada perdida. Y me di cuenta que sólo lo disfrutaba yo, que esto ya no era un juego sexual; realmente lo había lastimado.

Aún así, me dedico una sonrisa rota y me dijo suavemente -No vuelvas a tocarme- intente acercarlo, tomando nuestras manos. El negó temblando ante mí toque. -Vete-

Al salir del apartamento y al escuchar los sollozos altos mientras me alejaba del lugar, me había dado cuenta que lo había cagado todo.

dedicado a bluemiliaco
[dacrifilia;excitación al ver las lágrimas de otra persona.]