Recuerdos Agridulces

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"Cerraré los ojos por el puro placer de encontrarme con tu recuerdo"

Voz de Akaashi:

Al llegar de las compras, dejé las cosas en la mesa y fui a lavarme las manos con la intención de preparar la cena, ya que Kasumi ya se estaba moviendo mucho y eso es señal de que ya tenía hambre.

- Paciencia hija que mami ya va a preparar la cena – le hable con cariño para que se tranquilizara y me dirigí a la cocina para preparar algo sabroso.

Luego de cenar y dejar la loza lavada, me fui a poner el pijama pero no tenía sueño todavía, simplemente quería estar cómodo, me dirigí al living a descansar, al sentarme cómodamente encendí mi equipo musical y puse el pendrive que me había regalado él para escuchar algunos temas.

- Bebé, vamos a relajarnos y escucharemos los temas que tanto le gustaban a tu padre, le hablé con suavidad

"I guess I should of known

By the way you parked your car sideways

That it wouldn't last

See you're the kinda person...

Mientras escuchaba "Little Red Corvette" de Prince cerré mis ojos...

- Akaashi, bienvenido a mi escondite secreto-

- De secreto no tiene nada Bokuto san, que artamento tan grande y elegante – le decía con asombro.

Al entrar al apartamento de Bokuto san, comprobé el buen gusto por la decoración y su manía de tener todo ordenado y organizado, se podía suponer que la educación que recibió fue muy estricta y muy cuidadosa, bueno después de todo es un heredero y sus padres tenían que entregarle las herramientas para dirigir a futuro la compañía de su padre

Sofás finamente tapizadas, un rack con un gran Smart Tv conectado a unos pequeños parlantes, un equipo reproductor de MP3, una amplia cocina con todo lo elemental para preparar diversas comidas, todo bien organizado...

- Akaashi, le digo escondite secreto solo mis padres y Kuroo lo conocen pero gente de mi entorno no - me dijo mientras se soltaba la corbata y dejaba su chaqueta del terno en el respaldo de la silla.

- Este apartamento me lo compré cuando recién comencé a trabajar en la empresa de mi padre antes de unirme a Kuroo y siempre quise tener mi espacio privado- lo decía mientras inflaba su pecho.

- Ahorré cada sueldo que recibía y cuando reuní la cantidad suficiente me comuniqué con la corredora de propiedades que me recomendó un amigo de la universidad y me mostró varias alternativas de inmuebles para comprar y entre varios me encantó este, no te puedo decir qué fue lo que me gustó pero fue como amor a primera vista-

- ¿Pero este es solamente para sus momentos de soledad o como para estar con sus diferentes conquistas? – le pregunté intrigado mientras dirigía mi mirada hacia él.

- No mi querido Akaashi- me respondió – este lugar es para desconectarme de mis responsabilidades en la empresa y también cuando tengo mis cambios de humor y siento la necesidad de estar solo. Acá veo mis películas favoritas y también escucho la música que me gusta mientras me sirvo un trago o encargo comida, te reconozco que soy picaflor y tengo mis deslices, pero lo hago en lugares ajenas a mi hogar, en donde nadie me reconozca y si ya no quiero estar con esa persona simplemente le doy fin, así él no me reprocha y yo no les doy explicaciones y evito que vengan a mi casa a hacerme escándalo, así de práctico soy, pero este apartamento es mi santuario no es para que entre cualquiera y siéntete honrado por que la primera persona que traigo a este lugar eres tú - me confesó mientras me lanzaba una bella y sensual sonrisa.

El Bello y el Millonario: BokuakaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora