Remedium meum (JIHAN)

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Un poco antes de que Jeonghan naciera, lo que dividía el mundo de los humanos, el espiritual y donde habitaban seres sobrenaturales, empezó a fragmentarse alertando de lo que iba a suceder. Los humanos asustados al saber de historias antiguas donde relataban lo débiles que eran ante esos otros seres, intentaron prepararse ante lo inevitable.

Se rompieron las barreras que los separaban y todos los reinos empezaron a mezclarse, en donde al ser los humanos quienes mayor territorio abarcaban a pesar de ser de los más débiles, estos fueron los que más sufrieron y tuvieron que esforzarse para sobrevivir y sobreponerse a las otras razas. Seres fantásticos y extraños se expandieron por sus tierras, algunos de los que habían escuchado y otros de los que nada sabían y más les hicieron la vida imposible.

Tras años difíciles, los humanos con su inteligencia y capacidad de adaptarse fueron creando herramientas y tecnología basadas en las debilidades de los seres que más rondaban sus territorios y así tomar la confianza para ir investigando más hasta ser quienes se posicionaron por encima de todos con crueldad, sin piedad ni misericordia por quienes no fueran humanos.

Obviamente no todos los humanos tuvieron la iniciativa de crear armas específicas. Quienes destacaron entre estos fueron los Yoon, quienes antes eran una familia de relojeros que con estos inventos pasaron a ser una de las familias más poderosas al nivel de reyes y caballeros en el reino, pues se impusieron con facilidad sobre varias razas peligrosas, siendo temidos y respetados por la tecnología que desarrollo el padre de Jeonghan y luego vendieron al resto de reino que pudiera costearlo.

Este joven cuando nació, el mundo ya estaba plagado de seres mágicos, donde los cuentos de niños estaban basados en hechos reales tan solo suavizados para dejar alguna enseñanza para que crecieran con una mentalidad fuerte de siempre esforzarse para conseguir estar sobre las otras razas. Jeonghan fue criado de esa manera, así que encontraba normal el estar por sobre otras criaturas.

Cuando dudaba de si lo que estaban haciendo estaba bien, su padre siempre le decía "¿Dios nos ha castigado por lo que hemos hecho? No y eso es porque lo quiere de esta manera". Como a lo largo de los años aparecieron tanto ángeles como demonios, los humanos lo interpretaron como que Dios existía claramente y la fe en este se avivo con mucha fuerza.

Sin embargo, un día el señor Yoon falleció por una enfermedad al corazón solo teniendo unos cuarenta años. Debido a esto, de forma repentina su esposa y tres hijos heredaron todas sus riquezas y trabajo hecho a lo largo de su vida y heredada por sus antecesores.

El mayor de sus hijos es Seungcheol, quien ahora era el dueño oficial de la armería "Ángel caído", la cual estaba encargaba de la tecnología que aterrorizaba a las otras especies y teniendo también su propio grupo de gente armada especializada, además de estar directamente trabajando para la familia real consiguiéndoles defensa en sus hogares.

El segundo hijo Minki tenía el poder de decidir sobre esa gran e importante armería, pero le importaba más la otra tienda que tenía la familia Yoon que consistía en la parte de relojería y desde hace unos años tenía una parte relacionada a la moda, que era algo que su madre soñaba tener y que cuando empezaron a tener bastante dinero lo cumplieron, pero como era reciente el hijo del medio tenía la meta de que se hiciera muy famosa, centrándose en trabajar en eso en vez de las armas.