La casualidad llevó a Candela a la vida de Taehyung.
Nuestros protagonistas crecen para enfrentarse a una venganza.
El apoyo incondicional de sus amigos será su as bajo la manga.
¿Conseguirán superar todos los obstáculos?
Historia completa
-¿Candela por que no intentas verlo desde mi punto de vista? -Porque no tengo nada que ver. -Para mi es un ejercicio de responsabilidad, te lo digo en serio, tú...tú me provocas un sentimiento muy especial, necesito protegerte, necesito que te des cuenta de lo errónea que es esa relación. No te va a traer nada bueno. Es un lastre para tu carrera, para tu futuro. Yo puedo ayudarte, yo puedo ser tu mentor, yo puedo ser un hombre para ti... -¡Basta! No quiero seguir oyendo nada más. He venido aquí como amiga y mejor me voy ahora que aún somos amigos, antes de que digas o hagas algo de lo que te tengas que arrepentir. -Perdona no quiero presionarte. -Pues lo disimulas muy bien -Solo dime que lo pensarás. -No insistas, porque si lo haces voy a ser yo la que olvide que eres mi jefe y diga o haga algo de lo que me tenga que arrepentir. Candela recogió su bolso y salió, mientras que esperaba para coger un taxi, unos chicos la reconocieron y empezaron a hacerle fotos. -Dinos algo, ¿De verdad Taehyung es un tío que abusa de las mujeres? El taxi se paró en seco y Candela le dio su dirección, cuando llegaron, le pidió al taxista que entrase dentro de la parcela, puesto que había paparazzis haciendo guardia en la calle.
Nuevas notificaciones los chicos de antes ya habían subido sus fotos a las rrsss.
Pagó al taxista que se marchó, accionó la puerta desde la cocina y abrió la nevera buscando algo... -¿Qué buscas? Le preguntó Tae que había dejado de trabajar al oírla llegar. -¿Soju? Unos 2 litros creo que serán suficientes -Vaya, ¿que te ha pasado? Dijo Tae abrazándola desde atrás y cerrando la nevera.. -¿Por dónde empiezo? Ramón ha vuelto al ataque, no acepta nuestra relación y se ha autoimpuesto la misión de protegerme de tí y mejorar mi vida convirtiéndose en "mi hombre" -Será imbécil... -Salí enfadada no me cubrí con la mascarilla y unos niños me fotografiaron mientras que cogía el taxi...ya está en internet. Y para colmo el enano del pelo sucio sigue haciendo guardia en la puerta de casa. ¿De qué sirve la orden de alejamiento si tengo que verle a diario? Candela escondió su cara en el pecho de Taehyung, tenía ganas de llorar por la tensión, pero no quería hacerlo porque sabía que Taehyung se sentiría mal.
-¿Qué tal tú? -Pues estaba muy agobiado con lo de la gestora, pero lo cierto es que desde que no tengo que encargarme del papeleo y la gestión, tengo más ideas y trabajo mejor, estoy avanzando mucho en el diseño de la urbanización de Busan. Cómo además no pierdo tiempo desplazándome a la oficina no tengo que ver a nadie, pues estoy trabajando un montón. Y mira qué cómodo voy.
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Taehyung vestía un ancho pantalón de deporte y una sudadera, llevaba una cinta que la sujetaba el pelo y dejaba ver parte de su frente y sus cejas. Candela al verlo pensó que era el tipo más sexy del mundo y el casi leyéndole el pensamiento levantó la ceja y sonrió -¿Que piensas pequeña? -Qué yo tengo mucha suerte pero que tú tienes más -¿Yo? ¿ Por qué? -Porque mañana no tengo que trabajar... Candela se colgó del cuello de Taehyung y empezó a darle besos, Taehyung se dejó llevar hasta que sonó su móvil. Este cogió el teléfono mientras que Candela le daba besitos por el cuello. -Son los chicos, están fuera que abramos la puerta. -mmmmmmm necesitaba cariñito, dijo ella haciendo pucheros. -Hay tiempo, vamos a ver qué se cuenta la familia. -Vale, voy a ir preparando algunos aperitivos, seguro que Jungkook tiene hambre.
