13. Infiltración

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    BaekHyun acomodó la silla bajo las repisas, para luego subir a estas y llegar al ducto de ventilación. JongDae, lo vigilaba en todo momento para evitar una estrepitosa y mortal caída.

— Seis comienza misión. Cambio.— Dice BaekHyun por el walkie-talkie antes de meter su pequeño cuerpo en el estrecho ducto.

Según el mapa debía avanzar unos escasos metros, luego virar hacia la derecha y abrir otro entrada al ducto, por esta debía bajar y ya estaba dentro del salón de las cámaras. No sonaba difícil. Pero hacerlo era otra cosa, el ducto era lo suficientemente estrecho como para sentir que faltaba aire.

JongDae vio a su amigo desaparecer para luego cerrar el ducto con su respectiva tapa y dejar la silla donde correspondía. Como si nada hubiese pasado.

— Todo limpio, sin moros en la costa. Cinco toma lugar. Cambio. — Y entonces entra a la escuela.

Con tranquilidad camina hacia las oficinas de dirección. El segundo receso estaba por comenzar, debían ser rápidos para atrapar a Seyeon con las manos en la masa. Espero unos breves minutos a que el timbre sonara.

Cuando escuchó el característico ring, habló al walkie-talkie: — Cinco comienza misión. Cambio.

Abrió la puerta de las oficinas, encontrándose con la secretaria.

— Buenos días, señorita Kang. — Le regaló su mejor sonrisa, esa que a su mami tanto le gustaba.

La mujer lo miró detenidamente, supo al instante de quién se trataba.

— Kim, ¿qué lo trae por aquí?

La pelirroja lo miró a través de sus lentes. JongDae supo inmediatamente que no le agradaba, pero bien poco le importaba, debía vigilarla, distraerla y alejarla cuando el momento lo ameritara.

Según Kris sunbae el director no se encontraba en el lugar, pero su puerta estaba cerrada con llave. La cual, la mujer desagradable frente a él tenía en su cajón.

La secretaria Kang es el mayor obstáculo, pero eliminarla no será difícil. Según BaekHyun-ssi, la profesora de lengua requiere unos papeles que ella mandó a imprimir a la secretaria. Utiliza eso. Las palabras de Kris sunbae resonaron en su cabeza.

— La profesora de lengua me envió a pedirle los papeles, dijo que si se los podía entregar. — La mujer alzó una ceja. — Por favor.

— Pues tómalos y llévalos.

Que mujer más apática. Ya la acusaría con su mami.

— Ella dijo que usted debía pasárselos, porque no confía en mí para ello. — Se encogió de hombros. — Ah, y dijo que los necesita ahora, se encuentra en el aula B-7.

Y con eso, dio un paso fuera de la oficina. Para escabullirse tras una gran maceta con alguna extraña planta que él no podía ni le interesaba reconocer. Segundos después, la mujer salió de allí maldiciendo con los papeles en la mano.

— Cinco sacó a la mujer. Comienza apagón. Cambio.

Escuchando eso, ChanYeol tomó su lugar. Vio a la mujer salir y comenzó a seguirla. No podía perderla de vista, esa era su misión. La pelirroja subió las escaleras, y entró en un aula, ChanYeol pudo reconocerla como el aulas de Kris sunbaenim.

Su walkie-talkie sonó.

— Uno comenzará distracción, apresúrense cinco y seis. Cambio.

Ah, ChanYeol tenía los pelos de punta al sólo pensar en todo lo que podría salir mal. Pero amigos son amigos, y él podía ser cobarde pero no traidor. Nunca traidor.

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BaekHyun abre el ducto, gracias al cielo y debido al rezo que le enseñó la abuela Byun, un armario se encontaba bajo en ducto, por lo que bajó sobre este.

La habitación se encontraba vacía. Con bastantes pantallas grabando diversos sucesos que ocurrían en el lugar.

Se bajó del armario y tomo asiento en la silla con ruedas frente a un gran escritorio, bastante botones y teclas había allí, y realmente BaekHyun no era un cerebrito como para saber qué cosas tocar y qué cosas no.

Pero si había visto suficiented películas como para arreglárselas. Lo que menos le faltaban eran ideas.

Cuando llegues, debes borrar todas las grabaciones del día para que no vean a JongDae en el lugar. Luego apaga todo, excepto la que se encuentra en el patio de juegos. Esa la utilizaremos.

Sonaba bonito y fácil en su mente, pero él no estaba seguro de cómo hacerlo. Debía hacérlo rápido, el receso no debía terminar.

— Cinco sacó a la mujer. Comienza apagón. Cambio.

Esa era su batiseñal.

Se posicionó frente al que parecía ser el centro de control, parecía un gran computador común. En una ventana minímizada se podían ver las 15 cámaras. BaekHyun puso la flechita sobre la primera, la cuál era fuera de algún aula que a él no le interesaba. Vio ese cuadrado que significaba detener, un rectángulo de texto apareció: ¿desea guardar el archivo de video?. No.

Una menos.

Y así fue eliminando de a poco las grabaciones y apagando las cámaras. Hasta que una llamó su atención. La detuvo, eliminó el video y luego la dejó continuar una nueva grabación. La cámara daba hacia el casino y una de las escaleras junto a este, allí se encontraba MinSeok Hyung bajando y Oh SeYeon saliendo por la grab puerte del casino. Se encontraron de frente, y la niña no dudó ni un segundo en tomarlo del cuello de la camiseta escolar y jalarlo hacia quien sabe donde.

BaekHyun la siguió a través de las pocas cámaras que quedaban, pero no tuvo éxito.

— Uno comenzará distracción, apresúrense cinco y seis. Cambio. — La voz de Kris sunbae lo sacó de sus pensamientos y culminó el trabajo, dejando sólo la cámara del patio encendida, y la de su reciente descubrimiento apagada, sólo que sin eliminar ese preciado archivo.

Antes de salir de la habitación, pudo ver como la cámara era girada, ya no apuntaba hacia el patio de juegos, ahora apuntaba hacia la zona de los basureros. El rincón de Oh SeYeon.

Con una sonrisa salió de esa sala, encontrándose con la sonrisa gatuna de JongDae, y una brillante llave entre sus dedos.

Con rapidez abrieron la puerta de la oficina del director. Al entrar, el lugar estaba limpio y ordenado, con las cortinas cerradas, dando un toque de oscuridad justo y necesario.

BaekHyun repetía en su mente los números de las cámaras importantes. 7, 9, 12. 7, 9, 12.

Las grabaciones son guardadas en un cajón de su escritorio. Cada mes se encuentra dentro de un estuche para DVD, y en cada DVD se encuentran las grabaciones de todas las cámaras de ese día.

JongDae fue directo al cajón. Pero no todo podía ser perfecto, y Kris Hyung no podía predecirlo todo. Clave numérica, algo de lo que no estaban enterados y les estaba jodiendo el corazón de la misión.

— Tenemos un código rojo en la oficina del director. Cambio.

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¿Saldrá todo como ellos desean?

Childhood love ➡ [EXO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora