Solo necesito una noche contigo

CAPITULO 2

-Uau Lia estas espectacular! - me dijo Karen.
Había elegido para la ocasion un vestido negro estilo romano, era mi ultima adquisición en mi vestuario. La ropa era uno de mis vicios. El vestido era negro, con una tira que cruzaba de un hombro hacia el escote del lado opuesto. Era estrecho de modo que marcava mis curvas. Me llegaba hasta encima de las rodillas. Para completar mi estilo me puse unas sandalias de tacón negras, unos pendientes de aro y un brazalete con brillantes de Swaroski. Me maquille ligeramente los ojos perfilandolos con un delineador negro y un poco de colorete. Me peine con un moño despeinado del cualsobresalían algunos de mis rizos rubios. Con el flequillo daba un toque final. Había quedado un buen resultado.
- Pues tu no te quedas corta! - le solté a ella. 
Karen había elegido un vestido blanco, con su piel morena resaltaba y le quedaba estupendamente. El suyo era de palabra de honor, debajo del escote tenia un ligero bordado de negro; que hacia que el vestido tuviera un toque romántico. Lo combino con unos zapatos negros y con un collar negro en forma de corazón.
- Hoy cuándo te vea Marcos ya no te deja escapar.
Se puso colorada de golpe.
- La verdad es que no se ni como lo voy a mirar a la cara despues de lo de ayer. Marcos es un chico especial, siempre esta pendiente de mi, pero ya te lo he dicho Lía, con mi antigua relación lo pase muy mal. No tengo ganas de volver a sufrir por un chico. Aún no me he recuperado de lo que me hizo Raúl.
Dicho esto Karen se quedo pensativa. Su mundo se estaba tambaleando otra vez, lo vi en sus ojos.
En el colegio conoció a Raúl, des de un principio se odiaban pero se veía a leguas la atracción que sentian. Con el paso del tiempo se hicieron amigos inseparables y poco despues iniciaron una relación de 5 años. Todo era perfecto para ellos,a mi parecer eran la pareja ideal. Siempre los envidé. Vivían en una nube donde solo estaban ellos, pero todo cambio cuando él empezó a ir con un chico nuevo que empezó en el colegio. Ya no era el Raúl de antes, se distancio de todo el mundo incluso de ella. Hasta que un día Karen descubrió que la estaba engañando. Lo odie por el daño que le hizo. 
Karen entonces lo paso muy mal. Raúl para ella era su vida entera. No sabia vivir sin él y entonces su mundo se tambaleo. No fue nunca mas la misma chica. Pero yo me empeñe en ayudarla a seguir adelante, una tia como ella no podía destrozar su vida por un tio que no valía la pena.
 -Karen deja de pensar en ese mal nacido de una vez. El pasado pasado está. Eres una chica guapa, inteligente. Ya me gustaría a mi parecerme a ti. Te tienes que dar la oportunidad de ser feliz de una vez. Por ahí en algún lado hay un chico que te espera. Será tu media naranja. Pero para encontrar a tu príncipe ideal también se tiene que sufrir. La vida es así. Por lo que veo Marcos puede ser ese chico. Da-le solo una oportunidad de conoceros. Quita te de una vez ese caparazón que tienes ahí guardado. Tienes que darte la oportunidad.
Dicho eso me callé. Teníamos que reflexionar las dos sobre mis palabras. Yo misma me estaba metiendo en la boca del lobo con J y lo peor es que lo sabia. Él era mi mundo,estaba enamorada del él. ¿ pero él de mi? Yo me empeñaba a creer que si, aunque una voz en mi cabeza me decía que no fuera ingenua. Inconcientemente empezé a recordar momentos vividos con él. Pasaron unos minutos cada una perdida por su mente. Hasta que levante ligeramente la cabeza para mirar a Karen. Una lágrima bajaba por su mejilla. Eso no lo iba a permitir yo como me llamaba Lía.
- Eehh!! Basta ya!! Nos estamos martirizando las dos. Se acabo! La noche es larga y allí fuera nos esperan! Levanta el culo de una vez y se acabo llorar.
 Karen me miro y vi que sus ojos brillaban.
-Tienes razón Lía. Tus palabras me hacen abrir los ojos. No se que haría yo sin ti. Unas ligeras sonrisas se nos formaron en la boca y nos fundimos en un verdadero abrazo. Que haríamos la una sin la otra. Despues de ese rato de charla cogimos las cosas y salimos de casa. Cuando bajábamos por el ascensor Karen me dijo: 
- Sabes Lía tienes razón. Hoy va a ser el primer día de mi verdadera yo. No me puedo quedar en el pasado. Creo que estoy decidida a empezar a conocer a Marcos.
Le agarre de la mano. Y mi primera reacción fue reírme a carcajadas. Terminamos las dos muertas de risa. Cuando salimos del ascensor había una vecina que se nos quedo mirando. Seguramente pensó que estábamos locas de remate, de echo así era.
 -Preparada?-le dije- Hoy va ser una buena noche.
Y salimos del portal. Ya estábamos en la calle. Una noche perfecta, las estrellas brillaban en el cielo y la temperatura era ideal.
Estaba convencida que esa noche algo especial ocurriría.