•Historias de Cubitos•

Gracias

PoV Lili

Puedo sentir el fuego rozando mi piel, todo se ha acabado y este sera nuestro fin.

Quizá nos lo merecemos, es nuestro castigo por haber desafiado lo desconocido, por haber inmiscuido en lo que siempre debía haber sido un tabú.

Pero el hambre de hacer daño no parecía detenerse y mientras más intentaba detenerlo, sentía como me carcomía por dentro.

-¡Vamos Lili, solo un poco mas!- La voz de Reah se escuchaba cansada, pero aún asi me tenia apoyada sobre un hombro- ¡Nia tu también puedes!

Podía escuchar a los Withers que habíamos invocado, y en ese momento solo teníamos un lugar seguro, el templo de nuestra Diosa.

No podía usar mi habilidad, la poción la había neutralizado, si es que no me la ha arrebatado.

Parecía tan lejano, ¿Cómo había sucedido todo esto?

Y entonces por fin llegamos, tanto Nia como yo estabamos agotadas.

-Escuchen con atención- Miré a Reah quien estaba agitada pero aún seguía en pie, después de todo había sido criada como una Terrana- Deben huir, muy lejos, deben atravesar el World Border, este no es un lugar seguro-

-¿Y qué sucedera contigo?-Preguntó Nia con apenas un hilillo de voz-

-Voy a quedarme, este es mi lugar y siempre lo será- Una hermosa sonrisa se dibujo en su rostro- Ustedes aún pueden salvarse-

-¡No! ¡No puedes quedarte! ¡Somos el Reino Aer, estaremos siempre juntas!- Con toda la fuerza que tenía logre sujetarme a ella-

-¡No vamos a dejarte!- Nia se unió a mi- ¡Ellos van a matarte!-

Nuestros gritos y súplicas cada vez aumentaban y comenzabamos a perder el control.

Entonces sentí la mano de Reah impactar contra mi mejilla, el ardor pronto me hizo recapacitar, Reah había hecho lo mismo con Nia.

-¡Escúchame bien Nia! Tu vas a cuidar de Lili, ustedes van a salvarse ¿Me escuchaste?- Sacudió a Nia para apresurar su respuesta- ¿Me escuchaste?

Nia asintió temblorosa, Reah nos envolvio en un abrazo, era tan cálido, la abracé lo mas fuerte que pude, queria grabarla en mi mente por siempre.

-No olviden una cosa- Aún nos tenía sujetas y podía escuchar su voz quebrarse- A donde sea que lleguen, nunca hablen de su pasado y por favor ¡Vivan como si nada de esto hubiera pasado!

Ella se separo y Nia me comenzó a guiar, sólo era un salto para comenzar a volar y alejarnos para siempre.

Volteé una última vez, Reah nos miraba con una sonrisa, pero podía ver claramente las lágrimas y como estaba temblando, la conocía, estaba igual de asustada que nosotras.

En ese momento se veía completamente hermosa, y cuándo desvíe mi mirada detrás de Reah noté que el Reino Ignis estaba ahí.

Prakxis me estaba viendo, quería abrazarlo y besarlo una última vez, quería acercarme a él una última vez.

-¡Prakxis!- Comencé a gritar y Nia en ese instante me sujeto- ¡Prakxis! ¡Prakxis!- No podía dejar de llamarlo, el corrió hacía mi, pero Reah lo detuvo con su espada-

-¡Nia, llévala!- Y asi lo hizo, sentí el tirón y automáticamente abrí mis elitras aunque no queria hacerlo-

Seguía gritando, estaba dejando mi hogar atrás y no podía hacer nada para evitarlo.

Mis gritos se convirtieron en sollozos, temblaba de sobremanera, y mi vuelo era completamente irregular, queria dejarme caer en las grandes extensiones de agua que habíamos estado viendo por horas, quería dejarme caer y acabar con todo.