El pequeño James Rogers llega a revolucionar la vida de sus padres haciendo que todo sea un hermoso desastre.
Historia situada después de los acontecimientos de Infinity War
Nadie que conociera a Natasha Romanoff "la temible viuda negra" y al honorable Capitán Ámerica se hubiera imaginado que ambos llegarian a estar juntos ni mucho menos tener una familia.
Steve Rogers despues de regresar del hielo pensó que aquel hombre que añoraba una familia y un calido hogar se habia quedado en el pasado; pero estaba equivocado.
Junto con Natasha habia formado una bella familia, se sentia como un ciudadano más, realizando actividades cotidianas; ir al super, salir de vacaciones, pagar impuestos, presenciar berrinches de su hijo, discutir con su esposa y celebrar cumpleaños. Supo bien a quien entregarle el escudo y el legado del Capitán América.
Natasha por su parte amaba ser madre y esposa, su semblante día a día mostraba lo feliz que aquellos dos caballeros la hacian.
Disfrutaba ver crecer a James, jugar con el, enseñarle sobre la vida, amaba ser esposa de Steve, bailar con el alrededor de la sala a ritmo de la música clásica que tanto le gustaba a su esposo.
Natasha se encontraba en el hospital esperando dar a luz a su segundo hijo; Steve y ella habian decidido no conocer el sexo del bebé hasta que naciera generando expectacion y ansias entre sus amigos.
Las familias Stark y Barton estaban seguros de que otro varon venia en camino; mientras que Lang, Wanda; Bucky y Rhodey apostaban por una niña.
Llevaba mas de seis horas esperando a dar a luz, en definitiva este segundo embarazo habia sufrido mas que el primero, pero tambien lo habia disfrutado al maximo pues teniendo a James de compañia la hacia sentir bien.
-Ya no puedo mas Steve-Natasha le tomaba la mano a su esposo mientras respiraba dejando pasar una contraccion.
-Ya pronto estara con nosotros, la doctora viene para aca, ya estas lista para pujar-Steve besaba su frente y suspiraba dedicandole una tierna sonrisa- piensa en lo hermosa que sera Natalia.
Natasha se echo a reir mientras sentia otra contraccion que la hizo esbozar una mueca- u otro varoncito guapo llamado Ivan.
-Hable con James, la esta pasando de maravilla en la granja de los Barton, llegan pasado mañana, esta ansioso por conocer a el nuevo bebe aunque- Steve nego con la cabeza recordando las palabras de su hijo- no quiere que sea niño porque dice que ya no lo vas a querer.
-Mi James es tan ocurrente, siempre lo amare es mi pedacito de cielo.
Ambos fueron interrumpidos por las enfermeras y la doctora quienes se preparaban para traer al mundo al pequeño Rogers.
-Sra Rogers ya esta lista para pujar, es momento.
Natasha asintio, apreto la mano de Steve y le regalo una sonrisa- Aqui vamos Soldado.
Alrededor de cuarenta minutos pasaron, entre gritos, exhalaciones, cansancio, lagrimas y fuerza.
Natasha volvio a sentirse viva y puso todas sus fuerzas en lograr con exito aquella nueva mision que venia a su vida.
Pujo de nuevo con todas sus fuerzas cayendo agotada en la camilla mientras escuchaba un lindo llanto que hizo que lagrimas corrieran por su rostro.
-¡Lo lograste Nat! ¡Te amo! Eres tan fuerte- Steve deposito un beso casto en los labios de Natasha quien acariciaba las mejillas del recien papá.
-Hay una persona que quiere conocerlos- la enfermera deposito en brazos de Steve un pequeño bulto cubierto con una sabana blanca con letras que anunciaban lo tan esperado.
Steve recibio al bebe en sus brazos y observo de inmediato la reaccion de Natasha.
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