Siete jovenes son la reencarnacion de cada pecado capital, condenados a revivir su maldición y a ocultar sus habilidades del mundo viviendo una vida ordinaria, pero una antigua secta tratara de eliminarlos de la faz de la tierra obligandolos a usar...
Namjoon reunió a los chicos en el comedor, Jin se encontraba a su lado de pie, mientras los demás estaban sentados
-Chicos hemos activado el sistema de seguridad de la casa, la clave de acceso se cambiará cada semana, tienen que memorizarla, nada de escribirla en un papel o guardar una nota en el celular, nadie saldrá solo, iremos a la escuela juntos y asi regresaremos
- Seguiremos yendo a la escuela, después de lo sucedido- interrumpió Hoseok
- Trataremos de fingir normalidad, ellos no saben que Tae no murió – respondió Namjoon
-No está muerto pero no se mueve, habla o ríe, ¿Cuál es la diferencia?- murmuro Suga cabizbajo
-La diferencia es que aún tenemos esperanza- respondió Jin
-Exacto, tenemos que planear muy bien nuestras jugadas- añadió Namjoon – y Jungkook olvídate de tus horas extra de Judo
-¡¿Qué?!, pero soy el capitán del equipo y golpear personas me ayuda a controlarme- replico Jungkook
-Todos salimos y regresamos juntos- respondió Namjoon con firmeza a lo que a Jungkook no le quedo más que asentir con la cabeza
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Los días pasaron lentamente, Jimin y Suga cambiaban de ropa a Tae, y le pasaban pañuelos húmedos por el cuerpo para mantenerlo aseado, le peinaban el cabello y lo cambiaban de posición para que no le salieran llagas en la espalda, Hoseok inspeccionaba la herida de su abdomen y tomaba notas.
Todos iban a clases y trataban de hacer las cosas con normalidad, Jungkook salía todas las noches con Jimin a tratar de rastrear a la secta pero no habían tenido ningún resultado, Namjoon y Jin eran muy cuidadosos en cuanto si eran seguidos por alguien, pero nada, era como si la secta se hubiera esfumado
Una tarde los chicos se encontraban en la habitación de Tae, solían reunirse ahí para observarlo y contar anécdotas de él, pero la tristeza y la nostalgia siempre los invadía y algunas lágrimas silenciosas caían, se reconfortaban unos a otros y se abrazaban, Jungkook interrumpió el fúnebre momento
-Chicos, tengo miedo, de que la herida de su abdomen cierre y el no regrese con nosotros
- O de que nosotros envejezcamos, muramos y el permanezca igual, no reencarnaría con nosotros, ¿Qué será de él? –añadió Jimin
-Basta de cosas tristes- respondió Jin con los ojos vidriosos, Namjoon al verlo lo abrazo
-He notado que la herida, está cerrando- dijo Hoseok
Los chicos lo miraron con asombro, Suga seco las lágrimas de su rostro y pregunto
-¿Desde cuándo está cerrando la herida?
-Lo he notado hace dos días, siempre mido la longitud de la herida y tomo fotos para compararla con los días anteriores y aunque es algo muy sutil y difícil de notar a simple vista, su herida si se ha hecho más pequeña, podría decir que se está curando, lo que pase cuando la herida termine de cerrar, no lo sé
