En la vieja mancion se encontraba Darien hundido en sus pensamientos trataba de encontrar la manera de que la sacerdotisa le confesara lo que el tanto anhelaba saber.Esmeralda: por que tan pensativo mi querido amo.
Darien: por que la estúpida sacerdotisa se resiste a doblegarse ante mi.
Esmeralda: en ese caso lo mejor sería desacernos de ella es una inútil que no sirve.
Darien: te has vuelto loca -sosteniendola del cuello- ella es la única que puede llevarnos a la elegida, y cuando la encontremos podremos revivir a la reina de los demonios y con ella a nuestro clan.
Esmeralda: lo siento amo -dijo con la voz entrecortada por la falta de aire- entonces que haremos con ella.
Darien: ya se me ocurrirá algo, mientras tanto continua asotandola tal vez finalmente se rinda ante el dolor.
Ya habían pasado varios días y los tres hermanos comenzaban a cansarce de su busqueda, las chicas trataban de conquistarlos con regalos, ellos esperaban que entre todas estuviera a quien tanto buscaban, pero ninguna era ella, y el tiempo se les acababa.
Yaten: maldicion pareciera que solo perdemos el tiempo y ella no aparece.
Taiki: tranquilizate en estos momentos debemos tener la cabeza fría no podemos permitir que ellos la encuentren primero.
Yaten: lo se, es solo que la luna de sangre esta muy cerca y comienzo a desesperarme.
Taiki: yo estoy igual si no la encontramos antes que ellos sera nuestro fin, así que tranquilicemonos y continuemos la búsqueda.
Yaten: trataré de calmarme, pero por el bien de este mundo espero que aparezca pronto.
Pero a Seiya nada de eso le importaba el solo pensaba en Serena había algo en ella que le atraía y no entendía que era, por su parte ella trataba de evitarlo, el estar a su lado aun le daba temor y para mas sus pesadillas eran cada vez mas frecuentes.
Mina: Serena si continuas sin dormir vas a enfermar, comienzas a preocuparme, estás muy pálida y ojerosa.
Serena: perdoname Mina, te prometo que tratare de descansar un poco mas.
Mina: eso esperó por qué realmente te vez muy mal, bueno te dejo iré a mi practica de voleibol.
Ambas tomaron caminos diferentes, Serena no se daba cuenta que Seiya la seguía no muy lejos, de pronto sintió un mareo por el cansancio, trato de sostenerse de una cerca pero al hacerlo se corto la mano con un alambre y comenzó a sangrar, al verla Seiya corrió a ayudarla.
Seiya: te encuentras bien, dejame ayudarte.
Serena: estoy bien no necesito de tu ayuda así que dejame sola.
Seiya: no lo haré, estas muy pálida y además tu mano sangra.
El sostuvo su mano para limpiar la sangre con su pañuelo, y al hacerlo pudo percibir un aroma familiar, una escencia que no había percibido en muchos años, en sus ojos se notaba que estaba sorprendido, era posible que fuera ella aquella aquíen tanto habían estado buscando.
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Garras escarlata
FanfictionEl pasado atormenta a Serena, antiguos enemigos se enfrentan nuevamente, Seiya deberá luchar para impedir que la historia se repita y salvar al amor de su vida.