♫ Capítulo 20 ♫

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Capítulo 20

America

Durante el desayuno, no paramos de intercambiar miradas cómplices. Estaba emocionada. La noche anterior, Maxon me prometió enseñarme un lugar secreto lejos del castillo. Desde mi regreso de Nueva Asia, no había tenido oportunidad de salir al jardín por la extrema seguridad en consecuencia a los constantes ataques rebeldes. Así que esta sería una gran oportunidad que no quería desperdiciar.

Esperamos a que todos se retirasen primero. Los reyes fueron los últimos en irse. El semblante del rey era oscuro. Lucía molesto. Quizá, porque tenía sus días como rey contados. En cambio, la reina emanaba un aura de felicidad. Incluso, me guiño el ojo antes de irse tras su esposo.

Me extrañé por su actuar. Pero, luego, caí en cuenta que ella me veía, como la futura esposa de Maxon y no solo como la amiga de su hijo. Decidí dejarlo pasar. Sería complicado explicárselo a todos y tratar que lo comprendieran.

Maxon se puso de pie y vino hacía mí.

—¿Nos vamos? —preguntó tendiéndome su mano.

Sonreí

—Vamos—asentí y acepté su gesto.

Nos dirigimos a toda prisa a los establos. Yo venía preparada. Cuando Maxon se fue de mi habitación anoche, llamé a mis doncellas y les había pedido a mis doncellas que me preparasen un vestido liviano y botas de montar.

Al llegar al establo, una doncella nos esperaba. Le entregó una cesta a Maxon y se retiró en silencio.

—Espero que hayas encargado tartaletas de fresa—dije a modo de broma.

Maxon chasqueó los dientes.

—Claro que sí. No lo he olvidado—respondió con una sonrisa.

Sentí una punzada en mi pecho, pero no le di importancia.

—Ven, te mostraré algo—Le seguí—Este es mi caballo. Se llama Chocolate—confesó ligeramente avergonzado— Fue un regalo de mi padre—señaló en dirección de un caballo color chocolate.

Arqué una ceja.

—Tenía solo 9 años cuando me lo obsequiaron—se defendió. Me imaginé a un Maxon de niño emocionado por haber recibido un caballo como regalo.

Sonreí.

Su establo era uno de los más amplios y limpios. Lo mejor para el caballo del heredero de la corona.

Un caballo que se encontraba en una esquina del establo se acercó a nosotros cuando Maxon estiró su mano con una zanahoria en ella.

—Ella es Hera—me explicó—Es una yegua—Hera se acercó a Maxon y olió la zanahoria antes de comérsela. Maxon le acarició el lomo.

Revenge ( America Singer)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora