A mi vida llegaste tu.

Cada Parte De Ti.

Narración Calle.

Había llegado la noche, era tiempo de volver a casa con los chicos, que sin duda, deben estarse preguntando en donde estamos, pero siendo realistas, no me importaba mucho lo que pasaba a nuestro alredeor, lo único que quería en ese momento, era disfrutar cada segundo a lado de poche, "mi novia", y es que no me cabe en la mente, como es que ahora la puedo puedo llamar así, no paro de mirarla y es que cada movimiento, gesto, palabra o la más mínima cosa que se  relacione a ella, me encanta.

Poche: Amor, es hora de irnos a casa ya es un poco tarde. (calle hizo un pequeño puchero) sabía que al igual que yo, no quería irse.

Calle: Amor, un ratito más. Levante mi mirada, hasta encontrarme con esos ojos color aceituna, y es que hoy tenían un brillo tan especial, tanto, que opacaban a la misma luna.

Poche: ¡No amooor, anda vamos! Se lo dije, sin poder dejar de admirar su rostro, fije mi mirada en sus labios, y la besé lo más tierno que pude, depositando en ese beso, todo el amor que por ella siento, y es que era magnífico, un total sueño hecho realidad, la luna, las estrellas, la arena, y lo mejor de todo, ella sentada a la orilla del mar junto a mi, y es que si era un sueño, no me quería despertar de él jamás.

Narración poche
Quería capturar estos momentos, para toda la vida, es indescriptible la sensación que tengo, cuando estoy tan cerca de ella, y es que mientras duerme, sobre mi pecho, puedo escuchar su corazón y el mio latir haciendo uno mismo, es mas que mágico, y es que ahí mirándola a ella, no puedo ni imaginar, que aun hace una horas, era mi mejor amiga, y eso no quiere decir que ya no lo seamos, pero ahora hay un vínculo mejor, uno que nos une aún más fuerte, y es que es tan hermoso poder despertarme, todas las mañana junto a ella, mirarla fijamente y despertarla con un beso, o lo maravilloso que es salir con ella tomada de la mano, o aun mejor disfrutar de ella y con ella, las mejores noches de mi vida, admirar de esa sonrisa, esos ojos color avellana, la espectacular silueta que tiene, ese cabello castaño, y es que todo de ella, para mi es más que perfección, aun me cuesta trabajo asimilar, que ahora es "mi novia", "mi calle", y seguir queriendo que todo los días sea ella y nadie más, y ahí bajo la luna y las estrellas, jure que la amaría, como a nadie he amado, en toda mi vida.

Era momento de irnos, y apesar de insistirle, no quería ni moverse, así que como pude me levante, la tomé por la mano y la jale hacia mi cuerpo, no quería irme sin antes sellar este momento con un beso, bajo la luz de la luna y las estrellas, no había momento que a su lado no disfrutará, así que la tomé de la mano, y caminamos hasta la casa. Cuando entramos estaban ya todos dormidos, pues era de imaginarse, eran ya casi media noche, pero al entrar a la sala de video, ambas nos detuvimos para capturar un momento inigualable, calle sacó su celular, abrió la cámara y tomó unas cuantas fotos, pues ahí estaba Juana dormida, y torcida como todo un cheto, roncando y con la boca abierta, hicimos lo posible por no reírnos a carcajadas, pero nos fue imposible, salimos corriendo de ahí y nos dirigimos a nuestra habitación.

Poche: (soltó una carcajada).

Calle: ¡shhhhh! Los vas a despertar. Lleve mis manos a la boca intentando no reírme. Me conduje hasta nuestras maletas y busque nuestras pijamas,  ambas nos dirigimos a la ducha, no demoramos mucho, pero me era casi imposible, no admirar la belleza, y el cuerpo tan perfecto que tenía, me tenía perpleja, ver como cada gota de agua recorría su cuerpo, y era aún mejor el hecho saber, que mis dedos y todo de mi habían recorrido los mismos lugares, y es que cada parte de ella me tenía, más que hechizada, me asuste un poco cuando de repente poche me lanzó un poco de agua  diciendo.

Poche: Se que mueres por mi, pero si me sigues mirando así, de mi no te salvas la próxima. Lanzando una mirada y sonrisa, pícara como solo ella sabe, nos apresuramos a salir, pero ella salió antes y comenzó a cambiarse, y es que había sido un día más que magnífico, pero ambas  estabamos muriendo de sueño, a lo lejos escuché su tierna voz diciendo.

Poche: Amor, apresurate, recuerda que te necesito para dormir. Y así fue como de costumbre, me abrazo acomode mi pierna sobre la de ella, y en cuestión de minutos me quedé dormida.

Calle: te amo, te amo, le susurre mientras se quedaba dormida, la apreté hacia mí cuerpo y le di un pequeño beso en la frente, y en instantes me quedé completamente dormida.