capitulo 4.

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Quedaban dos dias para que no volviera al instituto jamas, para que me marchara de alli y no volviera a ver a nadie de ese lugar nunca mas. Solo dos largos dias.

No habia visto ni a Louis ni a Harry por el instituto en estos dias, ni siquiera habia oido sus nombres salir de la boca de ninguno de mis chicos. Eso me extrañaba. Realmente lo hacia. Suspire y me encamine hacia mi casa, mañana no llevariamos nada al instituto ya que estabamos terminando los preparativos para la graduacion. Al menos yo, ya que ayudaba. Realmente el ultimo dia habia sido el de hoy y estaba nerviosa. Cerre los ojos y me deje llevar por la musica que llegaba a mis oidos desde mis cascos. Sonrei sin darme cuenta. En breve estaria libre. Llegue a casa bastante pronto ya que habian faltado los profesores de las dos ultimas horas del dia y me habia marchado.

Subi hacia mi cuarto y deje todo en el suelo. Me cambie de ropa, puse la musica a tope, quitandome los cascos, y comence a guardar todo lo que veia sobre el instituto. Apuntes, libros, utensilios, mochila... Todo. Mientras guardaba todo lo que encontraba comence a cantar a todo pulmon mientras bailaba y tiraba cosas a la basura. Estaba exahusta. Me tire en la cama con fuerza y me rei sola. A pesar de todo lo malo que habia sucedido estana relajada. Los chicos me habian tranquilizado y Harry tambien de alguna extraña manera que no conseguia comprender.

La musica seguia sonando, todo canciones movidas. Rei levemente ante la frase de la cancion: 'Never say yes to the right guy'

Mmm... Si, toda la razon. Nunca le habia dicho que si al chico correcto. A lo largo de mi adolescencia solamente habia tenido un novio, que resulto ser un tremendo capullo. Despues me comenzaron a gustar gilipollas que se reian de las chicas normales, pero loqueaban por las tontas estiradas de las animadoras, o de las chicas ricas del instituto. Negue con la cabeza y me puse a cantar esa cancion a todo pulmon mientras saltaba en la cama. Estaba extrañamente contenta, parecia una niña pequeña, cosa que no comprendia. Cerre los ojos por un momento e intente relajarme. Necesitaba hacerlo, pero no podia. Baje el movil a la cocina con la musica puesta, y comence a cocinar. Era la una de la tarde y los chicos no llegarian hasta las dos y media mas o menos asi que tenia tiempo de sobra para hacer el gilipollas. Si, los chicos habian decidido instalarse en casa sin preguntar siquiera, cosa que me traia sin cuidado ya que mis padres ni siquiera se pasaban por casa a no ser que pasara algo extraño o increiblemente malo. Estaba segura de que no siquiera vendrian a mo graduacion. Negue con la cabeza y me olvide de ellos. Me alegraba tenera los chicos mi lado en todo momento, me sentia querida a su lado. De nuevo.

Comence a cocinar unas lasagnas mientras bailaba y cantaba por la cocina.

Estaba colocando las lasagnas en la mesa cuando alguien me toco el hombro y di un salto tirando un tenedor y un vaso al suelo. Aunque no hubo estruendo del vaso rompiendose precisamente. Me gire y vi a Liam intentando no reirse con el vaso en la mano.

Tu: Te mato, te juro que te mato. -resoplo.

Liam: Lo se. -rie.

Despues de eso quise gritarle pero alguien me cogio de la mano y me dio una vuelta pegandome a el. Cuando alce la vista vi unos ojos azules y un pelo rubio.

Niall; Sabia que me amabas, pero no tanto.

Tu: ¿La lasagna?

Niall: Si.

Comence a reirme y el me dio un beso en la frente riendo. Despues Niall me dio una vuelta en el sitio y me cogieron de nuevo de la mano. Ese era Zayn con sus perfectos ojos caramelo.

Zayn: ¿Como bailabas?

Tu: ¿QUE? -Chillo- ¿Cuanto llevais aqui?

Zayn: Bastante. -rie y hace que baile de alguna manera rara con el- Seguro que te piso, ten cuidado.

Él se convirtió en todo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora