Él se convirtió en todo.

capitulo 3.

Hasta despues de unos minutos de despertarme no me di cuenta de que no me encontraba en casa. Sali de la cama y abri los ojos como platos. Estaba sin pantalones y solo llevaba una camiseta que me iba realmente grande y que suponia que era de Harry. Al menos olia a el. ¿Que habia pasado? Entre en panico de repente pero despues me di cuenta de que a Harry no se le hubiera pasado por la cabeza estar con alguien como yo. Suspire disgustada en parte y mire hacia la cama de nuevo. Harry no estaba en ella. Saque la cabeza por la puerta y no escuche nada mas que voces de fondo, parecia la television. Cuando me dirigia hacia el salon alguien me cogio del brazo girandome y choque contra su pecho. Cuando alce la mirada me encontre los ojos esmeralda de Harry mirandome fijamente.

Harry: No salgas de la habitacion.

Tu: ¿Que? ¿Que pasa?

Harry: No salgas, despues te lo expli... -frunce el ceño- Que no salgas.

Me quede mirandolo y asenti. No queria estar tan cerca de el porque le diria a todo que si. Puse los ojos en blanco cuando me empujo para que entrara en la habitacion y cuando lo hice, antes de cerrar la puerta, me gire y me quede mirando como Harry se marchaba por el pasillo. Era sensual hasta sin intentarlo. Que estres de chico.

Harry: Para de mirarme y cierra la puerta.

Antes de que pudiera ver mi cara, completamente roja, cerre la puerta y me tire en la cama. Me entraban ganas de reirme yo sola. Estar aqui era una locura. Y me encantaba. Busque mi ropa y la encontre tirada encima de una silla. Busque mi telefono por la misma, pero no estaba. Bien, me habia quedado en casa, deberia acordarme, habia salido corriendo de alli con lo puesto y ese idiota de Tomlinson tambien me lo habia pedido y no lo habia encontrarlo. Me dio un escalofrio ye sente de nuevo en la cama. Apoye la cabeza contra el cabecero de la misma y observe la habitacion con atencion. Era blanca y negra. No muy acogedora, mas bien fria. Parecia un lugar por el que pasas unas horas y te vas. No un refugio en el que quedarte a pasar las horas los dias de lluvia. Habia un armario enorme, una silla negra, la cama y nada mas. Aunque, cuando observe la pared que tenia delante de mis ojos me quede realmente sorprendida. En esa pared habia un dibujo. Era mas grande que yo. Era un angel pero no un angel normal. Era un angel de alas caidas. En blanco y negro. Era perfecto, triste, pero perfecto. Me levante de la cama sin poder evitarlo y me acerque al mismo. Pase la mano por cada linea trazada, por cada pequeña gota de pintura negra que alli se encontraba. Era una obra de arte, y en el fondo sabia que era algo mas. Tenia algun significado oculto en ese precioso ser.

X: ¿Te gusta?

Di un salto y me gire, pudiendo ver a Harry en boxers negros. Su piel estaba completamente tatuada, exceptuando su espalda y piernas por lo que habia visto. Tenia el pelo alborotado, y bastante largo, deberia hacerse un buen corte. Sonrei nerviosa y asenti.

Tu: Es precioso. -digo mirandolo.

Harry: Si. -suspira.

Me quede mirando a Harry y su rostro estaba tenso mientras miraba a ese angel caido que habia dibujado el mismo. Al menos eso pensaba.

Tu: ¿Lo has dibujado tu?

Harry: ¿Quien sino?

Tu: Es increible.

Harry asintio sentandose en el borde de la cama y me miro fijamente. Gire mi rostro y me encontre con sus penetrantes ojos esmeralda. Eran increibles.

Tu: ¿Que pasa? -digo pasando el pelo por detras de la oreja.

Harry: Nada. -sonrie levemente de lado.

Tu: ¿Seguro?

Harry: Es que se me hace raro verte aqui.

Frunzo el ceño y ladeo la cabeza sin entender muy bien lo que queria decir. O deseando entender otra cosa.