★Capítulo O2★

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Los muchachos subieron al avión. Temo no se sentía muy bien, su estómago comenzaba a doler &' una sensación de mareo se hacía presente. Buscaron sus asientos &' se dispusieron a tomar sus lugares. Aris estaba muy emocionado, era su primer viaje en avión con Temo.

El rizado se encontraba mirando por la pequeña ventana del avión cuando notó muy extraño a su novio.

– ¿Estás bien, amor? – Tocando la frente del castaño – Estás sudando mucho &' te veo un poco pálido –

– S-Sí, estoy bien. Es sólo que estoy un poquito nervioso – Respondió mientras limpiaba su sudor.

– No estés nervioso, mi amor – Tomando de la mano al castaño – Aquí estoy contigo –

– Gracias, mi vida – Besando su mejilla – Te amo –

– También te amo, tahi –

Favor de tomar sus asientos, estamos a punto de despegar – Avisó la azafata.

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En la ciudad de México, la familia Ortega se preparaba para recibir a dos huéspedes, Cuahutémoc &' Aristóteles.

– ¿Cómo a qué hora llegarán los muchachos, Ubaldo? – Preguntó Soledad, su esposa.

– No lo sé. Pancho dijo que me avisaría en cuanto el vuelo arribara – Respondió – Él está en contacto con Temo –

– Ya quiero ver a Cuahutémoc – Decía emocionada – La última vez que lo vimos era sólo un niño. Además cuando él &' nuestro hijo fueron novios, no pudimos estar ni un momento con ellos debido a tus campañas políticas –

– ¿Me estás reclamando, estúpida? – Gritó.

La mujer se asustó por la reacción de su marido – No, no. Por supuesto que no. Sólo decía – Agachando la cabeza.

– Espero que hoy te portes bien, no me gustaría tener que golpearte. Estoy muy contento por la llegada de Temo &' no quiero que me arruines este día – Bufó molesto.

– No te preocupes, Ubaldo. No tendrás quejas de mí – Susurró.

– Por cierto, ¿en dónde está Diego? – Preguntó enojado.

– Fue a dar una vuelta. También está muy feliz de volver a ver a Temo – Respondió temerosa.

– Llámalo al celular &' dile que regrese inmediatamente. Me acompañará a recoger a los chicos – Acomodaba su corbata.

– S-Sí, ahorita l-le llamo – Respondió.

Pasaron un par de horas &' el teléfono de Ubaldo sonó. Era su amigo Pancho informándole que en pocos minutos los muchachos llegarían.

Ubaldo llamó al chófer &' le dijo que preparara el auto. Él &' Diego se subieron &' se dirigieron al aeropuerto. Llegaron en poco tiempo &' el vuelo aún no llegaba, así que tomaron asiento en la sala de espera.

Luego de unos minutos, finalmente el avión aterrizó. Ambos se pusieron de pie &' fueron a recibirlos. Diego no podía ni hablar de la emoción. Estaba a segundos de ver al gran amor de su vida, porque sí, Diego aún amaba a Temo &' no iba a descansar hasta separarlo de Aristóteles.

Ubaldo estaba atento observando la puerta en donde llegarían los pasajeros, hasta que vió a los muchachos llegar. Pero enfocó su vista en el castaño de tez blanca, hermosos ojos color avellana &' complexión delgada, pero con un abdomen marcado que era un poco visible a través de su camisa. El mayor quedó impresionado al ver a Temo convertido en todo un hombre, pues la última vez que lo vió, éste era un niño llenito.

°•Obsesión•° [Aristemo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora