14;; F & T.

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Dahyun entró como un rayo a la sala donde estaba Sana, que tenía la cara seria, demasiado. Al verla entrar, sus ojos lo decían todo: dolor, pánico, tristeza. Muchas cosas eran las que comunicaba con una mirada, una mirada profunda y herida.

Pero, aun así, no sabía qué pasaba antes, no sabe de qué hablaban Chaeyoung y Sana, no podría saberlo, ni leer el informe. Pero Minatozaki sabía, lo había sufrido esos minutos antes de que entre la chica más pálida.

«Flashback».

— Minatozaki, dime — soltó Chaeyoung apenas se sentó la nombrada—

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— Minatozaki, dime — soltó Chaeyoung apenas se sentó la nombrada—. ¿Me recuerdas? ¿O te olvidaste de la pequeña niña inocente a la que lastimaste hace años? — se levantó lastimada, aún no conseguía una respuesta—. Yo sí, yo te recuerdo, aún te tengo aquí —. Chaeyoung señaló su brazo, donde Sana había cortado cuando era la menor aún una niña, la había mandado al hospital esa vez.

— Sí, recuerdo eso —. Una pequeña sonrisa nerviosa apreció en su cara mientras esperaba—. ¿Podemos pasar a las cosas importantes?

— No vas a salir de esta, Sana, no voy a permitirlo —. Gritó Chaeyoung golpeando la mesa violentamente, como un martillo de un juez, determinando su sentencia; un severo castigo llamado cárcel.

— Sigues siendo esa niña, aún te veo ahí —. Señaló sus ojos, sus profundos ojos marrones—. La pequeña Chaeyoung, ¿No? Qué lástima que hayas presenciado lo de tu madre, intenté que Momo no la matase en tu cara, pero fue inevita—. No pudo terminar debido a que Chaeyoung sacó su arma y apuntó a Sana con ella, justo en la cabeza.

— No nombres a mi madre, porque no tengo miedo de tirar del gatillo como sigas insultándola de ésta forma, maldita p—. Bajó el arma y se calmó, su ceño fruncido era de ira, quería realmente vengarse, su madre no mereció morir esa noche, ni siquiera tenían dinero o joyas, no fue por eso, fue porque sí, y Chaeyoung no soportaba los "porque sí".

— Si me matas, te despiden —. Rió nuevamente.

— Haré lo que sea para borrarte esa estúpida sonrisa burlona del rostro —. Soltó y se sentó de nuevo—. Ahora escuchame y responde, solo con la verdad o te juro que me atrevo a hacerlo.

— Bien, tira las preguntar —. Bromeó—. ¿Entiendes? ¿Tirar? ¿Gatillo? Ésto es tan divertido —. Rió.

— Estás enferma —. Suspiró y la miró seriamente—. ¿Por qué haces esto? ¿Qué quieres?

— ¿No es obvio? Quiero que Momo sea feliz, además de joyas y dinero, pero ¿Quién no quiere eso? —. La máquina no sonó, decía la verdad.

— ¿Por qué mataron a Heechul? —. Soltó Chaeyoung cansada.

— Momo lo hizo, no sé qué pasa por su mente para hacer tal cosa —. La máquina sonó, mentía.

Éxtasis - SaiDahMo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora