❝SKIN TO SKIN❞ ©Abeshiya

Capítulo 14

Exactamente después de una semana, Hanae dejo de pensar en todo el asunto sobre haber tenido relaciones sexuales con su jefe cuando todavía estaba comprometido con la señorita Zenko. No tenía nada encontra de la chica ni contra Haruitsuki, especialmente con él porque no tenía caso estar detrás de una persona que nisquiera es capaz de sostenerte la mirada por unos segundos.

Además, lo peor del asunto reside en qué su puesto de trabajo fue desplazado hacia Gyōsei debido a un nuevo viaje que tenía que hacer junto a este, a la ciudad de Nueva York. Tenía la idea de que era bastante importante sino..¿Por qué llevaría a Gyōsei al viaje? no era que fuese un incompetente pero, su trabajo se centraba en el ámbito de abogacía. O era simplemente su mente tratando de convencerlos que Hanae no era lo suficiente para asistir a un viaje de negocios con la posibilidad de acabar como esos días en la isla.

Al menos ahora sabiendo que Haruitsuki no estaba cerca y que Gyōsei tampoco estaba para traerlo como esclavo, podía hacer en paz su trabajo sin interrupciones. Aunque eso fue solo un instante ya que algunos compañeros seguían cuchicheando entre los pasillos estupideces sobre su jefe y la gran boda que sucedería en solo unos meses. Por dentro quería ir a tirarles la taza de café que tenía en sus manos, de todos el café no era su bebida favorita. Lo pensó un momento antes de terminar vertir el azúcar en el agua y disolverlo con una cuchara de plástico con furia. No debía poner atención a lo que decían, sin embargo, sus oídos estaban preparados para escuchar la más mínima palabra.

─¿Por qué estás tan segura?

─Te lo digo, lo escuché de parte de Gyōsei-sama, mientras tenía una reuniones con Zenko y Abeno-sama. Solo que no escuché si hay una fecha concreta.

Hanae sintió el frío sobre su cuello arrastrándose sobre su espalda, sabía que lo suyo con Haruitsuki era un hecho imposible donde el más herido sería precisamente él. Se rió de si mismo sintiéndose bastante mal por lo que escucho... quería conocer más a Haruitsuki. Con desagrado y sin ganas de beber el café recién hecho, tiro el contenido en el fregadero. Volvió a su lugar ignorando olímpicamente a las dos mujeres que seguían platicando sobre todo lo que veían en la oficina en la que trabajaban, no le faltaron ganas de pedirles que fueran a sus trabajos pero de nuevo se obligó a no meterse en asuntos que no debía.

Mientras terminaba de modificar y agregar número al papel electrónico de word su vista comenzó a volverse borrosa gradualmente hasta el punto que se sintió mareado. Hanae sintió la silla donde estaba sentado tambalearse así que uso sus manos para estabilizarse, respiro hondo cerrando sus ojos. Pero cuando abrió sus ojos extrañamente todo a su alrededor giro sintiéndose desorientado, su cuerpo de tambaleó hasta que cayó al suelo.

Y una cortina negra sintió su vista y sentidos.