Comptine d'un autre été

Adiós

«Esta vez te escribo para despedirme. Es dificil irse, pero creo que va a ser mejor para todos. Si, bueno, unos se beneficiarían más que otros. Quería decirte, antes de irme, todo lo que pienso. Todo. TODO.

TODO

Todo es todo, sin excepciones. Creo que cuando me vienes a la mente ( además de hacerte estornudar a distancia) me sacas una sonrisa. Te va a parecer estúpido, pero eres el cincuenta por ciento de mi inspiración, así, en bruto. Creo que si no te hubiese encontrado, y si no me hubieses animado en silencio a seguir, a esforzarme. A escribir cincuenta horas para perder la ilusión en solo dos segundos, ahora no me estaría despidiendo. Y he durado, ¿Eh? 

Pero cuando te mandan a luchar y te dan donde más te duele, una se cae, ¿sabes? 

Le da la razón y se retira. Siempre dicen que soldado que huye sirve para otra guerra. Pero no. Hay algunos que no vuelven. Que le quitan las ganas. Y tú... tú tenías que leerme antes de que me fuese. Al menos quedamos en paz. En parte.

¡Que eres un grande! ¡Que te lo creas! Que me escuches...

En fin, hagamos como si estuvieras leyendo esto. Quiero decir, y muy enserio, que siempre te he "odiado" de esa bonita forma en que "odias" a un escritor cuando te deja con ganas de seguir leyendolo, de seguir conociendole. Ya sabes... esa bipolaridad extrema del tipo "Te oido... ¡Eres increible!". Esa era la mía. Si, es cierto, suele pasarme. Pero solo con personas que valen la pena. A las otra las odio de verdad. Por que me entristecen, ¿Sabes? Hacen como si nada fuese con ellos y todo lo arrojadizo que tuviesen a la mano pudiesen lanzarlo. Siempre le dan a la misma, qué pura casualidad. Tú un día estuviste de ese otro lado. El tiempo que tardé en verte más allá de la tapadera. Si vieras... ¡Si vieras cuanto muestras!

No, pero no era eso lo que quería decirte. Espera, si, si era eso. Mucho más, mil cosas. Quiero exprimir bien mi última carta hasta los restos. Ya sabes, hasta que ya el papel no pueda arrugarse ni un milímetro más. Eso hacía yo con mis historias. Folios y folios lanzados a la basura como si tal cosa. Y si, esta es una de las muchas cosas que he escrito y no he sido capaz de arrugar por que hablaban de ti. De echo, y mira qué curioso, una vez me dijeron que podría escribir un libro entero con esa fuente de mi inspiración. Lo que pasa es que no podían intuir que la fuente de mi inspiración era el inicio de todo. Nunca el final. El final tiene un nombre. "pulse aquí para eliminar la cuenta definitivamente".

Si, está bien, me has ganado, chico. Si, tú. Después de todo, está bien eso de que primero te animes a leerme y después me destruyas (y que conste que he cambiado bruscamente de destinatario). Así das más argumentos en mi contra. Así dices "Cambia esto", "escribes mal lo otro" y, lo que más duele " ¿Ves ese comentario? Esa foto negra solo miente". Incluso, a veces, y solo a veces, acaba enterrandome con un " ilusa. Es imposible tenerte en cuenta para nada" " Él se rie tan, pero tan fuerte en tu cara que tienes que escucharlo. No puedes ser tan sorda". No creas que no lo sabía. Que te lo digan tan directamente es guay, supongo. Estan las personas que esconden ese tipo de cosas para no hacer daño, y estan las que lo sacan del escondite y te lo ponen delante de los ojos. Bueno, bueno, que te he creido. Grita, Baila, haz lo que te venga en gana. Pero no saques la cabeza, por que vas a ahogarte con tu propio veneno. Al igual que él, él, ÉL, el escritor oscuro, o cualquiera de aquellos hirientes motes que le has puesto, me inspira tranquilidad (Que es mucho más de lo que podria haber deseado nunca), tú me inspiras odio, rabia. Por que en el fondo tienes razón y no tienes otra forma más directa para decirlo y que duela mucho más. Mira, y te doy la clave. Nómbrale. Escribe el nombre del escritor oscuro en tus mensajes. Dile una vez más todo lo que le has dicho y la manera en que lo has relacionado conmigo, con lo que hago, con lo que intento hacer. Eso basta. ¿Sabes qué?

Él, el escritor oscuro, es mucho más de lo que tú crees. ¿Sabes? Por mucho que digas por mucho que pienses... ¡Todo es envidia! Qué fácil es odiarle, lo sé. Pero creo que es más fácil aún quererle, por que se hace querer. Por mucho que te duela. Si, venga. Puestos a hacer daño... ¡Ahora me toca a mi!

Él es... oscuro, mucho. A veces todo se vuelve loco y muestra la parte cercana de él. Mira, me descoloca, ya no sé como va a volver mañana. Ni siquiera sé si dentro de tres horas será igual que tres horas atrás. Eso se llama ser impredecible. Tú simplemente vuelves siempre con lo mismo. Si, vale. Hace más daño que lo anterior, pero nunca se ve un cambio. Eres uno de esos personajes planos de los que nadie se acuerda. Ahora, dime. ¿Quien lo olvida? ¿Quien dice que tú lo hagas? ¿Hablarías tan claramente de alguien que no te importa olvidar? ¿Vas a responderme a todo, o a seguir leyendo?

Por que tengo por donde seguir...

Creo que él sabe qué decir y cómo decirlo para que no duela ni un poquito. Bueno... a una persona normal. A mi me duele todo, a decir verdad. Pero mira, hasta una crítica constructiva un día de perros de los mios suena bien después de un rato si es él quien la envía. Un año después. Con el terror que él me daba (da). Va y se acuerda de mi. Mira, no seré gran cosa, pero ha sabido como enviarme el mensaje. Eso es más de lo que tú podrás conseguir. Por que si tan solo le hablases, tendrías que esconderte. A veces el escritor oscuro es oscuro de verdad. Atraviesa pantallas, y deja ojos morados. Si, lo sé, lo sé. Es imposible que hiciese algo así por mi. Pero tengo la oportunidad de pedírselo. Así como de despedirme. Ni siquiera sé qué hago escribiendote a ti. Se supone que era a él a quien tenía que dedicarle las cosas. Merecer, no mereces ni que me despida de ti. Así que haré lo mismo que él hará conmigo dentro de un tiempo. Olvidar.

Lo que he liado para decir adiós, ¿No te parece, escritor oscuro? Podría solo decirtelo, y ya está. Pero creo que nunca queda claro, por muchas veces que lo escriba, nada de lo que pasa. por que podré escribir millones de veces lo mismo, y nunca me cansaré de hacerlo. Inspiración, creo que así se llama eso. Que pasada. Nadie me inspiraba antes de que tú llegaras. Así que adiós, escritor oscuro.»