21.- Tiempo.

2.5K 199 64
                                    

Lights Out - Royal Blood

***

Levanta mi bra y comienza a lamer mis pezones. Sin poder contenerme más sale un pequeño gemido de mi boca.

-¡¿Qué hacen niños?! -escucho el grito de papá que seguramente escucho mi no tan pequeño gemido desde abajo.

¿Cuándo entró?

Me siento como una adolescente que acaba de ser descubierta.

¡Ayuda!

-Na-nada -respondo tartamudeando mientras me levanto y a prisa me dirijo a la puerta de la habitación.

Escucho como mi papá sube y tengo miedo, ¡mierda! Ni siquiera sé porque tengo miedo.

Me giro al escuchar la risa de Matías.

Esta sentado cómodamente en la cama, riéndose mientras me mira.

-¿Te estás burlando de mí?

-Por supuesto.

-¿Por-por qué?

-Tranquila -sonríe.

-¿Qué estaban haciendo chicos? -pregunta tranquilamente Bob.

-Recién llegamos también y venimos a recostar a Matty en su cuna -responde Matías con naturalidad.

-Es que escuche un ruido extraño y...

-Seguro fue Lesly -dice Matías quitándole importancia.

Abro mucho los ojos y las manos me comienzan a sudar, miro a mi padre y tiene los ojos igual de abiertos que yo, pero por suerte no ve que me estoy poniendo roja como jitomate.

-¿Por qué esa cara señor? Me refiero a que fue Lesly la que hizo ese gemido, estaba recostando a Matty en la cuna y con lo torpe que es se golpeó en el respaldo de la cuna la parte baja del estómago.

-Ya veo -responde mi papá no muy convencido pero al parecer satisfecho -bajaré a comer algo, muero de hambre, deberían venir a hacerme compañía, para que no estén aquí solos.

Matías asiente, mi padre me mira una última vez antes de salir de la recámara.

-¿En serio? ¿Gemí por un golpe? -susurro.

-¿Tenías una mejor idea?

Niego.

-Muy bien, ahora relájate y vayamos a comer con tu papá, si no se pondrá peor.

Sonrío divertida, claro que aún me sudan las manos, tengo miedo, ansiedad y nervios por saber que mi papá me descubrió, pero fuera de todo eso, recordar el momento, es algo bueno, estuvo bueno.

***

-Me alegra mucho que aceptarás mi invitación -dice Yalet sonriéndome.

-Algo tarde, pero con lo de dar a luz, la cuarentena, ya sabes no he podido salir antes.

-Yo entiendo, no te preocupes Les, al menos ya nos dio tiempo, ¿cómo estuviste estos días? Quise ir a verte para conocer a Matty, pero el trabajo no me dio tiempo.

Matías Fischer ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora