Matías Fischer ©

12.- Volviendo a casa.

Dividida - Anahí

***

-Buenos días dormilona. -giro mi rostro y me encuentro con un Matías despeinado viéndome fijamente.

-Luces guapo.

-Siempre. -sonríe y yo suelto una carcajada.

-Vaya. No creí que tuvieras un ego tan grande.

-Todos tenemos nuestros momentos egocéntricos.

-¿Qué hora es?

-Las 5 de la mañana.

-Dios. Es muy temprano, debo dormir 5 minutos más.

-Nuestro vuelo sale a las 7 y debemos desayunar y despedirnos.

Hago un puchero. -Bien.

-Actúas como una bebé. Pero no lo sé, no me gusta llamar bebés a las mujeres. -muerde su labio. -Ya pensaré en algo.

-Puedes solo decirme Lesly. -pongo los ojos en blanco, así como en los libros, tipo los aviento para atrás, ya saben, ¿verdad?

-¿Solo decirle Lesly a mi chica? No me agrada mucho la idea.

Me sonrojo por su comentario pero lo disimulo girando mi rostro. -Muy bien sol. Ya pensarás en algo.

Deja un pequeño beso en mis labios y se levanta para entrar al baño.

La habitación de Matías es muy él. Ordenada, limpia, elegante.

***

-Los vamos a extrañar mucho, vuelvan en cuanto puedan, antes de que esa panza no te deje. -dice Paula abrazandome con fuerza.

Sonrío y asiento cuando nos separamos.

-Los vemos el lunes en la oficina. -dice Violeta tomada del brazo de Carlos.

-Llegas puntual. -dice Matías serio.

-Siempre hermanito.

Violeta y Carlos se quedarán unos días más. Es viernes, ellos se irán el domingo.

-Hasta luego. -Matías abraza a su padre y besa la frente de su madre. -Los amo.

-Y nosotros a ti cariño. -responde Paula sonriente.

Después de recibir un efusivo abrazo de Sheccid y una mirada de odio de Andrea, nos vamos.

***

-¿Le dirás a tus padres?

-¿Qué cosa? -pregunto mirando por la ventana.

-Que lo vamos a intentar.

-No lo sé. No sé como lo vayan a tomar.

-Pero si nos vamos a casar y tendremos una hija, ¿en serio crees que les va a molestar?

Asiento mientras muerdo mi labio. -Ellos pueden ser muy extraños.

Matías bufa y lo miro. Luce asustado, ¿le asusta lo que piense mi familia?

-¿Qué pasa?

-¿Y si no están de acuerdo?

-No tiene importancia Matías, no soy una niña, tomo mis propias decisiones.