Katsuki Bakugou siempre ha sido rudo y hasta cierto punto bastante cruel, pero siempre tenía una sonrisa en su rostro, ya fuera de felicidad o de arrogancia la tenia, pero ahora no hay más que un par de ojos rubies llenos de terror.
Será el trabajo...
Ahora que me doy cuenta no di el aviso del uso de OoC, perdón xdxd
Pero bueno, no es mal momento para decirlo, a partir de aquí habrá DEMASIADO uso del OoC además de escenas no aptas para público sensible, en este capítulo no tiene escenas de lo antes mencionado pero la advertencia ya fue dada...
No me gustó el capítulo pero que más da, disfrútenlo
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Katsuki despertó al rededor de las dos de la tarde, su cuerpo estaba cansado, adolorido y estresado, pero ahora ya podía estar tranquilo, todo había terminado y podría descansar cuanto quisiera, aunque no en ese momento.
La ansiedad lo consumía por seguir encerrado en una habitación, si, no era la misma en donde "trabajaba" pero estar encerrado no le agradaba, por lo que de una manera lenta bajo de la camilla en donde estaba recostado y salió de la habitación a un paso muy lento debido al dolor que aun tenia, sin algun tipo de calzado y sin que nadie lo viese.
Camino muy poco-por no decir que solo doblo la esquina al final del pasillo- en donde encontró una ventana, en ella pudo sentir el sol dando contra su rostro, de una manera muy lenta puso su mano en el cristal, cerro sus ojos- o al menos uno de ellos debido al parche en su ojo-dejandose llevar por el calor que hacia mucho no sentia.
Su tranquilidad se termino cuando una enfermera toco su hombro, provocando que se asustara y volteara la cabeza con rapidez y una expresión de miedo en su rostro
- Perdón cariño, pero, ¿No deberías estar en cama?
- Si, solo quise salir de ahi- La enfermera no cuestiono mas, solo trajo una silla de ruedas para que el rubio hiciese el mínimo esfuerzo
La enfermera llevo la silla de ruedas a la habitación del chico en donde se podía escuchar un alboroto, pues Mitsuki al entrar y no ver a su hijo se había asustado.
Por otro lado, Katsuki observaba a la mujer más hermosa que recordaba haber visto en su vida:su madre, habia sido un largo tiempo sin ver su rostro, sin ver sus ojos y sin oler su perfume, estaba llegando a creer que estaba muerto y esa era la despedida.
- Mamá...- ese simple susurro fue suficiente para llamar la atención de la rubia.
- Katsuki, ¿Dónde mierda estabas?- la rubia sintió un alivio enorme al ver a su pequeño ahí, pero eso no quita que sea Mitsuki Bakugou
Bakugou bajo de la silla, quedando de rodillas en el suelo, su madre se agachó y lo abrazo, el chico de aferró con toda la fuerza que pudiera a su progenitora.
- Mamá...
- Calma, ya estoy aquí y no me voy a ir- Masaru se acercó a la escena y abrazo de igual manera a sus dos rubios, la familia por fin estaba completa
Después de separarse unos minutos después el castaño llevo a su hijo de regreso a la camilla, la enfermera dijo que debía tener al menos un día más de reposo, los golpes que tenía no eran tan graves a excepción de la nariz rota pero no por eso debían tomárselo a la ligera
