Depressed |Sycholls-Syrostov|

Cap.15 "Confidentes"

(En la noche)
Narra: Cameron.

Lynn: ¿Quieres un café? - Estábamos en su casa y estaba dispuesto a contarle mi historia. Me encontraba sentado en el sofá esperándola a que estuviera cómoda.

Cameron: Sí, por favor - Volvió de la cocina con dos tazas. Se sentó a mi lado y comenzamos.

Lynn: Bien, cuéntame. Soy toda oídos - Sonrió.

Cameron: Está bien. Hace unos años, cinco para ser exacto, tenía una novia. Ella era la más tranquila de toda la escuela y curiosamente se llamaba como tú.
Yo pertenecía a una pandilla y en ocasiones teníamos muchos conflictos, pero esta vez nos metimos con las personas equivocadas.
Nos amenazaron a todos y a mi me dijeron que me quitarían lo que más amaba. Fue el 13 de mayo que esos tipos llegaron a mi casa y ella estaba conmigo, le dispararon y cayó a mi lado.
Ella falleció y desde ese momento que vivo con miedo.
Huí de Nottingham y mis compañeros me cuidan desde ahí. Hace poco le confesé a Matt que era igual que él y que nos protegeríamos mutuamente, además de a ustedes.
Sé mucho acerca de Denis. Sé que él no es un santo y que estuvo metido en asuntos de violación a chicas con una red y a tráfico de drogas.
Se ve tranquilo, pero solo finge, sus padres viven en Ucrania hace más de 22 años y nunca han pisado este país.
Vino aquí en busca de una chica que nunca encontró y se quedó con nosotros, fingió estar enamorado de Oliver y no hizo nada más que abusar de él para cabrear y pelear con Matt.
Tenemos que cuidarnos entre todos y ahora que tú sabes, nos puedes ayudar a acabar con todo esto.

Lynn: Joder, Cameron. N-no sé que decir, esto me golpea. No puedo creerlo.

Cameron: Ha sido difícil, Lynn - Surgieron minutos de silencio en ese momento, hasta que ella abrió su boca.

Lynn: ¿Estás bien? - Me preguntó mirándome fijamente.

Cameron: Todos me preguntan eso. Venir aquí es una de las mejores decisiones que he tomado. Los conocí a ustedes, mis verdaderos amigos y mi deber será protegerlos - Saqué un cigarrillo de mi bolsillo junto al encendedor, lo llevé a mi boca y lo encendí.

Lynn: No puedo creerlo.

Cameron: Tranquila, ya lo vas a digerir. Ahora, cuéntame de ti. Quiero oírte - Le di una calada al cigarrillo.

Lynn: No tengo una gran historia como la tuya, pero aquí va. Mi madre falleció cuando yo tenía 3 meses de vida, por lo que mi padre se hizo cargo de mí. Siempre fui una chica fuerte de carácter, me defendía de cualquier cosa que me atacara.
En los primeros años de primaria descubrí que me gustaba un chico, el más guapo de la clase. Llegó una chica a los meses después de ese año escolar, la más alta, perfecta y bien peinada de la clase y me comenzó a gustar.
En ese tiempo no entendía por qué me gustaban ambos chicos, un hombre y una mujer.
Le conté de eso a mi padre y me comentó que era algo normal y que no importaba si me gustara alguien o si fuera hombre o mujer.
A mitad de quinto grado comenzó el bullying, un estúpido me molestaba por estar con una niña y fue cuando lo golpeé. Recuerdo haberle sacado un diente.
Me cambiaron de escuela, pero ese bullying siguió. Mi padre también consiguió un trabajo mejor, pero teníamos que irnos de Estados Unidos. Inmediatamente después de que me dijo, yo acepté y así llegué aquí.
Conocí a una chica que vivía cerca de mi nueva casa e intenté tener una relación con ella, pero luego conocí a un chico y las cosas no funcionaron con ninguno de los dos.
Le pedí a mi padre independencia, pero él se enfadó mucho y más ganas me dieron de vivir sola, así fue como me quedé viviendo con Oliver, así aprovecho de cuidarlo y darle todo en el gusto.
Mi vida se basa en enamoramientos y bullying.
Nada más - Al finalizar le dio un sorbo a su taza.

Cameron: ¿Y ahora estás enamorada? - Ambos reímos.

Lynn: No lo sé. Me interesa alguien, pero no es nada.

Cameron: Que interesante. Ojalá conocer al afortunado o afortunada - Ambos reímos.

Lynn: No es nada, Cameron.
Hey, podríamos llamar a los chicos.

Cameron: Sí, dame un segundo - Terminé de fumar y saqué mi móvil para marcarle a Matt.

Narra: Matt.

Nuestra cena fue interrumpida por mi móvil.
Le dije a Oliver que ya volvía y contesté la llamada, es Cameron.

(inicio de la llamada)

Cameron: Este hijo de puta es difícil de tratar - Señaló con voz cabreada.

Matt: ¿Te hizo algo?

Cameron: Sabe mi pasado, Matt.
Estuvo investigando de todos, probablemente. Es un imbécil.

Matt: No importa que sepa de nosotros, no hay que dejarlo ganar. Hay que mantenerlo alejado de Oliver, ese es el plan.

Cameron: Sí, lo sé, pero si me saca de quicio lo mato.

Matt: No, no dejes que lo que te diga te afecte. Él no debe ganar. ¿Quién más sabe de esto?

Cameron:  Solo Lynn, ella me ayudó.

Matt: Muy bien. Creo que nosotros volveremos mañana en la tarde.

Cameron: Está bien, diviértanse y mantén distraído a Oliver.
Nos vemos.

(Fin de la llamada)

Volví al comedor con mi vista fija en el móvil.
Ahí fue cuando Oliver intentó llamar mi atención tirándome una servilleta enrollada en la cabeza.

Matt: Que buena puntería tienes - Reí mirándolo fijamente.

Oliver: ¿Quién era? - Preguntó algo asustado.

Matt: Era Cameron, quería saber cómo estábamos - Me senté a su lado.

Oliver: Ah. Matt, mira la hora - Señaló su móvil, eran las 11:50pm.

Matt: ¿Quieres descansar? ¿Quieres dormir?

Oliver: Estoy muy cansado.

Matt: Bueno, le daré la mejor habitación, su señoría - Ambos reímos. Oliver tomó mi mano y se levantó de la mesa. Nos dirigimos hasta la habitación.

Oliver: Hace mucho frío - Dijo tocando sus brazos en el umbral de la puerta de la habitación.

Matt: Tengo unas mantas guardadas, si quieres las traigo.

Oliver: Sí, por favor.

Matt: Bien, ahora iré. Acomódate en la habitación. Ahora regreso.

Fui hasta el gran armario que estaba al final de la cabaña.
Saqué de ahí dos mantas, una para mí y la otra para él. Obviamente, la mejor para Oliver.
Volví a la habitación con las mantas en la mano, cuando lo vi sin camiseta.
Él me miró asustado y me di la vuelta rápidamente para evitar verlo.
Me quedé ahí esperando a que se vistiera o se acostara, pero en vez de eso sentí sus manos pasar por mi cintura y su cabeza chocar con mi espalda.

No sabía como reaccionar, yo seguía con las mantas en mis manos y él rodeándome.
Estábamos en el más absoluto silencio cuando escuché un: "Gracias" salir de su boca.
Dejó de abrazarme y le pasé la manta.

Matt: Dormiré en el sofá. Estaré ahí si me necesitas.

Oliver: Está bien. Buenas noches - Su rostro mostraba tristeza.

Matt: Descansa - Me acerqué a él y el di un pequeño beso en la frente.