Esclava Predestinada.* JK y Tn

Volver a amar?

Cap 14

POR JK...

JK: Qué?

T/n: Lo que escuchaste.-dijo con aire refinado.

Está totalmente cambiada, de cabeza a pies. Es como una reina. Manos blancas y delgadas, piel aterciopelada, sin manchas. Sus perfectas curvas marcadas por la ropa que llevaba. Su perfecto maquillaje, su cabello levemente ondulado en las puntas y sus labios... Prefiero no terminar, soy un hombre casado.

Estuve en silencio.

T/n: Tomaré el silencio como un sí.-se acercó a mí y me abrazó.- Te extrañé.-yo estaba perplejo.- Estaré aquí a las 8am.

Se separó de mí y caminó hacia la puerta y la cerró con la mayor majestad de este mundo.

Está viva, mejor que nunca, hermosa y siendo la misma chica que si se empeña por algo, lo logra, porque seguro estoy de que todo esto es un plan para tenerme de vuelta y sinceramente, solo con venir aquí y abrazarme, me tiene en sus manos.

JK, tienes que borrar todo de tu mente, estás casado, muy bien casado y no te puedes permitir serle infiel a tu esposa.

Eran demasiadas las cosas que pasaban por mi cabeza como para continuar trabajando, por lo que preferí ir a casa para despejar mi mente.

Vanessa estaba en el dormitorio, acostada, mirando a su celular.

En realidad ella es una chica increíble, tierna, amable, refinada, sin una pizca de maldad, es la chica perfecta, y aunque me casara con ella y no niego que no fuere por amor, yo siempre he amado a T/n y ahora que regresó, no quiero hacerle daño a Vanessa.

JK: Cómo fue tu día?-me acerqué a ella, me senté en la cama y me quité los zapatos.

Vane: Tranquilo, y el tuyo?-dijo con voz cálida y agradable.

JK: Como siempre, algo agitado.

Vane: Salimos a cenar? Hace tiempo que no lo hacemos.

JK: No es mala idea, hagámoslo.

Acercándose la noche, ambos nos arreglamos para ir a nuestro Restaurant preferido. Salimos en mi auto y llegamos en menos de 20 minutos.

Había una mesa casi vacía, era de 5 personas, pero nos dijo el mesero que había una pareja allí sentada, que por suerte no se negó a compartirla con nosotros.

POR T/N...

Tae y yo, para celebrar que trabajaré para JK iremos a cenar al Restaurant más caro de aquí.

La única mesa libre era para 5 personas, pero aun así, queríamos degustar la comida del maravillado lugar por lo que no nos molestó en lo absoluto ocupar dicha mesa.

Aún no habían tomado nuestra orden, cuando un mesero se acercó informando que otra pareja estaba allí y que si podíamos compartir la mesa.

Yo no tuve problemas y al mirar a Tae parece que él tampoco, por lo que le dije que estábamos dispuestos a compartir.

Para mi sorpresa, eran JK y su esposa. Era la primera vez que los veía juntos delante de mis ojos, por lo que se me cayeron los ánimos y sentí como se me estrujaba mi corazón, viendo la hermosa y tierna pareja que formaban.

Vane: Buenas noches.-sonrió amable.-Les doy las gracias por permitirnos acompañarlos, son muy amables.-se sentaron en la mesa.

Es la mujer más pasiva, hermosa, amable y delicada que haya visto antes. Es la esposa perfecta, refinada y tierna, de esas que quieres encontrar y solo existen en los sueños.

T/n: No hay problema, sé que este Restaurant tiene demasiada fama y por eso casi nunca tiene mesas vacías.

Esperamos a que el mesero tomara la orden para luego yo levantarme de mi lugar y decir.

T/n: Voy a retocar mi maquillaje, vuelvo enseguida.

Vanessa también dijo: Te acompaño.

De esta forma, ambas fuimos hacia los aseos y sacamos nuestros quits de maquillaje.

T/n: Usted y su acompañante, están casados?-pregunté para iniciar una conversación.

Vane: Sí, hace tres años.-ella sonrió.

T/n: Supongo que deben ser muy felices.

Vane: Por supuesto, hasta hemos hablado del tema de tener hijos.-eso fue como una estaca en mi corazón. Me dolió demasiado como para poder decir palabra.-El que la acompaña es su esposo?

T/n: No, solo un gran amigo que me ha ayudado durante años y le debo mi vida y mi bienestar.

Vane: Es que hacen una hermosa pareja.

De esta forma, volvimos a la mesa y los platillos estaban servidos.

Comimos en silencio, el que me consumía por dentro. Sabes lo que es querer romper un matrimonio entre dos personas que se aman y en parte, ambos se merecen, tanto porque el hombre es maravilloso, todo lo que deseas y la mujer sea el complemento perfecto para alguien así? Pues es lo que me sucede.

Regresé a casa y corrí a mi habitación, encerrándome en esta, para dormir y olvidar mi vida por completo.

Desperté tardísimo, como nunca. Apresuré el paso y llegué por suerte a tiempo a la oficina de JK.

T/n: Estoy aquí.-dije entrando por la puerta de la oficina.

JK: Siéntate allí.-señaló con seriedad la silla giratoria que se encontraba delante de su escritorio.

T/n: Dígame, qué tengo que hacer?

JK: Nada, solo...-se levantó de su lugar, haciendo que me sobresaltara. Hice lo mismo y él se acercó más a mí, quedando cerca de mi rostro.-Me volverías a amar?