MADNESS (PAUSADA)

CONFESIONES

-¡LYDIA ESTOY BIEN, SOLO NECESITO ESTAR UN RATO A SOLAS!- le grité, una vez que conseguí el tampón, sin que ella lograse entrar, pues me lo pasó rápidamente a través de su mano.

-¡SCOTT ESTÁ PREOCUPADO!.- contestó de manera que arrastraba las palabras.

¡Joder! Casi me había olvidado de Scott, con todo lo que hablé con Theo y su nuevo interés amoroso, no sabía cómo sentirme al respecto con esa relevación y rezaba para que no fuese alguna persona conocida, pues Theo lo tendría muy difícil.

-YA SALDRÉ, DILE QUE IRÉ PRONTO, PERO VETE LYDIA- le volví a responder. - ¡NOS VEMOS EN UN MOMENTO!

-VALE-soltó en tono entusiasmado y escuché sus pasos alejándose de nosotros, me permití soltar un respiro, aliviada sin su intromisión.

-Habla, tienes 5 minutos.-le espeté fulminante. – Necesito que me expliques qué demonios quieres.

-Malia, jamás quise traicionarte, la manada no me importaba pero tú... Tú siempre fuiste diferente, intenté que no te involucrases, por un momento intenté que te unieses a mí, después de lo sucedido esa noche en el deep, pensé que las cosas cambiarían y que nos acercaríamos, pero, te alejaste más y no me quedó otra opción Malia, sabías que siempre intenté ponerte de mi lado pero tú solo estabas al lado de Scott o... ¿Me equivoco?- lo último me lo soltó de manera sarcástica y no evité, darle un puñetazo contundente que hizo que cayese al suelo.

-Escúchame bien, Theo Raeken, si hubo algún momento en el que te hubiese elegido se fue a la mismísima mierda cuando nos traicionaste, jamás me hubiese metido contigo al saber todo eso y no metas a Scott, es y será el mejor alfa que haya tenido nuestra manada, cosa muy diferente de ti.- le espeté de manera furiosa- Y si ya has acabado, deseo irme. Espero que no jodas a esa persona de la cual dices sentir algo, será mejor que te alejes de ella.

No dejé que me respondiese porque salí del baño y procedí a buscar a Scott, estaba oliendo su incertidumbre e impaciencia desde aquí, por lo que no pude evitar sentirme culpable al dejarlo con la pareja ebria que decían ser "nuestros amigos".

Cuando me acerqué a ellos, me acerqué por detrás de Scott y lo abracé inspirando su aroma. Era algo tan íntimo para mí y él lo sabía, me encantaba la sensación.

-Lia.- suspiró aliviado, notando cómo sus músculos se relajaban.- Por un momento, estuve preocupado.

-Ey, estoy aquí ¿vale? Siempre volveré, Scott.-le susurré de tal forma de que solo él lo oyese y no pude evitar escuchar una leve risa por su parte.

-¿Quieres que nos vayamos?- me cuestionó un poco nervioso- Estoy cansado de ver a Stiles bebiendo y metiéndole la lengua hasta el fondo a su novia, me resulta un poco... incómodo.

No pude evitar sentir lo mismo, parecía que lo hacían a propósito o algo así, por otro lado, me había encargado de que el olor de Theo no estuviese impregnado en mí y por lo relajado que se encontraba Scott, parecía que no sospechaba nada.

-De acuerdo-le respondí dándole un beso en su cuello con lo que respondió con un gruñido, sonreí al notar el olor que desprendía.

-¡CHICOS, NOS VAMOS!- les espetó Scott a ambos y ellos asintieron sin darle mucha importancia.

Scott y yo cruzamos mirada, después enarcamos una ceja al mismo tiempo y procedimos a irnos.

De regreso a su casa, caminamos lentamente hasta su habitación y nos sentamos vestidos al borde de la cama, sus latidos aumentaron al encontrarnos aquí y me cuestioné si se había podido enterar de los sucedido con Theo. Scott se notaba un poco tenso y no sabía porque, no podía haberse dado cuenta de los sucedido, había tenido mucho cuidado.

-Scott...¿Qué pasa?-le pregunté de manera suave, removiéndole el cabello, pero acabó apartándose, ese gesto, logró que algo dentro de mí se tambalease.

-¿Crees que Stiles te ha superado?- me espetó con un tono ¿sarcástico?-Porque hoy me ha parecido que no.

No pude evitar mostrar una cara de incredulidad, este tema si me había tomado por sorpresa, Scott me evaluaba pero no sé que trataba de buscar, puse una mano en su mejilla tratando de que siguiese, parecía que él tenía motivos para soltar eso.

-Scott... ¿De qué demonios hablas?-le espeté aún conmocionada.-Stiles y Lydia estuvieron toda la noche, más pegados que uña y mugre.

-Eso es lo que parecía, pero cuando Lydia te fue a buscar, Stiles se sentó a mi lado y empezó a preguntar sobre nuestra relación.

-Bueno, vale... ¿Y qué?- le pregunté exasperada a Scott, pero él sacudió su cabeza, al final, acabé quitando mi mano, no entendía el punto de esta conversación.

-Lo vi Lia, noté como hablaba de ti con anhelo sobre vuestro noviazgo y como lo comparaba con Lydia, decía que ella era muy intensa y por un momento... – Soltó una carcajada de manera seca, para manifestar lo siguiente: - Dijo que se arrepintió, pero intento disfrazarlo con una supuesta crisis y me reiteró que Lydia era el amor de su vida, Lia.- me espetó con la mandíbula apretada.

No pude evitar sentirme perpleja... ¿Qué le pasaba a Stiles? ¿La borrachera le afectó tanto? No tenía ningún sentido lo que le había soltado a Scott.

-Pero él la ama Scotty, solo son las típicas dudas, sabes que Stiles siempre tuvo un crush con ella y debe ser difícil asimilarlo , está con ella al fin.- le contesté en modo de intentar calmar las cosas, sin embargo, la furia dentro de él aumentaba y noté cómo sus garras empezaban a salir, debía detener esto.

-No Mals, él intenta autoconvencerse de que estar con Lydia era su sueño.-me espetó con voz ronca y vi como sus ojos pasaban a ser rojos, esto ya era demasiado.

-Scott mírame ¿de acuerdo?- giré su cara para mirarlo directamente, sus ojos aún se mantenían rojos-Son solo dudas ¿vale? Todo el mundo tiene dudas, yo te amo a ti, Scott.-le dije en un intento de que se tranquilizase y funcionó, sus ojos volvieron a un estado normal, sus garras acabaron desapareciendo, sacándome una sonrisa de alivio.

-Dios, no sé que me está pasando Lia ... Sé que no debo dudar de Stiles, pero, la manera en que lo dijo... Por un momento me entraron ganas de ahorcarlo Lia, por suerte vino Lydia y comenzaron a bailar, todo se despejó.-me comento exasperado.-Sé que tú no sientes algo por él, pero la sola idea de que él aún sienta algo por ti y que...-no lo dejé acabar por que estampé sus labios sobre los míos.

Me separé abruptamente de él y lo miré, lo que me dio gracia era notar que sus labios, se encontraban en la misma posición en la que nos besamos, con sus ojos cerrados.

-Nunca dudes, Mccall.-le dije en un susurro.

Él abrió los ojos y me sonrió, me abrazó fuertemente y me reí, a veces Scott olvidaba que era un hombre lobo, no obstante, yo tampoco era una simple humana.

-Nunca he dudado de ti Lia, no es de ti de quien desconfío.-me susurró entre sus brazos, antes de volver a sellar nuestros labios.

Lo último que soltó, no logró tranquilizarme, no obstante, decidí no responderle.