Acuérdate de mi

Capitulo 25: Adios Amor

Miré a Dylan... Me dejé caer de rodillas, estaba cansado de estar siempre de pie, y poner la cara para ser abofeteada, estoy arto de luchar en vano, joder tan difícil es vivir una puta vida, en la que no haya ni movidas, ni malos rollos, tan difícil es tener un amor de verdad, noté unas cálidas manos por mi pecho, me levanté del suelo y nos fuimos al salón, oímos unas llaves, era Cory. Me levanté del sillón tan rápido como un rayo, y le metí un bofetón, me eché a llorar.

-¿¡TU ERES GILIPOLLAS?! ¿¡SABES EL SUSTO QUE ME HAS DADO!? - dije gritando

Él agachó la cabeza y propinó un puñetazo a la pared, me giré y me senté en el sillón, Dylan salió de casa, no quería estar en medio de todo esto, es comprensible. Mientras mis lágrimas caían por mis mejillas, Cory se sentó a mi lado, se encendió un cigarro, y a mi me dio otro, me lo encendí y empecé a aspirar ese humo denso que me inundaba los pulmones, mirando al techo solté el humo, me sequé las lágrimas, y le miré.

-Mira Cory... Eres el amor de mi vida, me has enseñado el verdadero significado de lo que es la vida, desde la muerte de mis padres... Pensé que la felicidad no existía, no sabía sonreír, ni vivir a gusto, pero llegaste tu, y me devolviste lo que me habían robado, el corazón, nunca pensé que volvería a querer, bueno perdón, amar, de nuevo... Pero... Veo que si. Y todo gracias a ti. Cory, lo eres jodidamente todo para mi. Y no quiero perderte nunca, de veras, pero... No me demuestras que tu sientas lo mismo que yo... - dije mientras me interrumpió Cory con un golpe bastante fuerte en la mesa.

-¡¿CÓMO?! ¡CARLOS, NO SABES LO MUCHO QUE TE QUIERO, QUE TE AMO, QUE NECESITO TUS BESOS, TUS SONRISAS, TUS TE QUIERO AL OIDO, TUS MANOS CUANDO MAS LAS NECESITO, LA ANSIEDAD Y AGOBIO QUE SIENTO CUANDO NO ESTAS A MI LADO, MIRA... ESTA NOCHE ME FUI A CASA DE MI MEJOR AMIGO A DORMIR, Y PERFECTAMENTE PODRÍA HABERMELE TIRADO, PERO NO LO HICE, Y ES POR QUE TE AMO, TU LO ERES TODO, COÑO ABRE LOS PUTOS OJOS YA! - dijo rojo de rabia

-¡AH! ¡QUE TE VAS TODA LA NOCHE INCOMUNICADO, CON UN AMIGUITO, Y VETE TU A SABER SI ES VERDAD QUE NO HABEIS FOLLADO! ¡¿SABES QUÉ?! ¡QUE TE LE FOLLES SI QUIERES! ¡PENSABA QUEDARME CONTIGO PERO VEO QUE MIS MIEDOS A DECIDIR ERAN CLAROS! ¡VETE A LA MIERDA CORY! - le grite, cogí mi ropa y salí corriendo de aquel lugar, él me siguió...

Corrí hasta un parque, iba mirando hacia atrás, mas bien mirándole a él. Sin querer choque con alguien, cuando le miré a la cara, no pude dar crédito, pero antes de poder decir una palabra, vi un objeto metálico salir de su cazadora, apuntarme con el, y apretar el gatillo, miles de gotas rojas me humedecieron la cara, y un ruido ensordecedor se metió en mi cabeza, pero por alguna extraña razón, no me dolía, abrí los ojos, y unos ojos azules se clavaban en mis pupilas. Un cuerpo del pecado, se desplomaba en el suelo, yo con los ojos como platos, no paraba de mirar su enorme agujero, provocado por aquella mortal bala. No podía llorar, no gritar, tan solo contemplar la grotesca escena, empezó a cerrar los ojos, sin mirar el teléfono marqué el 112, mis ojos estaban concentrados en él.

-U... Una ambulancia - dije con la mirada perdida

Después de un rato, noté que alguien me agarraba del brazo y me apartaba del cuerpo, me limpiaron la cara, y me metieron en la ambulancia con él. Seguía con la mirada perdida, sin derramar ninguna lágrima, era todo tan... Irreal... Llegamos al hospital de urgencia, y me quedé fuera, llamé a Dylan y le dije que viniese al hospital.

Se presentó en 15 minutos con Ricky. Pasaron las horas y yo me salí con mi nuevo hermano a echarme un cigarro, lo necesitaba, pasaron cinco horas y nadie nos decía nada, yo seguía fuera con Ricky, Dylan estaba dentro por si necesitábamos noticias, me obligó a quedarme fuera. Al cabo de siete horas salió Dylan con la cara pálida. Me abrazó con fuerza seguido de un lo siento. Le aparté, caí de rodillas al suelo, y todo el cúmulo de lágrimas salieron como una cascada.

-¡NO, CORY ESTA VIVO! ¡DYLAN VAMOS A VERLE! ¡CORY CARIÑO, ESPERAME! - dije con la mirada perdida

Me levanté pero Dylan me frenó.

-¡CARLOS POR FAVOR, CORY ESTÁ MUERTO JODER, CARLOS TENEMOS QUE IRNOS! - dijo Dylan llorando.

Al ver mi negación, me agarraron entre Ricky y Dylan y me subieron al coche casi de los pelos, allí empecé a gritar Cory, CORY, pero sin respuesta, después nos fuimos a casa de Ricky. Me senté en el sofá, y Dylan me abrazó.

-Carlos, lo... Lo siento joder... - dijo Dylan llorando

-Dylan, mis últimas palabras fueron te odio... Ha muerto, Cory ya no existe, ya... Ya no hay Cory... - dije llorando a moco tendido

Ricky me abrazó, y allí lloramos los tres, sé quien era el hijo de puta que le ha matado. Ha sido Álvaro. Juro que le mataré, con mis manos, total, ya no tengo nada que perder.

Me siento... Me siento tan mal... no pude evitarlo, corrí hasta el baño, y vomité, me miré al espejo, y me daba asco lo que veía... Era tan repulsivo... Que asco. No quería vivir, Cory ha sido el único que me ha robado el corazón.

Me desvestí y me metí en la cama, no podía creerme todo lo ocurrido, todo lo que estaba pasando, Cory muerto, Álvaro suelto, yo muerto en vida... Cruel y doloroso destino el que me depara, me río yo de el, miré mi movil, mis fotos con Cory, mis mensajes con Cory, mis recuerdos con Cory. Joder... Estuve horas recordando, hasta quedarme dormido.

A la mañana siguiente, me vestí y me dispuse a ir al entierro, cuando Ricky se interpuso en mi camino.

-Ricky, déjame pasar - dije poniéndome nervioso

-Lo siento Carlos pero no vas - dijo el mirándome a los ojos

-¿Cómo? ¡Ricky quita de la puerta no te lo digo otra vez! - le grite histérico

Se resistía, le golpeé el pecho con la palma de mis manos, mientras le rogaba que me dejase pasar, pero fue inútil, después apreció Dylan...

-Carlos, es mejor que no vayas, por favor, no te conviene - dijo tranquilizándome

Le miré con cara de flipar, no daba crédito. Por que no me dejan ir al entierro... Parece que me quieren ocultar algo... ¿QUÉ COÑO ESTÁ PASANDO?