Al día siguiente a la salida de la empresa a Erika se le había quedado el auto...
Erika: Maldito coche!!! Arrancaaa!!!!
Alexis: Hola jefecita, que pasa?
Erika: Ay no! (poniendose las manos en la cara) lo que me faltaba.
Alexis: Puedo ayudarte?
Erika: Tu estas en todos lados, me están siguiendo o que?
Alexis: Soy algo así como tu Ángel de la guarda.
Erika: En vez de hablar tonterías porque no revisas el auto.
Alexis se puso a revisar el auto...
Erika: Ya apurate!!!
Alexis: Lamento decirte que hay que llevarlo a reparar.
Erika: Tu eres mecánico así que has algo.
Alexis: Si pero no puedo, no tengo las herramientas aquí, pero puedo llevarte y mandaremos a buscar tu auto.
Erika: Ni sueñes que me voy a subir a esa cosa.
Alexis: No tendré un super auto como tu pero por lo menos no me deja a pie como el tuyo, así que elije caminar o te llevo.
Erika: No me subiré a esa chatarra.
Alexis: Si claro, no quieres que vean a la gran Erika llegar en una chatarra como está, verdad? Pero como quieras, camina, bye jefecita y espero que no te salgan ampollas en los pies de caminar (burlándose).
Erika: Uuufff!!! Esta bien, llevame.
Alexis: Lo sabia, sube (abriendo la puerta de su auto).
Erika: Esto es horrible.
Alexis: Pero es lo que te llevará a tu casa.
Erika: Ya maneja y cállate!!
Alexis: A donde la llevo señora?
Erika: A mi depa, tu maneja que yo te voy guiando y rápido que no soporto está mugre.
Alexis: Vamos a hacer una apuesta, si mañana arreglo tu coche sales conmigo a comer.
Erika: Yo no voy a hacer apuestas y menos salir contigo.
Alexis: Ese arreglo puede demorar pero iré por el coche y para mañana lo tendré listo.
Erika: En serio?
Alexis: Lo juro.
Erika: Esta bien, acepto pero si no lo tienes mañana en la mañana no me vas a molestar más, okey?
Alexis: Acepto (sonriendo).
Pasaron 10 minutos...
Erika: Aquí es, espero que nadie me vea porque muero de la vergüenza.
Alexis: Este es tu departamento?
Erika: Si.
Alexis: Es muy grande (asombrado).
Erika: Bueno ya vete.
Alexis: Tienes miedo de que te vean conmigo? (abriendole la puerta del auto).
Erika: Por supuesto, y más te vale que no se lo digas a nadie.
Alexis: No me dirás gracias?
Erika se quedó callada...
Alexis: Tan fina y todo pero mal educada.
Erika: Claro que no lo soy y respetame, sigo siendo tu jefa recuerda.
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Aprendiendo a Amar
RomanceErika Marcelin de 39 años es una mujer muy hermosa de ojos verdes y pelo rubio, adinerada y dueña junto con su padre de una empresa automotriz muy conocida, ella es una mujer altanera, y cree que todo el mundo tiene que estar a sus pies. Por otra pa...