Negación luego aceptación.

Capítulo 12: Lo que sigue

Capítulo 12: Lo que sigue.

(POV Davis)

Vaya que ha sido largo de contar mi historia a Daphne, por su cara puedo notar que está sorprendida, la verdad que no esperaba escuchar toda la historia, bueno, si he de ser sincera, me he saltado algunas partes pero no son nada relevantes a lo que ella quiera saber, me da curiosidad sobre como tomará su situación con su pelirroja, la verdad es que desde que se pelearon ese día, algo había entre ellas, solo era cuestión de que se conocieran un poco más.

.- Bueno – Le digo a una sorprendida Daphne – Esa es mi historia.

.- No tenías que contarme toda la historia Davis – Dijo ya saliendo de su asombro – Lo que quería saber era sobre como lograron andar en secreto sin que les descubrieran, bueno, al fin y al cabo lo dijiste, pero me resulta un poco difícil hacerlo.

.- No sé porque temes que se sepa – Le digo alzando una ceja – Si bien, entiendo que algunos no podrían estar de acuerdo pero eso no va a importar demasiado, ¿es la postura de tus padres?

.- Mis padres es el menor de mis problemas Davis – Dijo Daphne agachando la cabeza – Mis padres probablemente no acepten mi relación con la pelirroja pero eso no me interesa ahora, tengo que decir que me preocupa un poco el hermano de la pelirroja, ya ha sido rechazado por tu querida Granger, el día que sepa que su hermana sale conmigo, no sé cómo se lo vaya a tomar.

Puedo entender su punto, ese pelirrojo Weasley, aun hoy en día no puede creer que mi castaña salga conmigo, hay veces que pienso que sigue en un estado de negación pero que se le va a hacer, es cierto que le puede afectar el hecho de que su hermana salga con Daphne pero tarde o temprano lo va a tener que aceptar.

.- Bueno – Le respondo finalmente – Creo que de eso no te tienes que preocuparte Daphne, ese pelirrojo no tiene por qué meterse en la vida privada de tu pelirroja, al fin y cabo, ustedes decidieron salir y ser pareja, la cuestión es, ¿harán público su relación?, la cosa es que tienen que estar cómodas de la una de la otra Daphne, si bien la situación puede ser difícil pero no imposible, admito que me costó salir con mi castaña pero al final, las cosas resultaron muy bien.

.- Puede que tengas razón Davis – Dijo Daphne mirándome a los ojos – De a poco se sabrá la relación, creo que la cuestión es, lidiar con eso, pero no tendremos problemas con eso.

.- Bueno – Dije levantándome de la silla, preparándome para irme a dormir – Ha sido una noche larga y parece que me lleve un buen rato, espero que con esto hayas disipado tus dudas Daphne, sé que las cosas resultarán bien, enfrentarán situaciones difíciles pero sé que lo lograrán.

Dicho eso, me fui dejándola atrás, me despedí de ella y ella se queda pensativa en el cuarto, yo estoy satisfecha de ayudarle, espero que su situación no sea tan complicada, yo sé que no, pero habrá que ver cómo se desarrolla.

(POV Daphne)

Realmente no esperaba escuchar toda su historia pero me ha dejado pensando, en como lograría que mi relación no tuviera un desliz, la cosa no será nada fácil, tengo que hablar con la pelirroja, no sirve de nada andar ocultando esta relación, mi preocupación en estos momentos es su hermano pelirrojo. Desde antes sabía que ese Weasley estaba enamorado de Granger, hubo acercamiento pero nada concreto hasta el final de la guerra que todos supieron de la relación de Davis con Granger.

Lo más probable es que su hermano no se lo tome tan bien, cosa normal, considerando que es su hermanita pero ella ya no es una chiquilla, ya no es una niña, ya creció y está conmigo, debería de hablar seriamente de ese asunto, tal vez no le haga demasiado gracia, no es que tenga algo contra el pelirrojo o que no me agrade, podría decir que me da igual pero desde la muerte de su hermano, le he tenido afecto, no precisamente de lástima pero si un afecto digamos nostálgico, el ver que ese pelirrojo ha cambiado y no para bien, varias veces le he visto deprimido sobre todo recorriendo el cuarto piso del castillo, ahí está un monumento de los Weasley, producto de la gran broma que hicieron en quinto año, el profesor Flitwick lo dejó ahí sin más con la excusa de que jamás vio una magia tan buena y tan bien hecha.