Era de noche, el ruso estaba en su hogar con todas las luces apagadas a excepción de una, su oficina. Estaba en el sofa con esa estúpida hoja. Pensando en el Alemán, en como ocurrió. Fue todo tan repentino que claramente no pudo entender que era ese revuelto en su cuerpo.
El de ushanka había llamado a su amigo Argentina, pues aprovecho que este estaba dando vueltas como turista en su territorio. Estaba desesperado por saber que dice esa nota, y quería charlar un rato con él.
[...]
Un toque en la puerta rebota por toda la casa, alarmando al hombre de chamarra con rayas azules.
Este baja a la primera planta y se dirige a la puerta principal. Saca el seguro y gira la perilla, pero primero enciende un interruptor que enciende las luces de la cocina, la sala y alguna esquina/columna. Al abrir la puerta se deja presenciar a un país con estatura casi alta, con franjas celestes y blanco, con un sol. Estaba vestido algo estilo gringo de vacaciones. Notó la presencia de alguien más. Vió un país más chico que el primero, tenía un atuendo peculiar, un cola de lagartija, tenía una estrella de parche. Lo reconoció pero no dijo nada.
-¡Argentina!, ¡amigo mio!... Cuánto tiempo. Noté a tu compañero. - al decir aquello, abrió paso para que accederán al hogar, dejando fascinados a ambos latinoamericanos.
-Sí, Rusia. Perdoná por no avisarte, veníamos de una cena y no lo quería dejar solo. ¿Como estás?, che, linda casa. - halago el argento muy alegre, agarrando la mano del chico tula.
-Bien, perdona por llamarte a estas horas. Necesitaba tu ayuda en algo, tenia otras opciones pero tu siempre eres la primera en estas ocasiones. - el ruso luego de eso dijo que les siguieran. Subieron las escaleras y se dirigían al pasillo, a una puerta abierta que era la habitación de la oficina. - la decoración es de mis hermanos. - sacó una risita dejando pasar a los sudamericanos
-No pasa naada amigo, todo por vos, te debo una a vos y a tu p-- b-bueno, para que me nesecitabas? - el argentino cambio de oración cuando recibió un pellizco de lo que parecía ser, su novio. Que inocente era ese argentino.
Rusia abrió un portapapeles buscando esa hoja, cuando la encuentra se la entrega al argento.
- Uhh... ¿Conoci' a Alemania? - habló e interrumpe el chico con estrella, había visto una foto colgando en la oficina que salía el alemán y el ruso, abrazados en un tobogán, obviamente de niños. Viejos recuerdos.
-Sí, era mi mejor amigo. ¿Algún problema? - cuando miró al menor de los presentes, no pudo evitar mirarlo con cara asesina. Provocando un gruñido y demostrando sus filosos dientes. Llamando la atención de ambos hijos españoles.
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asxsino sxelto
FanfictionAlemania, el país con un misterio enorme, una familia hecha para matar, bien entre- nado. ¿En que usaria esa ventaja? Claro, en un ruso. Alemania al igual que este sovietico, se pierden en los ojos contrarios, y los dos, luchan con un...