达莫 ┊ ❝ Una relación bajo el ojo público siendo un artista internacional nunca es fácil, menos con un contrato.
Menos cuando es una relación homosexual.
Menos cuando es con tu propio fan.
Menos cuando es con una menor de edad.
Y mucho menos cuando...
Esto es sólo una adaptación, todos los créditos a su respectiva autora (@Bridtney)
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04:23 a.m.
La carretera era pacífica, no había tema de conversación alguno en el auto, la noche se sentía sofocada. Seguro se acercaba otra tormenta o peor aún, un huracán.
— ¿Qué estabas haciendo con ella, Dahyunie? —Maldita sea, Chaeyoung, déjame en paz.
— Nada. ¿Y Jaebum?
— Dahyun...
— ¿Y Jaebum? —Dije esta vez un poco más duro.
— Se quedó dormido en una hoja de palmera. —Qué idiota... Por alguna razón me causó gracia y reí. Chaeyoung también lo hizo. Gracias a eso la tensión parecía disminuir. Momo y sus amigas se habían ido por su parte, también la prima de Chaeyoung se fue con ellas. Al parecer se conocían.
— Dahyunie... —Oh, demonios.
— Chaeyoung, no ahora, por favor. —Ella frenó el auto.
— Dahyun, sólo estoy preocupada por ti... —Suspiré con pesadez, ella tenía razón. Esta pequeña semana había estado muy loca. Estaba haciendo las cosas mal.
— Lo siento, Chaeng... Solo, ¿podríamos hablarlo otro día? —Ella acarició mi brazo y sonrió, le dediqué una sonrisa también y arrancó el auto de nuevo. Buscamos algo de comida rápida, comíamos en el camino, bueno, yo era la que comía y la alimentaba, hasta que por fin llegamos a la residencia de Jaebum.
— Gracias por traerme, pitufina.
— Gracias por invitarme, talco con patas. —Sonreí ante el apodo y busqué en mi bolsa las llaves.
Las malditas llaves.
— ¿Sucede algo?
— ¡Yo no tengo las llaves, las tiene Jaebum, mierda!
— Hey tranquila. Puedes venir conmigo.
— ¿De verdad?
— Claro, estoy quedándome con mi tía. La madre de Jihyo, te caerán bien, son todos muy amables.
— Vale. Muchas gracias, Chae. —Sonreí con agradecimiento. Chaeyoung era la mejor amiga del mundo.
Entramos de puntillas a la casa, según ella la reñirían mañana por no haber regresado con Jihyo a tiempo, y peor porque ella ni siquiera la había traído. Subimos a la habitación de invitados y esperaba con todo mi corazón que hubieran dos camas separadas, lo cual no pasó.
Los ronquidos de Chae estaban volviéndome loca, no me dejaban dormir.
Me puse a pensar.
Jaebum, la presentaci... DIABLOS LA PRESENTACIÓN. Mi concierto sería la semana que viene y mis ensayos comenzaban mañana... O sea, en unas horas, y yo no había dormido nada.
