Sweet Creature

Ocho semanas

Había cumplido las ocho semanas de embarazo, se encontraban realizando la ecografía en su cita médica con el doctor Benjamin.

Este último les sonrió y asintió.

— Todo está en perfectas condiciones.— le entrego a Gulf unas toallas para limpiar el frío gel del abdomen del omega.

Los tres después de terminar la ecografía tomaron asiento, la pareja esperando saber del como se encontraba su cachorro creciendo cada día más.

— Todo perfecto. — expreso — Ahora vendrá la parte que muchos omegas detestan, más náuseas vendrán. Algunos omegas cuentan con la suerte de que no presentan este síntoma, no te asustes es normal. También vendrá el cansancio o el aumento del tamaño de la cintura y quizás se podrían hinchar tus pies.

Gulf asintió mientras Benjamin le entregaba nuevo medicamento, y la tarjeta donde marcaban cada mes.

— Gracias.— dijo la pareja antes de retirarse de la habitación del obstetra.

— Nos vemos pronto.

Salieron del hospital juntos tomados de la mano, ambos sintiendo la felicidad del otro a través del lazo.

— ¿Deseas ir algún lugar, mí omega.?— le preguntó abriendo la puerta del auto para que subiera Gulf.

— Es temprano pero hace mucho que no como un helado.— dijo sonrojandose y sonriendo sin despegar sus labios, el alfa asintió cerrando la puerta del carro, para después subir el del lado del conductor.

— ¿De cuál heladería?— preguntó acariciando la mejilla de Gulf y este se recargó en el toque.

— No importa cual sea, sólo quiero un helado.— respondió con sus ojos cerrados.

— Está bien pero no re duermas ahora, Bii.— dijo riendo y el omega se alejó de su toque.

— Es tu culpa.

—¿Mi culpa?— dijo emprendiendo caminó el alfa.

— Si...— hizo un puchero el omega.— Pero no importa, amo tus caricias.

— Y yo te amo a tí.

— ¡Mew!— exclamó riendo.— Sólo llévame por mi helado y luego regresamos a casa.

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