Capítulo 1

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Mikasa.

Me coloque el gafete, acomodé un poco mi cabello, ya era casi la hora de que entrara a mi nuevo trabajo, mi amiga Sasha me consiguió trabajo como guía de una banda que a ambas nos gusta, fue extraña la manera en la que lo consiguió, según su versión, un tanto desequilibrada, no pudo conseguir los boletos, pero consiguió el trabajo por parte de su novio quien manejaba la gira por nuestro país, los boletos se acabaron en un dos por tres, pero necesitaban a alguien que les enseñara y les diera un pequeño paseo antes un día antes del concierto, después de sus ensayos. "The Four Traitors" era una banda de metal alternativo, Bertholdt Hoover por líder y guitarrista, Reiner Braun por guitarra rítmica, Ymir era la baterista y por último a Annie Leonhardt siendo esta la vocalista.

Era una banda espectacular, sus sonidos tan potentes y enérgicos, te transmitían todo con sus letras y sus melodías, no era una banda tan famosa que llenara un estadio de futbol, pero aun así llenaban teatros pequeños o medianos, uno pensaría que nadie los conoce, se puede estar equivocado al decir que no tienen fans, pero solo las dos funciones que darán en mi ciudad son ahora sold out.

-Sasha, apúrate que no quiero llegar tarde. – Suspire y me recargue en el marco de la puerta principal.

-Un segundo, no encuentro mi delineador negro. – Gritó desde el baño. – Solo me delineo los ojos y salimos rápido. –

Rodé los ojos y resoplé bastante fuerte, odiaba con el alma llegar tarde, por insistencia de mi primo aprendí que eso habla de tu persona y que tan comprometido estas con tus responsabilidades. Además a ella le iba de perlas pues no tenía que trabajar, como tal solo estaría pegada con su novio checando todo el escenario, e incluso a la hora del show le tocará estar en la primera fila, mientras que yo lo estaré disfrutando en una pequeña pantalla que se encuentra en un cuarto del teatro esperándolos, siendo realista me tocaba la peor parte.

Tomé las llaves de mi carro y mi celular, la esperaría en él, al salir de la casa no pude evitar sonreír, conocer aun de las tantas bandas que amaba lo era todo, a pesar de que no pudiera disfrutar de todo el concierto, entré al carro y pegue mi cabeza con el volante, no pasaron ni más de 5 minutos cuando Sasha salió de la casa corriendo, ya maquillada para la ocasión, sin esperar más puse a andar el coche, teníamos que llegar al aeropuerto pues ahí estaría Nicolo.

-Me siento tan nerviosa y tan feliz. – Sasha pataleo y agitó sus manos por la emoción. – Mikasa, de solo pensarlo quiero llorar. –

-Hazlo ahora y no enfrente de ellos, nos daría mucha pena decir que vienes con nosotros. – Alcé los hombros. – Podrás ser reconocida como la fan obsesionada de aquí. –

-No sería capaz de hacerlo en frente de ellos, tampoco de llegar a tal grado. – Ante sus palabras me le quedé viendo muy fijo. – Bueno, tal vez si lo podría hacer, pero con ellos no, tengo la oportunidad de hablarles, es la mejor oportunidad que Nicolo me ha brindado. –

-Podrías no comer pan enfrente de los pobres. – Dije un poco divertida.

-No, ahora no estoy comiendo. – Contestó tan ingenua, ante eso sonreí.

-No me refería a eso, lo que quise decir es que me deslumbras con tu bonita relación. – Solté una ligera carcajada. – Estando serias, es lindo que él aprovechara su trabajo para hacerte este lindo detalle. –

-Lo sé, es maravilloso, no sabes cuánto le quiero. – Ella sonrío tan enamorada, sin mentir o exagerar, el brillo de sus ojos resplandeció más, lo que siempre pasa cuando habla de él.

-Me hago una idea. –

-Es tan bonito cuando tienes a alguien a quien entregarle muchos trozos de ti – Ella giró su mirada a la carretera, yo por mi parte sujete más fuerte el volante. – Aun siento que tú y él se dejaran, ustedes debieron seguir para largo. –

This Song Saved My LifeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora