Tomó asiento en el borde de su cama y observó al Alfa dormido en ella, cubierto con una delgada cobija para que no pasará frío por la noche pero no se sintiera asfixiado debido a la fiebre que apenas había disminuido. ¿Por qué su rostro parecía tan pacífico siendo que su interior era todo un caos?Aún no había sido capaz de salir de su estado de inconsciencia inducido por la desestabilización emocional y eso le preocupaba. Luego de que JungKook se desvaneciera en sus brazos, inmediatamente llamaron a una ambulancia y lo llevaron a emergencias, se despertó solo un momento mientras estaba siendo atendido, pero sus ojos rojos le hicieron saber que era dominado por su parte lobuna y tuvo que usar su voz de mando en él con la esperanza de que se calmara para dejar al doctor trabajar.
Le dolía el pecho al recordar los ojos llorosos del Alfa rogando por ayuda silenciosamente tras la furia que demostraba en sus iris bañados de rojo sangre. De todos modos, no pudieron hacer mucho más que darle unos calmantes bastante fuertes y enviarlo a casa, porque la medicina no podía hacer nada contra un lazo roto por una muerte prematura del Omega.
La cultura popular se encargó de poner a los Omegas como los que más sufrían tras la pérdida de su Alfa, pero mientras ellos tenían la posibilidad de vivir si tenían un cachorro al que aferrarse, un Alfa no podía vivir sin su Omega. Si, tenían la posibilidad de marcar a otro, pero si realmente amabas al Omega en lo que menos pensarías sería en marcar a otro ser para preservar tu miserable vida. A menudo, los Alfas se perdían tanto a si mismos que terminaban de la peor manera.
Sabía que a JungKook no le quedaría mucho tiempo de vida si seguía de esa manera, dejándose hundir en su profunda tristeza por la muerte desafortunada de su pareja. Formó una mueca en sus labios y dejó una efímera caricia para alejar los largos cabellos negros que tapaban el pálido rostro de belleza etérea, sus ojos inevitablemente fueron atraídos por lo rojizo de sus labios, el superior siendo más fino que el inferior y un encantador lunar bajo el.
Nunca se permitiría aceptar que deseo besarlo, descubrir el dulce sabor de aquellos belfos y comprobar si eran tan suaves como parecían serlo a la vista, no podía sentirse así por un Alfa y mucho menos por aquel que consideraba su amigo.
Se levantó y abandonó la habitación intentando hacer el menor ruido posible para no perturbar el sueño del hermoso Alfa, su mente ocupada en aquellas visualizaciones impuras de lo imposible e inalcanzable, procurando calmar el agitado latido de su corazón.
Tuvo que ahogar un grito con su mano de la sorpresa que se llevó al encontrarse con Kim TaeHyung frente a él, el beta lo observaba con cejas fruncidas y rostro serio, sus ojos inyectados en sangre delatando que estuvo llorando. Quizás, por la misma razón que JiMin tenía motivos para sentirse triste.
Ninguno dijo ni una sola palabra hasta que se encontraban sentados en su sala, con tazas de café en mano y dispuestos a pasar toda la noche despiertos para tener controlado el estado del pelinegro que descansaba en su habitación.
— Me sorprendió que JungKook fuera tu hermano, nunca me mencionaste nada sobre él —decidió romper el inusual e incómodo silencio que se había formado entre ellos, porque TaeHyung no estaba de buen ánimo después de presenciar a su hermano pasarla tan mal.
Fue un hecho bastante inesperado para Kim el reconocer al joven que sufría una crisis entre el público como JungKook, uniendo cabos en su cabeza bastante rápido pero no lo suficiente para llegar a tiempo a su lado. En cuanto pudo atravesar la cantidad de gente que se arremolinaba a su alrededor, JiMin ya sostenía a un Alfa desmayado y llamaba por teléfono al número de emergencia.
— El fue adoptado y cuando mis padres se separaron fue a vivir junto a nuestro padre —se encogió de hombros queriendo restarle importancia al asunto, siendo obvio para JiMin que el divorcio de sus padres aún era un tema que le incomodaba tratar aún si ya había pasado bastante tiempo desde ello. — A mí me sorprendió más que fuera la persona de la que tanto me haz hablado últimamente. Dime Park, ¿cuáles son tus intenciones con mí hermano? ¿¡Intentas aprovecharte de él por qué está vulnerable!?
Sus hombros estaban tensos y sus manos tomaban con demasiada fuerza la taza con el humeante café negro dentro, la porcelana amenazando con romperse si ejercía más presión. Aquella mirada era tan sombría como nunca se la dirigió antes.
— ¿¡De qué estás hablando, TaeHyung!? —la insinuación lo había alterado en demasía. Sin embargo, más le molestó que sacará a relucir la debilidad del otro como si él dejará de ser un Alfa solo porque estuviera pasando por un mal momento en su vida. No entendía porque razón sentía la ferviente necesidad de defender el orgullo del otro, como si fuera a él al que estuvieran hiriendo directamente — Es mí amigo ¡quiero ayudarlo a superar esto! —ni siquiera notó cuando se había levantado del sofá, olvidando su propia taza sobre la mesa ratona frente a su sofá y ahora encontrandose frente a frente con su mejor amigo.
— ¿A qué costo? JiMin, temo por ustedes —su voz se rompió a media oración, las lágrimas deslizándose por sus mejillas pese a que su mirada no dejaba de ser firme y molesta — Temo que esto evolucione porque se lo fácil que caes por alguien cuando te interesa lo suficiente —pronto secó sus lágrimas con brusquedad — No quiero que te enamores porque a JungKook no le queda tiempo...
— ¿Acaso escuchas lo qué estás diciendo? —apretó su mandíbula e intentó contener sus repentinas ganas de golpearlo. La furia burbujeante ante la mención de un destino trágico escrito para el otro Alfa — Él saldrá de esta, te lo aseguro.
— ¡Maldición! esto no es como lo que te sucedió con SeulGi, tú no tenías un lazo con ella como lo tenía JungKook con su Omega —se dió media vuelta y emprendió un camino lejos de él, tratando de ignorar todo lo que estaba diciendo a su espalda — JiMin ¡él no va a salvarse de un lazo roto si no marca a otro Omega y sabes que no lo hará!
— Cuidaré de él por una hora, puedes dormir en el sofá si quieres —con aquello dicho, abrió la puerta de su habitación y la cerró a su espalda, dándole un último vistazo a su mejor amigo.
Suspiró sonoramente una vez ahí, llevando una mano a su frente para apretar sus sienes por el dolor palpitante de cabeza que le había provocado. Era la primera vez que había tenido una pelea de este tipo con su mejor amigo, no sabía porque había reaccionado de esa forma y porque no estaba allí afuera brindándole su apoyo a TaeHyung como era usual que lo hiciera.
Oyó un ligero movimiento y abrió sus ojos —los cuales no supo cuando cerró— para enfocarlos en la persona sentada en la cama, su mirada somnolienta puesta sobre él.
— JiMin... —el tono ronco le puso la piel de gallina y su Lobo aulló sin razón alguna.
Rogó a la Luna porque él no hubiera escuchado su "conversación" a gritos en la sala.
— JungKookie —le regaló una sonrisa sincera a la que no le puso esfuerzo y recorrió los pocos pasos que los separaban de estar uno al lado del otro.
Se sentó a su lado y JungKook recostó su cabeza en su hombro de inmediato, su respiración siendo pausada y su cuerpo irradiando calor aunque la fiebre ya no estuviera allí. Los bonitos cabellos negros haciéndole cosquillas cuando rozaban con su cuello descubierto apenas.
— Solo quédate así, por favor —no dijo nada al respecto y se limitó a asentir, acatando el pedido, manteniéndose quieto sin decir ni una sola palabra.
Si se concentraba lo suficiente, podía oír a su corazón latir con la misma intensidad que hacía unos minutos y a su Lobo moviendo la cola cuán cachorro. Tal vez si no lo negará, también hubiera notado que JungKook estaba igual de afectado que él por aquellos sentimientos que no debían ser entre dos Alfas.
El susurro silencioso de sus lobos sonando al unísono al encontrarse.
"Mío, nuestro Alfa"
__________________________
¿Qué les pareció el capítulo? 👀
Estaré actualizando esto en cuanto tenga tiempo libre.
¿Vieron la portada? la hice yo y idk, siento que podría haberlo hecho mejor.
Nos leemos dulzuras. 💕
— AmargoCoffe.

ESTÁS LEYENDO
Cafuné | JiKookmin
Fanfiction[ C l i c k ] JungKook es un Alfa joven que perdió a su Omega y sufre las consecuencias de ello. JiMin es un Alfa también y conoce a JungKook como una mera casualidad, aquella noche de viento fresco y luna llena. Un click instantáne...