FUBUKI ━━ inazuma eleven

0 2 ¦ m i r a d a s

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drabble
(N/H) = Nombre de tu
hermana, sino tienes, añade
uno cualquiera.

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  Admitías que cada vez que pensabas en el amor las películas románticas atacaban tú mente, puesto que siempre te daban las expectativas altas de tener un amorío tan puro y bello. No las culpabas, ya que eran mucho más interesantes, que las pequeñas historias de amor que te relataban tus amigas.

  A decir verdad no pensabas como es que un amor podría surgir cuando estas en el centro comercial, observaste de reojo a tu hermana menor, quien observaba con interés las galletas de los estantes.

— ¿Y si llevas estás?— alzó unas galletas de chocolate, al instante negaste.

— Mamá dijo que nada de galletas— respondiste con una ceja alzada, mientras aún seguias avanzando junto con el carrito de compras, al instante ella solo generaba una pequeña mueca.

— Pero...

— Nada de galletas (N/H)— después de que le dieras una mirada firme, sentiste como es que el carrito te golpeo un poco el abdomen.

  Tu carrito accidentalmente había chocado con otro, ya que no le habías apartado la mirada a tu hermana. Después de varios segundos observaste a la persona que se encontraba frente a tí, quien de igual manera te había observado.

  Sus orbes eran de azul obscuro, eran realmente expresivos y poseían cierto brillo en él. Era un chico y se veía de tu misma edad, tenía los cabellos levantados de color albino. De pronto habías sentido que te habías quedado sin cerebro trás verlo firmemente, al instante dejaste de observarlo tan fijamente, tus mejilla habían tomado un color carmesí decido a la vergüenza.

— Lo lamento, de verdad no te vi— formuló el adivino, su voz era algo ronca y suave a la vez.

— No te preocupes— observaste de reojo a tu hermana, a pesar de tener nueve años siempre era escurridiza.

  La encontraste a tu lado, observando también al joven que se encontraba frente a ambas.

— ¿Te hiciste daño?— cuestionó algo preocupado.

— No lo estoy, no te preocupes— formulaste con una media sonrisa, causando que él sonrió era por inercia.

— ¿Cuál es tu nombre?— inquirió con curiosidad.

— (T/N) y ¿El tuyo?— debías admitir que estabas algo nerviosa, ante su presencia.

— Fubuki Shiro, es un gusto— formuló con una sonrisa.

  Dirigiste el carrito de compras hacia aún lado, ya que ambos estaban frente a frente. Era atractivo y eso no lo negabas, pero tu eras demasiado tímida.

— Igualmente.

  Este te observó a caminar hacia el lado contrario que él, a decir verdad la parecía tener interesante a primera vista, quería conocerte un más, a decir verdad era una lastima ya que estaba decido a seguir una conversación más extensa.

— Aquí está la mayonesa— formuló alguien acercándose a el de cabellos albinos, quien no ejerció ninguna acción ante su presencia—. ¿Me estás escuchando Shiro?

— Ah, sí, claro— observó a su hermano menor con una sonrisa.

— ¿Qué sucede?— cuestionó Atsuya al mayor, algo confundido por su rostro.

— Nada.

  Mientras que tú, solamente esperabas verlo de nuevo en el centro comercial.