Restart (LP / Laura Pergolizzi)

El Fin.

***Bar***

Al volver de Roma Victor vino a pasar unos días a Los Ángeles estuvo dos semanas y luego regresó con su esposa. Quién sabe que cosa se traía con Laura que estaban raros pero en general se llevan muy bien, Laura a vuelto a trabajar millones y yo ya estoy considerando retomar los escenarios así que estoy en reuniones con mi hermana que era la que ayudaba con mis contrartos pero aún no tengo nada claro, llevo días y días esforzándome en ideas para nuevos proyectos y eso me ha hecho estar todo el día pegada a la computadora, ahora las cosas se están poniendo como antes, ninguna tiene mucho tiempo para la otra porque cada una tiene su trabajo y yo para desestresarme volví con mis salidas nocturnas con Leonora, Mika, y algunos otros amigos, eso parece volver aun más loca a Laura pero esta vez no se quedó de brazos cruzados, me está pagando con la misma moneda y ahora soy yo la que no la encuentro nunca en casa, pero no pienso caer en su juego e ignoro por completo sus intentos de darme celos lo que ella interpreta como que ya no me importa lo nuestro pff...

- oh! Estás aquí -dice ella apenas entrar al departamento-

- si, tengo hambre

- nena, voy llegando!

- solo te estoy esperando

- tú llevas todo el día aquí, no pudiste prepararte algo? -me dice un poco irritada-

- pero quería que llegaras para comer juntas

- bueno, ya llegué ¿qué vamos a comer? -Dice rodando los ojos-

- no lo sé, por eso te estoy esperando

- no, tú no me esperas para comer juntas, me esperas porque no hay nada qué comer

-por supuesto que no! Te espero porque quiero estar contigo, si no ya habría salido a comprar algo.

- pues no deberías, sabes que que no puedes pasar tantas horas sin comer -ahora sí ya me enfadó y ruedo yo los ojos- no te mal pases yo ni siquiera tengo hambre.

- ya

- hey! Yo no tengo la culpa de que lleves todo el día sin comer y te pongas de mal humor

- está bien, solo olvídalo -doy media vuelta y entro a la habitación para tirarme en la cama y ella se queda en el marco de la puerta-

- no hagas esto

- ¿Qué cosa?

- pues solo enojarte y ya, necesitas comer algo

- ya déjalo, ya no tengo hambre.

- Bárbara! No seas inmadura, por Dios!

       Odio que diga eso así que me levanto buscando mis cosas y salgo del departamento azotando la puerta, solo necesito respirar y quizá sí, comer algo... Se que con esto solo voy a hacer que se moleste más pero ya qué importa?
     Luego de dar una vuelta por las calles principales decido ir a comer unos hot dogs con papas fritas, se siente raro estar sola en el fast food pero me entretengo revisando mis redes, luego de permanecer ahí un buen rato creo que es hora de volver para ver  qué sucede, definitivamente fue una mala idea, ella está que se la lleva el Diablo y no sé si es por mi culpa.

- hola cariño! - le digo como si nada pero me asesina con la mirada- ¿ocurre algo? ¿Estás enojada?

- Bárbara no quiero verte ahora!

- no digas tonterías! Lo de hace rato fue un estupidez -trato de abrazarla pero se quita mis brazos de encima, Dios, sí que está enojada-

- no es sólo lo de hace rato, es lo de siempre! Siempre es lo mismo, te comportas así, haces tus berrinches monumentales, peleamos ¿y después vienes como si nada a jugar?

- pues tú acostumbraste a que fuera así! Nunca te ha gustado hablar cuando te enojas, sólo lo dejas pasar

- quieres hablar eh? Pues entonces hablemos! Hablemos de el desinterés que tienes en todo  actúas como si nada te importara, jamás me preguntas como me fue o como me siento respecto a todas estas peleas, solo te importas tú! Eres egoísta y yo siempre soy la que tiene que buscarte y arreglar las cosas. ¿Qué carajo haces aquí si ya no te importa lo que hago?!

   Y entonces se me parte el corazón.

- no digas eso, claro que me importas -le digo con un sentimiento de tristeza-

- y porqué parece lo contrario? Tú siempre te has justificado con que confias en mí y que somos personas libres y no sé qué más, lo siento cariño pero no pensamos igual, a mi sí me importa todo lo que tú haces, a dónde vas y con quién sales, pero en cuanto te pregunto cualquier cosa te enojas y piensas que desconfío de ti, y contigo es todo lo contrario, hay un completo desinterés de tu parte en todo! En mi, en la relación, hasta en el puto perro! ¿Si somos tan jodidamente diferentes qué haces aquí?

      No puedo controlar las lágrimas que ahora recorren mi rostro

- tú... así piensas ¿eh? Pues está vez te voy a dar la razón, no sé qué hago aquí.

     Saco una maleta y empiezo a guardar toda mi ropa de los cajones y del clóset, tal como la saco la voy guardando y ella de momento no reacciona, yo también estoy cansada de estas peleas y está vez es en serio, ella se agarra el tabique de la nariz seguramente pensando que es un drama mío.

- ¿qué haces? -me dice tallandose la cara, yo no le contesto y sigo guardando todo lo que puedo y sigo llorando pero esta vez de enojo- Bárbara... ¿Ves lo que digo? Deja de ser tan infantil

- ¿dónde está mi pasaporte y mis identificaciones?

-... ... ¿Así piensas arreglar las cosas? ¿Lléndote? Pues quiero decirte algo, esta es tú decisión, y yo nunca voy a tratar de detener nada de lo que quieras hacer!... Pero no me hubiera gustado terminar así.

- mi pasaporte 

- está en mi primer cajón, debajo del tapiz -lo busco y agarro mis cosas y mis llaves-

- después vengo por lo que falta...

  Bajo con el maletón y sin siquiera buscar a Elvis porque sé que por él me quedaría, me subo a mi auto y manejo como loca hasta mi departamento, llego y entro, se siente tan frío, me tiro en el sillón con la mente y la mirada perdida, qué mierda hice?!!!

***Laura***

La cagué, la cagué monumental, no una, dos veces, la primera cuestionándole qué hacía aquí

Y la segunda no deteniéndola... Pero ¿es en serio? Se fue para siempre? ¿De verdad se acabó?

Anoche me dejó, nos dejó a Elvis  y a mi, era mentira lo que dije, ella sí se interesa en él, lo ama con locura pero estaba enojada y se lo dije sin pensar pero aún así ya está hecho, ella se fue y tal vez eso solo reafirma lo que ya sospechaba, esto ya se había terminado mucho antes, ¿pero entonces por qué me duele tanto? Tengo la respuesta. Porque ella fue quien dejó de amarme, yo no. 
      Salgo a la sala, por la noche bebí hasta que no pude mas, la cocina está hecha un desastre, platos y vasos rotos por todos lados pero aún no tengo ganas de recoger, en realidad no tengo ganas de nada más que de ir a buscarla pero esta vez no voy a hacerlo la voy a dejar en paz y sí ella quiere se aparecerá, de todos modos dijo que volvería por el resto de sus cosas o quizá no, tal vez este fue definitivamente el fin y no vuelva a verla jamás.

Que? Creyeron que ya las iba a casar? Jajajaja pues noooooooo quise subir este capítulo hoy aunque ya había actualizado pero es que como ya mencioné es uno de mis favoritos.
    Ahora veré si continúo subiendo o hago una pausa en lo que organizo los siguientes capítulos.