Restart (LP / Laura Pergolizzi)

primera cita

Me siento súper nerviosa y ansiosa, son las 4 de la tarde y ya llevo un buen rato revolviendo el clóset sin saber que ponerme, debería comprar ropa? No! Ya tengo mucha, ni modo, decido ser yo misma, saco unos jeans y una playera rosa cualquiera, odio usar maquillaje así que lo de siempre, rímel y tinta, incluso me parece demasiado, me hago dos trenzas y ya está, me voy corriendo, espero no hacerla esperar, de camino me pongo más nerviosa y pienso en mil posibilidades, todas negativas, que si ella no va, que si llego tarde y se va, que si no le toma tanta importancia como yo, que sí lo olvidó, etcétera. Por fin llego son las 6:01 ahí está ella sentada le llego por detrás y me atrevo a taparle los ojos, se ríe y me jala del brazo para darme un beso en la boca!!! Nos separamos, me ve bien y me silva, yo como buena idiota me sonrojo.

- siéntate, te ves hermosa -me dice y nuevamente su sonrisa me desarma-

- tú también te ves hermosa

- cómo estás?

- bien, te extrañé -¿qué? ¿Yo estoy diciendo eso? No puede ser! Qué me ha hecho esta mujer!? Ella se ríe hermosa-

- no tanto como yo, te traje algo - por primera vez se sonroja un poco y busca en su chaqueta, saca una cajita de acetato transparente con tres chocolates de figuritas, son un ovni, un alien y un planeta-

-wow! Están hermosos! No te hubieras molestado, yo no te traje nada

- no importa, es solo un pequeño detalle, -llega el mesero con su libretita- ¿qué quieres tomar?

-un frappé de avellana con crema batida de malvaviscos

- yo quiero un frappé de Mocca también con crema batida por favor - el mesero se va por nuestras bebidas- no sabía si ibas a aceptar una cita conmigo

- yo ni siquiera sabía si ibas a llamar.

- ¿cómo piensas que no?! Pero no importa, lo que importa es que aquí estamos.

Tomamos los frappes y platicamos un rato y yo me siento tonta, soy toda risitas pero maldita sea, es su culpa por hacerme reír tanto, luego del café el cual por cierto no me dejó pagar, fuimos a caminar al parque de enfrente y luego se nos fue la tarde entera, y comenzó a hacer frío

- rayos, no trajimos suéter, creo que mejor te voy a dejar a tu casa, no quiero que te resfries por mi culpa

Salimos de ahí en su automóvil y condujo hasta mi departamento pero en verdad no quiero que se vaya.

-hace mucho frío, quieres pasar a tomar un café caliente? -le digo para retenerla un rato más-

- seguro! -entramos y ahora ella es quien admira mi hogar- Está bonito tu departamento, me lo imaginaba más pequeño.

- lo que pasa es que hace un tiempo viví aquí con mi hermano, cada quien tenía su habitación y hay una más de invitados, pero ahora solo ocupo la mía, la de mi hermano está cerrada y la otra la ocupa algún amigo cuando se queda, así que si quieres quedarte hoy puedes hacerlo -digo encogiendo los hombros-

- preferiría dormir contigo,

-si, yo también lo preferiría

Y tan rápido como todo está sucediendo de pronto ya la tengo tomándome por la cintura y besandome, yo la abrazo por la espalda aferrando su cuerpo al mío, nos echamos un manoseo en la barra de la cocina, no fue tan intenso como lo de la noche anterior pero puedo conformarme con eso por hoy, luego tomamos el café, pero ya no era necesario que estuviera tan caliente.

- no quisiera irme, pero tengo que hacerlo

- pensé que sí te quedarías

- no me hagas ese puchero, no lo resisto ¿nos vemos el sábado?

-por supuesto, pero déjame invitar esta vez

- ya veremos -vuelve a besarme y sé va-

Después de asimilar todo lo que pasó en la cita de hoy corro al teléfono como buena chismosa a platicarle todo a mi amigo y él está que no puede de la emoción, solo me queda a esperar ansiosa el sábado pero sé que se me va a hacer eterno-