...ᘛ⁐̤ᕐᐷ25

375 41 0
                                    

(Narra Tao )

Había llegado el día y me encontraba emocionado. Puse una alarma en mi nuevo celular y me levanté temprano para preparar a mis hermanos. Tenía curiosidad de qué trataba esa obra, puesto que ellos no me contaron nada. Los levanté y los bañé rápidamente para peinarlos y ayudarlos a vestir su uniforme. Quería que ellos fueran el centro de atención.

— ¿Y de qué trata la obra, eh? –pregunté.

— No podemos decirte.

— ¿Por qué no?

— Es una solplesa –sonrió mi hermana.

— Está bien… Échenle ganas, ¿sí?

— ¡Sí!

— Mis niños –les acaricié sus mejillas–. Ah, Xia.

— ¿Mm?

— ¿Puedo preguntarte algo?

— Sí.

— ¿Quieres… a Kris?

— ¡Sí!

— ¿P-por qué?

— Es bueno conmigo.

— ¿Sólo por eso?

— Yo quielo que ustedes estén juntos –sonrió.

— ¿Q-qué?

— Kris te quiele, helmano.

— ¿Cómo sabes eso?

— Mmm… No sé, jeje…

— ¿Y qué hay del tío Sehun?

— También lo quielo, pelo no tanto como a Kris.

— Ya veo…

— Oye, helmano.

— ¿Sí?

— No pieldas contla su plimo –apretó su mano en un puño y lo levantó.

— Jaja, no lo haré.

— Voy a desayunal.

— Sí, ve.

Mi hermana salió de la habitación y ni siquiera me había dado cuenta en qué momento Shaoran también lo había hecho. Simplemente no podía creer lo que ella me acababa de decir… Era difícil creer que en tan poco tiempo estuviera tan cercana con Kris… ¿Le habrá dado algo a cambio de que diga eso? ¿Dulces? ¿Juguetes? No lo sabía y me moría por saber. Al salir del cuarto me encontré con Kris, vestido ahora con un traje negro y camisa negra, así como una corbata color gris. Inconscientemente mi boca se abrió.

— ¿Qué te sucede? –preguntó.

— N-nada… No pensé que irías tan formal…

— Pensé que harías lo mismo.

— ¿E-estás criticando mi ropa?

— Por supuesto que no. ¿No deberías estar desayunando?

— S-sí. ¿Y tú?

— Esperaré a Luhan.

Diciendo eso, pasó al lado de mí y escuché cómo iba bajando las escaleras. ¿Por qué? ¿Por qué me afectaba tanto que “Luhan” saliera de su boca? Si él había dicho que no eran más que primos, ¿por qué sigo teniendo esa incertidumbre? Con un poco de duda, bajé y vi que Luhan ya había llegado. Mis ojos me estaban engañando… Luhan conversaba con mis hermanos…

— Eres muy linda, ¿cómo te llamas?

— Xia Jun.

— Bonito nombre, lindura –le agarró la mejilla – ¿Y el tuyo?

For you I knew the love and the meaning of protecting others.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora