Change Me ®

Capítulo 9: A punto de...

Capítulo 9: A punto de...
(Dedicado a paola1513: ¡Te quiero, Pauis!)

Al llegar al café, me sorprendí al ver una multitud de personas afuera, esperando a que abrieran. Cuando metí la llave en la cerradura y empujé las puertas, todos se precipitaron al interior.
-¿Por qué hay tanta gente?-le pregunté a Antea.
-Porque hoy es día de promoción. Hay 2x1 en cafés y tés.-contestó.
-Bueno,-regresé con Lex.-al parecer hoy estaré muy ocupada, así que mejor vete.-sacudí mi mano para que se fuera.
-No, me gusta verte estresarte con toda la gente.-sonrió a lo que yo rodé los ojos.
Me puse el delantal y me posicioné detrás del mostrador.
-Largo, Lexinton.-mascullé mientras atendía a una mujer.
Ignoró mis palabras y se sentó en la barra, observándome.
Mientras tanto, anotaba pedidos, escribía nombres en los vasos e imprimía tickets que entregaba junto con el cambio.
-Tu café estará listo en cinco minutos.-repetí por milésima vez con una sonrisa forzada.
¡Dios, cómo odiaba los días de promoción! Y más si llovía y hacía frío.
La gente entraba con sus zapatos, impermeables y paraguas mojados y empapaban el suelo. Bueno, al menos no me tocaba hacer el trabajo de Macy. La pobre chica estaba encargada de pasar el trapeador para secar el suelo empapado. En su cara se veía el fastidio y la desesperación por tener que limpiar la entrada de nuevo.
-Muchas gracias por su compra. Su café... ¡Lexinton!-le arrojé un bolígrafo a la cabeza por haberme lanzado un beso y miré de nuevo a las chicas frente a mí.-Su café estará listo en cinco minutos.
Las tres se alejaron soltando risitas, no sin antes mirar coquetamente a Lex.
Dios, mátame por favor.

~.~

-Madre santa, estoy tan cansada que podría dormir de corrido todo un año.-me quejé mientras salíamos del café con los impermeables puestos.
Maldita lluvia.
-No, no puedes porque hoy iremos a Black Rabbit a estrenar los nuevos equipos que llegaron ayer.-contestó el rubio mientras leía un mensaje de Trace.
Me dejé arrastrar por él hasta el callejón oscuro y maloliente donde estaba el gotcha. Tocó el código secreto en la enorme puerta de metal oxidado y de inmediato se deslizó, dejando un pequeño hueco para que entráramos. Suspiré aliviada al estar en el cálido interior.
-Vaya, pensé que no vendrían, par de tórtolos.-nos recibió Trace.
-Oh, cállate.-le espeté al tiempo que golpeaba se brazo.
Rió y chocó las manos con Lex a modo de saludo. Caminé hasta la caseta donde los demás admiraban los nuevos equipos para jugar gotcha.
-Wow.-solté al verlos.
Las caretas y las protecciones del pecho, piernas y brazos eran de un negro reluciente. Las viejas playeras de color azul y rojo habían sido remplazadas por chaquetas negras ajustadas, apiladas junto a unos pantalones de la misma apariencia. En el piso habían varios pares de botas de combate negras, formadas perfectamente.
-¡Ésto está de lujo!-gritó el rubio.
-¿Verdad que sí?-sonrió Trace.-Costaron una fortuna, pero valieron la pena.
-Hora de estrenarlos.-anunció Drew.
Me dispuse a tomar una chamarra, pero Trace me detuvo.
-Tú no, Farr. Tengo un equipo especial para ti.-dijo y me jaló al interior de la caseta.
Rebuscó dentro de una caja y al fin sacó una bolsa de plástico que me entregó.
Ahogué una exclamación cuando saqué mi equipo. Las protecciones oscuras de plástico duro estaban hechas a mi medida. También había una chaqueta impermeable con varios bolsillos y una capucha. El interior era de licra negra y tenía bolsillos ocultos. Los pantalones también eran imperbeables con licra por dentro, mientras que los cierres de ambas prendas eran plateados. Las botas de combate eran completamente negras y a mi medida. En el fondo de la bolsa había una diadema elástica negra para sostener mi cabello y un par de guantes de cuero parecidos a los que usaban los motociclistas.
-Trace, ésto es increíble. Muchas gracias.-lo abracé contenta.
-De nada.-me devolvió el abrazo.- Ahora vístete y sal para que le dé el toque final a tu uniforme.-sacudió mi cabello y cerró la puerta.
Rápidamente hice lo que me pidió y me sorprendí gratamente al ver cómo toda la ropa se ajustaba perfectamente a mi cuerpo. Me hice una coleta alta, la trencé y me coloqué la banda negra para apartar mi flequillo de la cara. Aprovechando que traía mi maquillaje, me arreglé el grueso delineado negro que se había corrido de mi ojo gracias a la lluvia y salí.
Poco a poco todos los chicos se callaron y se me quedaron viendo.
-Wow...-habló Will.
-Farrah...-dijo Wayne.
-Te ves...-prosiguió Drew.
-Espectacular.-completó Jesse.
Sonreí agradecida.
-Y sexy.-agregó Lex con una sonrisa pícara.
La sonrisa se borró de mi cara y le enseñé mi dedo corazón, causando su risa.
-Luces genial, Farr.-Trace se acercó.-Sólo te falta ésto.-de su bolsillo sacó una cajita y cuando la abrió, divisé una fina cadena plateada.
La sacó con cuidado y cuando la estiró, pude ver el colgante. La llave del juego de Alice's Great Escape oscilaba levemente, haciendo que las piedras de la pequeña tetera de adorno soltaran suaves destellos.
Sonreí.
-Trace, en serio, no es necesario...-comencé, pero me interrumpió.
-Farr, eres la primera chica que viene al Black Rabitt.-y dicho ésto, me pasó la cadena por el cuello y lo abrochó.-Y queremos darte las gracias por ser nuestra amiga.
Sonreí conmovida y al borde de las lágrimas, pues nunca nadie me había dicho algo así.
Abracé a todos los chicos y les agradecí por aquel gesto.
-Muy bien, es hora de jugar.-anunció Trace.