Dear Doctor; Touch me- Larry Stylinson (+18)

Capitulo XI.

"Consecuencias"

Despues de desconectar a su hija, Louis se encontraba en un estado horrible, su corazón dolía y no podia dejar de llorar, pero muy pero muy dentro de él, sabía que era la mejor opción.

Y aun con ese estado, Louis se tuvo que encargar de todos los tramites legales, pues no habia rastros de su "esposa" no respondía su teléfono móvil y Louis tuvo que sobre llevar todo aquello, pero no solo. Harry se mantuvo a su lado ayudando en lo que podía.

Despues de largas horas todo estaba arreglado, la niña seria trasladada a una funeraria que el hospital pagaría.

Louis se encontraba en la cafetería mirando hacia la nada, sus lagrimas rodaban por sus mejillas, su cuerpo temblaba sin que este pudiera evitarlo.

—Toma un poco de café Louis—susurro Harry acercándole el vaso.

—Gracias, pero no creo poder comer absolutamente nada—comento el castaño.

Harry deslizo su mano por la mesa y tomo la de Louis logrando que el castaño lo mirase.

—Hiciste lo mejor. Lo sabes ¿No es así? —elevo las cejas el rizado.

—No lo se Harry—murmuro el castaño—¿Realmente fue lo mejor?

—Si Louis. No tenia salvación. La posibilidad de que ella despertase era del 1% y si lo hacía jamás volvería a tener una vida normal—Harry suspiro—Fue lo mejor, como medico y como padre lo sabes.

Louis asintió con tristeza.

Coloco su otra mano encima de la de Harry y lo miro a los ojos.

—Gracias por estar conmigo este día. Ha sido demasiado difícil, creo que sin ti no habría podido soportarlo...

Antes de que Louis terminara de hablar, lo sorprendió una fuerte bofetada.

—¡MALDITO SEAS LOUIS TOMLINSON! ¡ASESINASTE A TU PROPIA HIJA! ¡LA MATASTE!

Louis miro a su esposa quien estaba demasiado enojada y llorando con desesperación, estaba demasiado furiosa.

El castaño soltó un gran suspiro, estaba apunto de decir algo cuando aquella mujer lo volvió a golpear en el rostro con todas sus fuerzas.

—¡ERES UN ASESINO! —grito ella con desesperación.

—Nuestro hija no tenia salvación. Ella jamás despertaría y si lo hacía, realmente jamás volvería a ser la misma, estaría en una cama....

—¡ESA NO ES UNA JUSTIFICACIÓN PARA MI! ¡LA MATASTE! ¡TOMASTE ESA DECISIÓN POR TI SOLO! ¡YO SOY LA MADRE! ¡ESTO TE VA A COSTAR MUY CARO! ¡ASESINO!

La mujer comenzó a golpearlo y a jalarlos a los ojos de todos aquellos curiosos que observaban tan escena.

Louis no se defendió, solamente aceptaba los golpes, los insultos y malas palabras de su esposa. No tenia ánimos para estar peleando. No quería hacerlo.

—¡Te voy a demandar por asesinato! —gruño la mujer demasiado molesta—¡JAMAS VAS A VOLVER A EJERCER!

—¡¿Por qué no cierra la maldita boca?! —dijo Harry en un tono de molestia.

Tanto la mujer como Louis miraron al rizado quien tensaba la mandíbula.

—¿Usted que derecho tiene de venir aquí a reclamar? ¿Quién se cree usted? —el rizado apretó sus puños.

—¡SOY LA MADRE! —grito

—Una madre que quiso asesinar a su hija...

El silencio se formo entre los tres.