Unforgiven☆

Damage

D | Damage

—Diálogos.

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Warning: Violencia

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Kim Matthew es una estrella en ascenso, dentro del intricado y confuso mundo de la UFC, con un increíble record de veinte victorias, y cero derrotas, no está de más decir que ha salido de cada combate, derribando a sus oponentes con eficaces Knock Out. Pero su fuerte temperamento lo precede dentro y fuera del ring. Se le conoce como BM, el monstruo imbatible que no pierde un combate, ante nadie.

Muchas veces había sido acusado de no poder controlar su ira, e irse a los golpes con quien se le cruzase en el camino. Tanto periodistas, fans, u otros oponentes de su entorno. La UFC ya le ha sancionado, pero su record perfecto dentro del cuadrilátero y su eficacia le han granjeado un gran número de seguidores.

Ahora sentado en la sala de su casa, intenta darle mimos a su pequeño novio Jseph, pero esté está más interesado en ver una película.

—En serio... —Soltó una risita el más pequeño—, ya viene la parte donde mata con un lápiz.

—¿Qué no has visto esa película como mil veces? —Susurró sobre su cuello, dando pequeños mordiscos—, ya deja eso, requiero tu atención aquí conmigo.

—Matt... —Se giró a mirarle, él más alto levantó ambas cejas de forma constante—, ahora no puedo, tengo que ir a ver algunos pendientes en el orfanato.

—¿Qué no puede ir alguien más? —Volvió a besarle el cuello mientras lo tiraba sobre el sofá—, dile a otro que vaya, y sé mío...

—¿Qué ya no soy tuyo? —Soltó una risa, mientras se deja besar, sus manos se fueron a la enorme espalda de su novio—, en serio, no puedo, pero prometo volver rápido, compraré algo rico.

—¿Para la cama? —Se levantó a mirarle con una ceja alzada.

—Para cenar... —Sonrió divertido mirándole—, que pervertido eres.

—Ah, qué decepción. —Besó su boca profundamente—, ve de una vez y vuelve pronto, esta noche te lo haré tan fuerte que mañana no te podrás sentar.

—Más te vale que sea así, me has tenido en abstinencia por un mes. —Entrecerró los ojos, en un reclamo silencioso.

—No me mires como si fuese mi culpa. —Sonrió ampliamente—, sabes que no puedo tener sexo previo a un combate.

—¡¿Pero un mes?¡ maldita sea Matthew... —Le abrazó por el cuello—, es demasiado para mis hormonas revueltas y, tuve que aguantarme todas las ganas de arrinconarte, cuando salías desnudo de la ducha a la habitación, tener que ver tu espectacular cuerpo fue una tortura para mí.

—Mmm.... —Sonrió divertido—, tenía que asegurarme que no olvidaras lo buenmozo que es tu novio.

—Eres un menso. —Soltó a reír—, debería castigarte por todo eso.

—Castígame en la cama. —Bromó besando la punta de su nariz.

—Lo voy a pensar. —Jseph dijo mientras le acariciaba el cabello—, ¿no quieres venir conmigo? Haremos las vueltas más rápido. Estoy seguro que la gente se alegrará de verte.

—No creo que sea buena idea... —Se desplomó sobre él, reposando su cabeza sobre el pecho del más bajito—, después de haber golpeado a ese periodista, la gente ahora está un poco molesta, debo dejar que las aguas se calmen.

—Sí, mi amor. —Siguió con eso que hacía en su cabello—, sé que no fue tu culpa, ya hablamos de eso, ese hombre fue muy irrespetuoso.

—Pero debería ser más tolerante.