ʀᴇᴇɴᴄᴜᴇɴᴛʀᴏ

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Como un domingo cualquiera pensaba pasarmela en un parque cerca de aquí para despejarme un poco, pero mis planes no resultaron ya que uno de los profesores me mandó un email diciendo que debería volver a hacer el trabajo sobre células porque estaba incompleto y algunas cosas mal. No me quejé ya que el me estaba dando una oportunidad para no desaprobar ese trabajo.

Comí unos fideos instantáneos y dormí unas tres horas para rehacer el trabajo tranquila. Tomé mis cosas y me fui al café-internet. Por lo general la gente va allí a jugar videojuegos pero yo solo aprovecho su internet y por supuesto, su bajo precio.

Me pedí un Ice Americano y me senté en la computadora más alejada de los chicos que juegan energéticamente. Me puse los audífonos y reproduci mi lista de reproducciones muy bajito para poder concentrarme bien.

Empecé leyendo todo el trabajo, son 5 páginas. Leí las notas que el profesor puso para guiarme y así poder hacerlo bien. Iba solo a cambiar unas cosas y agregar otras, pero al final decidí volver a escribirlo. Por suerte el word me corrige las palabras que escribo mal.

Agena a todo mi arrededor, me enfoco solo en el trabajo y en el Ice Americano que bebía. El trabajo no me resultó tan dificil ya que tenia mas o menos una idea de lo que estaba bien poner y lo que no. Lo hice de cinco páginas también y se lo mande de nuevo al profesor no sin antes releerlo como tres veces.

Faltaban 30 minutos para que sean las 19, así que decidí aprovechar y jugar una partida en algunos juegos random de lucha y disparos. No soy muy buena jugando, pero podría ganar de vez en cuando contra alguien.

Cuando son las 19 tomo mis cosas y voy hasta una de las cabinas para pagar las tres horas que estuve ahi. Le di las gracias al señor y me despedí. Mientras caminaba por el pasillo para salir del lugar, me detengo al ver una de las 80 pinturas que hay colgadas solo en este pasillo. Es de una mujer que parece ser consumida por un árbol, los colores son muy alegres y me parece muy entretenido verlo. Seguí mirando los cuadros desde mi lugar, hay mucho talento en todos ellos, yo ni en mil años podria hacer algo como eso.

De pronto una figura parada a mi derecha me perturba, siento como me mira y me da miedo ver quien es. Me hago la tonta y sigo viendo las pinturas, pero no puedo evitar sentirme incomoda, para el colmo no hay nadie más en el pasillo.

Un poco harta y con miedo, giro mi cabeza muy rápidamente caminando hacía atrás con intensiones de salir del lugar. Pero en cuanto veo quien es quedo petrificada, mi cuerpo solo queda inmóvil ante su presencia. El me mira de pies a cabeza con mucha confusión, como si no estuviera convencido de que soy.

Su rostro cambia cumpletamente después de mirar mi cuello, seguramente se aseguró viendo los tres lunares que tengo en ese lugar. Veo como sus labios tiemblan y los ojos se le ponen húmedos, cosa que no tarda en hacerme llorar.

Cuando la primera lágrima cae el se acerca a mi y me abraza. Se siente como estar en la gloria, se siente lo mejor que me a pasado en mucho tiempo, se siente bien.

Lo abracé con mucha fuerza, el parece no querer soltarme. Siento sus lágrimas en mi hombro desnudo. Han pasado 7 años desde que pude sentirlo, desde que pude abrazarlo.

—Mi Chris—susurro sobando mi cabeza en su pecho.

—Oh, mi Alice—escucho como llora con mayor intensidad.

Se separa de mi y me toma del rostro. Mira cada detalle de mi con una sonrisa y el rostro empapado de lágrimas. Vuelve a abrazame y se ríe sin poder creerlo.

—Eres tu—me habla en ingles y no suelta mi rostro.

—Si, lo soy—mi voz sale desastrosa por estar llorando.

𝑰𝑵𝑬𝑭𝑨𝑩𝑳𝑬 [𝑺𝒕𝒓𝒂𝒚 𝒌𝒊𝒅𝒔] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora