(editando) ¬ 365 Fresh ¬

_eLebeN_

En agradecimiento a los 1k 💙

Una vez terminado el desayuno, pusieron manos a la obra e iniciaron a ordenar toda la casa.

Entre los cuatro se dividieron las tareas y las habitaciones. Ya luego de casi una hora limpiando, barriendo, tirando, y trapeando, la cabaña quedó como nueva, eso sí, los jóvenes quedaron hechos agua prácticamente.

— Bueno, ¡a la cochera! — Exclamó TaeHyung de repente, levantándose del sillón donde estaban tirados.

— Déjanos descansar un poco — Se quejó la taiwanesa.

— Pueden hacerlo después, ahora vamos, la curiosidad me mata — Insistió el mayor.

Los otros dos se levantaron, dispuestos a seguir a Kim, excepto la menor, quien estaba por volver a echarse al suelo a descansar, pero en cambio, el castaño la alzó sin su permiso y la dejó en su hombro.

— ¡Bajame ahora mismo, TaeHyung! — Exigió, golpeando su espalda.

— Lo haré cuando encontremos el cuarto de cámaras, pero hey, no estás tan pesada como pensé — Admitió, dirigiéndose a la salida.

Annte el comentario, Zhou solo golpeó el hombro del contrario, pero no tardaron mucho en llegar al lugar donde guardaban su vehículo, mismo en el cual, el más alto bajó a la extranjera, y les proporcionó una mirada a sus otros amigos.

— ¿Preparados?.

— Preparados.

Sin más, los jóvenes abrieron la puerta del garage, el cual estaba algo escaso de luz, pero que de todas formas, era iluminado por el sol del mediodía, que entraba directo por la ventana.

— Cuanta mugre hay aquí — Protestó Jeon, caminando entre algunas cajas, algunas vacías, otras no — Algún día deberíamos ver que cosas se ocultan en este lugar — Atinó a decir, explorando todo con la vista.

— ¡Aquí hay algo! — Anunció Sana.

Sus contrarios se acercaron rápidamente hasta donde ella se encontraba, comprobando que claramente, allí se hallaban las computadoras que estaban conectadas a las cámaras.

— ¿Quién es bueno en las computadoras? Yo desaprobé computación — Confesó Tae.

— Y tu eres el mayor — Se burló Minatozaki — A un lado novato, aquí va una hacker.

Se abrió paso entre ellos, y tomó asiento frente a las tres máquinas que estaban sobre una gran mesa de madera.
Tocó algunos botones, y la encendió, ingresando en el programa correspondiente, comenzó la búsqueda.

— De acuerdo, sólo debo tocar esto de aquí, y... ¡Listo! Con ustedes, las grabaciones de hace dos semanas atrás — Informó, recostadose en la silla.

Sus amigos festejaron su victoria.
Pero esto no duró demasiado, pues ahora, era momento de ponerse serios, y ver qué sucedió realmente el día anterior.

La noche pasada~

— Solo una vez — Secundaron.

Los cuatro tomaron la bebida, se miraron entre sí, esperando ver los efectos, pero nada pasó.

Bueno, al menos por un segundo, pues al instante, comenzaron a reírse fuertemente, se subieron a los sillones y comenzaron a saltar.
Sana corrió a la cocina y llevó consigo las botellas de alcohol que compraron, Jungkook agarró una, y mientras la tomaba, los demás gritaban "fondo, fondo, fondo", al terminarla, la arrojó a la pared más lejana, haciendo que esta se parta en mil pedazos. Por suerte nadie salió herido.

Los otros tres imitaron su gesto, salvo Tzuyu, quien no pudo llegar a la mitad, y terminó escupiendo todo, aún sin dejar de reírse.

De todas formas, no se contuvo de tirarla contra la pared de la chimenea.

De repente, TaeHyung se levantó, y salió de la casa, yendo a la parte de atrás mientras era seguido por el trío.
Éste se tiró al agua sin dudarlo, el de cabellos negros se quitó la playera junto a sus zapatos, y luego saltó también, siendo imitado por las dos chicas, quienes se sacaron los calzados y después si, saltaron.

Allí comenzaron una batalla de agua, uno hundía al otro, salpicandose entre sí, explotando en carcajadas y dejando que el alcohol fluya por su sistema.

Al cabo de más de una media hora, salieron, a excepción de Jungkook, quien pareció quedarse sin batería y terminó recostado en el muelle de madera.

Las extranjeras y el surcoreano fueron por el costado, dirigiéndose a la parte del frente, donde allí afuera, ingresaron al auto, se pusieron a jugar con los controles, la bocina, y los asientos, permitiendo que sin querer, suceda un acalorado beso de tres.

Casi una hora después, ahora solo Sana y TaeHyung salieron en busca de otro destino, pues la menor se quedó ahí, profundamente dormida.

Entraron a la casa, la chica tomó dos sartenes y los golpeó entre ellos, el muchacho hizo lo mismo, pero con una olla que había por ahí y un cucha
Ambos corrieron a la habitación más cercana, Tae saltaba en la cama, y Minatozaki estaba en el armario, abriendo y cerrando la puerta una vez tras otra.

Hasta que finalmente, ella se quedó dormida ahí mismo, tapada con algunas prendas de pies a cabeza.

En la actualidad~

— Aquí se ve que saliste corriendo al bosque, pero hasta ahí se ve en las cámaras — Argumentó la japonesa, en un tono de voz bajo.

— Supongo que no es tan malo como-... Esperen, hay alguien  — Alertó el menor.

Frente a las computadoras podía verse como un hombre llegaba corriendo y golpeaba con desesperación la puerta de atrás para entrar a la cabaña, hasta que de repente, algo parecido a una piedra voló por a su cabeza y cayó inconsciente.
Repentinamente, TaeHyung llegó y lo hizo arrastró hacia adentro, lo llevó al sillón, y allí golpeó su cabeza repetidas veces, dejando que salga sangre de sus ojos, su nariz, y su boca.

Después de quince minutos haciendo eso, frenó, lo tomó de la pierna, y lo arrastró a las afueras, donde las cámaras no podían grabar.
Luego de unos segundos, volvió a entrar, fue al baño, tomó una toalla, y limpió el rastro que dejó. Nuevamente salió, se internó en quien sabe dónde del bosque, y ya no se lo vio más.

Todos, absolutamente todos, incluso Kim, se quedaron atónitos al ver eso, pues jamás esperaban encontrarse con algo así.

— Al menos no todos hicimos tantas idioteces como pensé — Aseguró Jeon, con la vista puesta en el computador.

🍒

Nimin_36