Una Chica Diferente

Esto es guerra.

-Debes estar bromeando. -Mia me ignoro por completo mientras me ponía un montón de prendas en las manos. -A esto le sobran 3 cm de tela para llamarse ropa interior.

-No exageres, Nora. -buscaba aun mas prendas entre los montones. -Te veras fabulosa con esto.

-Ni loca, no saldré con esto en público. -sostuvo entre sus manos un traje de... Podría decir que parecía ser una versión femenina de Batman, pero con mucha menos tela. -No.

-Okay, ¿y este? - cambio en traje de murciélago por otro mucho más pequeño de color azul y rojo.

-Ni aunque me pagaras. - lo aparte de mi vista con un gesto de la mano.

-Ay, Nora, te verías fantástica de Mujer Maravilla. ¿Que tal este?

Ni siquiera me moleste en mirar el nuevo disfraz que había puesto en sus manos.

-¿Por qué no me disfrazo de una bruja normal y ya esta?- dije, deseando que la tortura terminara pronto.

-Oye, podrías cooperar un poco, después de todo esta venganza fue tu idea. - me puso otro montón de ropa entre las manos.

-Mi idea no era llegar vestida como prostituta al baile de Halloween. -le recordé.

-No, pero tu idea era demostrarle a Daniel que no eras la chica tonta que el creía ¿no?

-Solo quiero que deje de molestarme. -examine la posibilidad de usar un disfraz de vampiro que había colgado al otro lado de la pequeña tienda de disfraces.

-Y para ello debemos conseguirte una pareja para el baile y que te veas increíble. - Mia seguía buscando entre un montón de ropa.

-Creo que encontré algo. -le dije.

El traje era un poco sencillo, pero sin duda cubría mas de lo que la mayoría de disfraces en esta tienda. La parte de arriba se componía de un bonito corsé de color negro con detalles rojos y brillantes. La parte de abajo era una falda, demasiado corta para mi gusto, con muchas capas delgadas de tela casi transparente y con más brillantes. Podía conseguir unas medias mas largas que no dejaran nada al descubierto y la capa me ayudaría a cubrirme si es que llegaba a sentirme demasiado incomoda.

-Uuuy que bonito. Me encanta. ¿nos lo llevamos? -Mia parecía complacida con mi elección.

Lo pedimos en mi talla, compramos unas medias largas, guantes negros y también unos dientes de vampiro falsos. Mia se encargaría de maquillarme y de conseguirme una pareja y yo pondría en marcha el plan "Alejar a los idiotas".

-Muy bien, solo falta conseguirte un chico muy ardiente para que vaya contigo, y de eso me encargo yo. -Mia me guiñó un ojo.

Regresamos temprano a casa aquel día, pues teníamos clases por la mañana.
Por suerte me había librado de tener que ser la tutora de Daniel toda la semana pasada, pero no tendría tanta suerte para esta. Sin embargo, por una vez me alegraba tener que quedarme en la escuela por la tarde con Daniel, así no tendría que acompañar a Mia a buscarme una "pareja perfecta" para ir al baile.
Llegue puntual a la clase de biología y me senté en el tercer asiento de la segunda fila, era el lugar perfecto para perder de vista al mujeriego estrella de North High y evitar que se sentara a mi lado, pues con el tiempo había aprendido que le gustaba sentarse la orilla o al fondo en cada clase.
Ese día tocaba estudiar las diferencias entre los organismos autótrofos y heterótrofos, un tema que ya me había estudiado mas que un par de veces y comenzaba a resultar tedioso. Fingí estar muy interesada en mi libro de texto mientras me recargaba en una mano y con la otra hacia dibujos sobre las fotos de animales en el libro.
Biología era una de mis clases favoritas en el mundo, pero debía admitirlo, comenzaba a quedarme dormida.
Hasta que algo me dio en la cabeza, sacándome de la somnolencia. Sobre el libro había una pequeña bolita de papel que parecía tener algo escrito. Con mucha discreción, fijándome que ni mis compañeros, ni el profesor lo notaran, desenvolví la pequeña bolita de papel para leer lo escrito en su interior.
Al desenvolverla solo encontré una carita feliz muy mal dibujada con tinta negra.