El transporte nos recogió temprano, al día siguiente realmente estábamos contentos, bromeamos, cantamos y nos divertimos, durante las dos horas del trayecto, siendo como las diez de la mañana llegamos, a una mansión enorme con caballos y ganado, la casa estilo colonial se alzaba frente a una hermosa piscina, provocaba lanzarse en ella , a cada lado del camino flores de colores, lo delimitaban, estacionamos, cuando nos bajamos sentí mucho calor, realmente me gustaba, siempre he pensado que vivir en un clima cálido es más grato que el frío, nos recibió un empleado un capataz, el nos condujo al interior de la casa, era una mansión lujosa, muy amplia con patios internos y grandes ventiladores en los techos, nos condujo a una gran habitación, dispuesta con camarotes, todos nos acomodamos y peleamos las literas, parecíamos niños pequeños , discutiendo por la acomodación, nos cambiamos y duchamos, nos vestimos con pantalonetas y camisetas livianas, regresó el empleado que nos condujo hasta una sala amplia rodeada de ventanales, desde la cual se podía ver la piscina, allí nos esperaba Song Joong Ki, el cliente, no estaba solo, dos hombres lo acompañaban, como de su misma edad , uno de ellos blanco y afeminado , el otro bajito, moreno y acuerpado, ellos sonreían, se notaban ansiosos, cada uno sostenía un vaso de whisky en las manos y alrededor pude ver aun varias botellas sobre la mesa, sin abrir , sobre la mesa colocada estaba una pequeña charola plateada, llena de coca.
-Como les dije pagué lo mejor, que pude encontrar. Afirmó orgulloso el cliente
Los otros dieron su aprobación mientras nos miraban lascivamente
-Sírvanse -nos ofreció el afeminado, refiriéndose tanto al whisky como a la droga.
Obedecimos, tomamos e incluso todos, nos drogamos un poco, sin embargo Michael, empezó a beber y a aspirar, cada vez en forma más seguida y rápida, siguiendo el compás de nuestros anfitriones.
Después me enteraría que Song Joong Ki, era hijo de un expresidente del país, un joven rico, adinerado, con el mundo a sus pies, no hacía nada, había estudiado alguna carrera referente a economía , en el exterior, pero no ejercía, simplemente vivía de la renta, de los réditos de los negocio familiares, dedicándose a la juerga y la vida desenfrenada, los que lo acompañaban eran sus amigos de fiesta, pertenecientes a su mismo nivel, se trataba de la elite coresna, los hijos de los dueños del país. La vida es extraña, pensé, aquí estábamos los dos lados opuestos de la sociedad, los hijos de los ricos, con sus fortunas, sus casas, sus mansiones, sus viajes, el mundo se abría para ellos como un abanico de posibilidades y estábamos nosotros, los hijos del pecado, los sin futuro, solícitos, complacientes, dispuestos a unirnos a ellos en una orgia de alcohol, droga, placer y sudor, simplemente porque nos habían comprado.
¿Es más triste el que compra? ¿O el que se vende? No estaba seguro, sin embargo sentí lástima por ellos.
-Queremos verlos a ustedes haciendo cositas- afirmó el afeminado.
Los demás vitorearon y se rieron, era hora del show, comenzamos a desvestirnos rápidamente, nos colocamos uno al lado del otro, aproveché y me ubiqué al lado de Jongin, formamos parejas entre nosotros, los mellizos, Chanyeol y Baekhyun, mi novio y yo, empezamos a besarnos a morbosearnos entre nosotros; sugestivamente acaricié el torso de mi compañero , mientras nos besábamos, los mellizos se dedicaron uno al otro , mientras Chanyeol y Baekhyun hacían lo mismo, nuestro público comenzó a excitarse, sus respiraciones se aceleraban, era posible escucharlas, pasado un rato me ordenaron dejar a Jongin y unirme a los hermanos, mientras mi amigo se integraba con Baekhyun y Chanyeol, comencé a recorrer con mis labios el cuerpo de los mellizos, luego nuestras bocas se fundieron en un triple beso, aunque fue delicioso y estábamos trabajando, por primera vez desde la noche que nos ennoviamos con Jongin, yo debía tener sexo con otros frente a él , me sentí incomodo, avergonzado, sin embargo mi novio estaba haciendo lo mismo, al fin y al cabo era trabajo, de todas formas trate de establecer contacto visual con él , fui correspondido, me encontré con sus ojos, comprensivos, que de alguna forma me daban la absolución, lo ví unido a Chanyeol y Baekhyun, besándose a intervalos con ellos, de alguna forma me estimuló, fue incitante, pienso que cuando me miraba también sentía excitación, solo nuestra cercanía, estar en la misma habitación, nos generaba placer, nos estimulaba y excitaba, continúe haciendo lo que debía hacer.
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Hijos del Pecado [KAISOO]
Teen FictionEsta es la historia de Kyungsoo, un joven prostituto en la ciudad de Seúl, desde sus inicios en este sórdido mundo, su ingreso a un burdel exclusivo de la capital, la relación con sus compañeros, con los clientes, el descubrimiento del amor y demás...