¡Oye tú, tú diario!. ||Erick Brian ||.

¿Me perdonas?

Desperté, y no estaba en el sofá si no en una cama, giré mi vista hacia los lados y pude reconocer la habitación, era la de Erick.
Seguro que él había llegado, me giré y él no estaba dormido hay.
Salí de la habitación, y bajé hasta la sala, él estaba dormido en el sofá, tapado con una pequeña cobija, me dio mucha ternura ver eso, me acerqué a él.

— Oye. - beso su mejilla. Él abrió un ojo, y extendió sus brazos indicándome que me acostara junto a él.

— Buenos días. - me abrazo.

— ¿Por que dormiste aquí?. - me acurruque en su pecho.

— Cuando regrese a casa, te vi dormida en el sofá y pensé que te sentirías incómoda, así que te lleve a mi habitación.

— ¿Por que no dormiste conmigo?

— No me pareció correcto. - beso mi cabeza.

— ¡Oye!, ¿En donde estabas anoche? - trate de sonar algo enojada.

— Luke hizo una fiesta.

— ¿A qué hora llegaste?

— A las 3:00 a.m

— ¿No tienes sueño? - ríe.

— Algo - bostezó. - Oye, ¿Por que estabas aquí?, ¿Ya te perdono Chris?

— Vine a pedirle disculpas, comenzó a llover y me dijo que me quedara acá, pero aun sigue enojado conmigo. - suspire.

— Ya se le pasará. - dijo mientras trazaba círculos invisibles en mi mano.

— Eso espero. ¿Te importa si cocino algo? - el negó, y yo me dirigí a la cocina.

Comencé a preparar hot cakes, cuando termine deje el de Erick y el mío en la mesa.  El de Chris lo hice diferente , en el había una carita triste, y en el plató decía "Me perdonas, te quiero" escrito con frutas, deje el plato en la puerta y la toque para después esconderme rápidamente.
Él abrió la puerta y miro el plato, una sonrisa apareció.

— Se que estas hay, sal. - dijo mientras tomaba el plato que estaba en el piso.

— ¿Y?, ¿Me perdonas?. - me acerque a él, el asintió y no pude evitar abrazarlo ocasionando que casi tumbara el plato que tenía en las manos.  - Gracias, Gracias, Gracias.

Ríe. — anda a desayunar, tu mamá no tarda en llegar por ti. - beso mi cabeza, extrañaba eso.

(.....)

— Oye Joey, ¿llegaste a sentir algo por Sahori?.- el dejo de ver la televisión y llevo su vista hacia mi.

— Realmente si la llegue a querer, aunque no lo parezca es dulce y te apoya, ella es así porque en su casa hay muchos problemas. - colocó una mueca.

— Deberías darle otra oportunidad. - me encogí de hombros.

— ¿Te sientes bien? - colocó su mano en mi frente.

Reí. — Si, es solo que ayer hablamos y no lo se, siento que esta cambiando, te quiere. - sonreí.

— Y yo a ella, pero ¿Quien asegura que cambio?.

— Tienes que descubrirlo tú mismo. - el asintió y beso mi cabeza, para después seguir viendo la película.

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