Valentin
- Estas en pedo Valen - Luana observó el paisaje que se encontraba frente a nuestro hotel.
Nos hospedamos en un lugar diferente, pero no tan alejado, del que estaban amigos y productores míos.
Mientras Luana hacia actividades de Spa y masajes que nos brindaba el hotel yo tenia planeado componer y grabar algunos temas.- ¿Te gusta? - La abracé por detrás.
- Obvio Valen pero es mucho, voy a tener que laburar a full para pagar esto.
- Ahre - Dije sarcástico - Vos no tenes que pagar nada, yo te invité - Luana se dió vuelta quedando frente a frente conmigo.
- No puedo aceptar eso - Apoyó sus brazos en mis hombros rodeando mi cuello.
- No hay vuelta atrás - Sonreí y deposité un beso en sus labios.
Cuando entramos a la habitación tiramos nuestras valijas al suelo y nos recostamos en la cama.
Nuestro cuarto tenia dos baños, uno con una bañera bastante grosa y el otro simple sin ducha.
Para la simpleza a la que estamos acostumbrados esto es otro mundo.- ¡Valen! - Me llamó Luana desde el baño.
- ¿Qué pasó?
- No puedo abrir la canilla no entiendo, no hay, me siento re paisana - Reímos.
Estuvimos quince minutos tocando por todos lados y fijándonos como es que salía el agua de esa canilla hasta que al poner las manos bajo ella salió sola.
- Ah bueno tremendo - Luana rió por nuestra falta de tecnología.
Luana
El hotel inmenso, el paisaje increíble, nunca estuve acostumbrada a ver cosas como esta, es más, es la primera vez que salgo de Buenos Aires.
Mis abuelos y amigos estaban súper contentos por el viaje, todos esperan que vuelva renovada y desestresada.
Por otro lado mi mamá se quedaba dos semanas, por lo que luego de estas mini vacaciones estoy dispuesta a hablar con ella y de ella.Valentin estaba hablando por teléfono, me acerqué y le hice señas de que me iba a recorrer el hotel.
Aún en el teléfono, sacó de su bolsillo una tarjeta y me la dió.
Al parecer era la tarjeta del hotel, supuse que la necesitaría para entrar y salir pero ni estaba segura.Entré al ascensor y habían dos mujeres, aparentaban treinta años. Las veía y me encantaban los vestidos que traían puestos, al instante recordé que yo estaba en joggings y con una remera bien berreta de Los Simpsons que decía "Mar del Plata" y reí. Las mujeres me miraban de arriba a abajo por mi look y cuando llegué a la planta baja, salí del ascensor con la cabeza en alto orgullosa de mi outfit.
- Buen día - Me acerqué a recepción.
- Buen día, ¿hay algo con lo que la pueda ayudar? - Sonrió la recepcionista.
- ¿Esto para que sirve? - Puse la tarjeta en el escritorio - No lo tengo muy claro - La chica tomó la tarjeta y transfirió los datos de esta a su computadora.
- Luana Diaz, ¿usted verdad?
- Si - Saqué de mi billetera mi documento.
- Esta tarjeta está a su nombre y le permite entrar a todas las actividades del hotel sin tener que pedir turno o pagar en el momento, en conclusión tiene todas las actividades pagas - Sonrió y me entregó la tarjeta.
- Ah bueno, muchas gracias - "Lo voy a matar" pensé.
- ¿Y?, ¿ya viste todo? - Dijo Valentin por detrás.
- Tomá, estas en pedo - Quise darle la tarjeta pero no la agarraba.
- Mira, yo me voy al lugar de grabación con los pibes, vos... - Me tomó de los hombros y me giró - Disfrutas de todo.
- Pero Valentin...
- Ya está pago, si no la usas seria derrochar plata pensalo por ese lado - Me sonrió saludó a la recepcionista y se fue.
- ¡Aproveche! - Me animó la recepcionista y yo levanté los hombros - Tome, un mini mapa para que se guíe y sepa de las actividades.
- Bueno... Muchas gracias - Agarré el mapa.